Capitulo VII

1.3K 215 49
                                    

El verano hizo acto de presencia de una manera espantosa, las lluvias no han parado desde ya hace tres días, el frio se puede sentir al igual que la humedad en el ambiente, mis mejillas están completamente frías, tan frías que inclusive las siento mucho más que antes, suelto un resoplido, estos días lluviosos son deprimentes para mí.

—Jiminie —y aquella voz logró sacarme de mis pensamientos sobre el frio.

Sus labios se curvaron en una sonrisa, iba a la universidad, al igual que yo, hoy no camino, hoy tomo el autobús, al igual que yo, y nos habíamos topado, destino, ¿qué hice para merecer está tortura?

—Yoongi... —murmure su nombre, y él miro de inmediato el sitio a un lado mío, desocupado.

No me pregunto si quería que se sentase a mi lado, esa clase de preguntas estaban fuera de nuestro vocabulario, pero solamente por esa vez, desee que él no se sentase a mi lado, desee que se quedase en donde estaba, que ni siquiera hubiera notado mi presencia, pero por supuesto, no todos los deseos se cumplen.

—Odio mojarme —comento mientras tomaba asiento, rozando ligeramente su costado contra el mío, sentí mi rostro calentarse, tragué saliva, debía calmarme, es sólo contacto, sólo eso, nada más—, pensé que caminarías.

Parpadee un par de veces al escucharlo decir eso.

—No estoy tan loco como para caminar bajo la lluvia —mencione—, podría atrapar un resfriado.

Él soltó una suave risa.

—Uno nunca sabe —me miro a los ojos, pero yo no pude resistir su mirada, giré mi rostro hacia el ventanal de mi lado izquierdo—, últimamente... pareciera como si quisieras evitarme.

Abrí los ojos en grande ante sus palabras.

—¿Qué? —volví a regresar mi mirada hacia él—. No seas ridículo, Yoongi.

—Es que en verdad pareciera que lo haces.

—¿Por qué lo dices? —Yoongi no me respondió—. Tal vez es solamente imaginación tuya, no te estoy tratando de evitar.

—¡Claro que lo haces! —me reclamo.

Dejo de mirarme para ver hacia el frente.

—Antes pasábamos tiempo juntos —dijo en voz baja.

—Antes no tenías pareja —me defendí, él relamió sus labios rápidamente, tal vez había dicho algo que no debía, pero era la verdad, él no me debía decir algo contrario—, ¿cómo están las cosas con Gunji?

Me felicite por no haber mordido mi lengua al mencionar su nombre, estoy celoso, muy celoso, no puedo evitarlo, ese chico era perfecto para Yoongi, más de lo que yo, jamás podré serlo.

—Van bien —fruncí levemente el ceño al escucharlo decir aquello en tono bajo, su voz era rasposa al responder, y era como si no quisiera tocar el tema de su relación.

—Pues parece todo lo contrario —él me miro de soslayo.

Sé que él esta molesto por algo, lo sé porque inclusive intenta reclamar mi ausencia a su alrededor, lo sé porque en sus ojos se ve ese ligero toque de tristeza y preocupación, quizás podría tratarse de un problema en su relación con Gunji, pero quizás también podía estar totalmente equivocado.

—Discutí con Gunji —esas fueron las palabras que salieron por sus labios, soltó un suspiro y después giro su rostro para mirarme de frente—, hace un par de días de eso.

—¿Y por qué apenas me lo dices? —diablos, no quería sonar desesperado, pero Yoongi siempre me decía todo, al igual que yo a él, bueno, casi todo.

—Por eso te digo que parece que me evitas —respondió—, he tratado de buscarte inclusive por la universidad, pero nada, cuando pregunto por ti, me dicen que te has ido o ni siquiera saben en donde puedes estar —bufo, ¿en verdad por eso se enojaba?

—Yoongi, no siempre estoy disponible —mentira, para él siempre lo estoy, inclusive en momentos en los que debía preocuparme por mí—, perdón si es que esto te molesta.

—Sé que no siempre estarás disponible, pero —apretó sus labios—, en verdad necesitaba hablar con alguien.

Todos necesitamos hablar con alguien, inclusive yo quisiera que él supiera todo lo que está aconteciendo en mi interior, me encantaría que supiera que me encuentro casi siempre llorando por mi corazón roto, me gustaría que supiera que no estoy de acuerdo con su relación con Gunji, me encantaría que supiera que lo amo, pero... algunas cosas simplemente no pueden salir de mis labios, no cuando sé que inclusive podría alejarlo de mí.

¡Maldita sea, Jimin! Deja de pensar en tus problemas, sólo por ahora, sólo por ahora...

—Trataré de estar para ti —y lo haría, aunque de sólo mirarlo a los ojos siento ganas de llorar, siento ganas de odiarlo.

Quiero odiarte, Min Yoongi, quiero verte como solamente un amigo, pero hace mucho que no puedo, mis sentimientos crecieron demasiado, y duelen, porque sé que ahora alguien más es dueño de tus sonrisas.

—Gracias, Jiminie —me dedico una sonrisa al decir aquello—, eres un gran amigo.

Mis ojos picaron al escuchar lo último.

Eso es lo que hace un amigo, ¿verdad? Escuchar los problemas, ayudarles a resolverlos, llevarse agradecimientos, sólo soy un amigo ante sus ojos, sólo un confidente más, una mano amiga, un buen consejero, sólo soy eso para él, sólo un amigo.

Lo escuche hablar, habían discutido por una tontería, Yoongi detesta que fumen, y Gunji era muy distinto, le gustaba fumar de vez en cuando, y lamentablemente, a Yoongi había llegado el aroma del cigarrillo que Gunji se había fumado cuando iban a darse un beso, discutieron, y Yoongi no sabía qué hacer, quería disculparse, por más que quisiera decirle que no debía de hacerlo, él se negaría ante mis palabras, termine por decirle que lo hiciera, que pidiera una disculpa a su novio, pero en todo ese tiempo transcurrido, no deje de sentir un enorme dolor en el pecho, eran punzadas, que iban y venían y se expandían en mi cuerpo, no entendía lo que me estaba pasando.

Debía ir al médico después.

Pero por ahora, lo importante era ser parte de la vida de Yoongi, aunque fuese solamente durante los minutos del viaje en el autobús.

Peach Blossoms  ||YoonMin||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora