ㅤㅤㅤㅤㅤ𓂃 ☆ 𝑵𝑰𝑵𝑬𝑻𝑬𝑬𝑵.

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Taeyong miró la prueba y cerró los ojos llenos de impotencia

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Taeyong miró la prueba y cerró los ojos llenos de impotencia.

─¿Qué dice?─ le preguntó Seulgi sintiéndose culpable por orillar a Taeyong a esta situación.

─Dio positivo.─ Seulgi se llevó las manos a la boca. Taeyong temblaba abrazándose a sí mismo.

─¿Y tú cómo te sientes?

─¿Qué cómo me siento?─ Taeyong se dijo a sí mismo. ─Tu cómo crees, me siento como la mierda, ¡¿por qué estas cosas me pasan a mí?!─ gritó golpeando la pared. ─¡Todo me sale jodidamente mal!

─Tranquilizante Taeyong, no es tan malo, siempre quisiste tener un bebe.

Él la fulminó con la mirada. ─¡Quería un hijo de Yuta, no de un hombre que no conozco!─ la tomó por los hombros. ─¿Qué voy a hacer ahora?, no lo quiero.

─No digas eso.

─No sé quién de todos los que me acosté es su padre─ lloró. ─,ni siquiera recuerdo sus rostros o nombres, ¿qué le voy a decir cuándo pregunte?

─Eso quiere decir que tendrás al bebe.

Taeyong asintió. ─Que me queda.─ se apartó para ponerse su saco. ─Iré a hacerme unos análisis que me saquen de la duda y sean certeros.

─Te acompañó.

─Prefiero ir solo esta vez, pero gracias Seulgi, no lo hubiera sabido sino me lo dices.

Taeyong tenía ganas de estrellar su cara contra la pared, como había sido tan idiota y dejarse embarazar por cualquier hombre, pero esto era culpa de Yuta, de nadie más, todo era culpa de Yuta porque él lo engaño.

Tres días después sólo le afirmaron lo que ya sabía, tenía casi un mes de embarazo, lo más probable es que fuera de su tercer amante, deseaba que fuera así y no de ninguno de los hombres casados con los que se había revolcado.

¿Acaso era un deja vu?

Miró a la secretaria de Yuta caminar con una tarta y se le hizo agua la boca, los antojos venían fuertes.

─Buenos días señor Taeyong.─ dijo ella haciendo una reverencia y pasando a su lado.

─Buen día.─ respondió él. ─¿Es para Yuta?

─No precisamente, es para el pequeño Jaemin.

─¿Trajo a su hijo aquí?─ Taeyong le preguntó indignado.

─Si, tal parece que los señores Nakamoto quieren conocer a su nieto. Ambos están en la oficina con Yuta y el señor Mark.

Taeyong apretó los puños "Maldito infeliz, estúpido Yuta," gruño para sus adentros, "qué se pudran todos."

Camino hasta su oficina y dejo su portafolio en la mesa, realmente odiaba esto, nunca le había gustado inmiscuirse en asuntos de la empresa, por eso había cedido todo a Yuta, pero también había arruinado eso él infeliz.

Porque eso era lo único que era Yuta para Taeyong.

Un infeliz, un maldito idiota, un desgraciado, una escoria, una mierda, una porquería sin valor y muchas cosas más entre ellas, el amor de su vida.

Las arqueadas lo invadieron de nuevo y tuvo que correr al retrete por segunda vez en el día.

Estar embarazado era horrible, no saber quién era el padre de su hijo era aún peor.

Estar embarazado era horrible, no saber quién era el padre de su hijo era aún peor

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𝘁𝗿𝗮𝗶𝗰𝗶ó𝗻 ꗃ᤻ yutaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora