No pude esperar para mandarte otra carta, quería y necesitaba hacerlo Lamento que tu cuervo te despertará tan temprano, ¡lo siento! Cómo compensación te hice unos mochis, espero y te gusten Pero oye, enserio. ¿Cómo es que eres tan perfecta?, cada día haces que me enamoré más y más de ti ¡Te quiero!
Atentamente: Una persona que te ama mucho. ♡
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Bostezaba mientras leía la carta que tenía nuevamente un corazón al final, era muy temprano y necesitaba descansar para poder ayudar a las niñas de la finca mariposa, tomo la bolsa en la cual iban los mochis dentro, al abrirla pudo ver que eran tres, saco uno y lo llevo a su boca, sintiendo el delicioso sabor deleitando a su paladar, quién fuera que hacía todo eso haría que se enamorará al final, no le importaba si era chico o chica.
Al final mejor optó por levantarse, solo había dormido unas horas pero eran suficientes, además de que la comida que le dieron le ánimo rápidamente y le quito parte del sueño, lo bueno de haber visitado algunas veces la finca es que sabía dónde quedaba el baño, así que fue hasta ahí y se dio una ducha rápida con agua fría para poder despertarse del todo, una vez termino se seco y se puso nuevamente su uniforme junto a su haori.
Se fue hacía el patio de la finca y se sentó, observando cómo apenas los primeros rayos del sol se hacían presentes mientras que las hojas de los árboles se mecían por el suave viento que había, puso su codo encima de una de sus piernas y recargo su cabeza encima de la palma de su mano, la paz que en esos momentos sentía era increíblemente relajante, se sentía cómo si todo estuviera en calma y sin ninguna distracción o peligro, que buena fantasía era esa. Ojala fuera así, sin demonios acechando por la noche en busca de "comida" que eran los humanos, sin tener que arriesgar su vida y morir en el intento de matar a esos seres de la noche.
Suspiro pesadamente y siguió observando el amanecer, saco la bolsa dónde estaban los deliciosos mochis y empezó a comerlos, de verdad que eran una delicia, los comía lentamente para disfrutar de su sabor todo lo que pudiera.
¿Disfrutando de la mañana?-La voz de una pelinegra se hizo presente, quien venía con una cubeta.
Algo así-Respondió la Pilar mirando a la pelinegra, pronto su vista se dirigió hacía unos kakushis que venían con personas vendadas y curadas, Aoi dejo la cubeta en el suelo y se acerco a dónde ellos junto a la mayor. Después de unos minutos de dar indicaciones de que hacer y a dónde llevarlos los kakushis se retiraron.
Voy a atenderlos, ¿puedes encargarte de la ropa?-La de orbes azules miraba a ___ quién asintió y fue por la cubeta, Aoi se retiro para ir a preparar las cosas para atender a los recién llegados.
La usuaria de flores lavaba la ropa mientras en su mente tarareaba una canción. Aún que no sabía que de lejos una oji-verde la observaba con un leve sonrojo, en esos momentos tenía tantas cosas en su cabeza. ¿Le habrán gustado los mochis?, ¿se habrá enojado por despertarla tan temprano?.
En esos momentos deseaba ser la ropa que ___ estaba lavando, de verdad que esa chica la volvía loca, después de unos minutos llego su cuervo indicando que tocaba ir a la junta de Pilares. Suspiro y comenzó a seguir al ave de plumas negras, al menos ahora podría ver de cerca a ___.
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