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Capítulo Ocho: Llanto.

Lan WangJi estaba en el jardín del hospital, mirando las flores como si fueran lo único importante en su vida.

Sus amigos y familiares estaban un poco lejos de él, hablando con los enfermeros.

—Creemos que le quedan aproximadamente dos semanas de vida—Murmuró uno de los enfermeros refiriéndose a Lan Zhan—Es solo una especulación...quizás sea menos tiempo o más, depende de su fuerza de voluntad—Terminó de hablar con un extraño dolor en su pecho.

—Entiendo...—Lan Xichen quería llorar.

—Lamentamos no poder hacer absolutamente nada por él—El otro enfermero les habló.

—No es su culpa, era algo inevitable...algún día uno de mis sobrinos sería diagnosticado con esta horrenda enfermedad—Lan Qiren se sentía demasiado agobiado.

—Estaremos para él...todo el tiempo, así no se sentirá solo—Nie HuaiSang hablo con tristeza. Desde que conoció a Lan WangJi le tomó cariño.

—Lo sacaremos al jardín para que no sufra en su habitación—Nie Mingjue sonrió—Creo que sería lo mejor.

—Es lo mejor que pueden hacer por él en estos momentos—Le dijo otro enfermero.

—Si...creo que—Antes de que Lan Huan terminará de hablar fue interrumpido por unos gritos.

Jiang Cheng, Wei Wuxian, Jin ZiXuan iban corriendo mientras gritaban “entró en labor de parto, salgan del camino”

Detrás de ellos venía Jiang Yanli en una camilla, quejándose de dolor, a los lados de la camilla estaban sus padres empujando de la misma  con ayuda de un par de enfermeros.

El jardín conectaba directo con el estacionamiento y con la entrada trasera del hospital, había un camino pavimentado al centro que dividía el jardín A del B.

Los gritos se detuvieron cuando Jiang Yanli fue llevada a el pabellón de parto.

—¡Tú puedes, amor!—Gritó Jin ZiXuan.

—Cállate, imbécil—Wei Ying le dio un golpe en la cabeza y salió al jardín.

Se sentó en una de las bancas suspirando.

—¿Por qué debíamos venir a este jodido hospital?—Susurró.

—¿Puedo sentarme?—Una voz muy conocida le habló. Era su cuñado.

—Ah, Lan Xichen siéntate—Murmuró desganado.

—¿Quieres hablar de lo que ocurre?—Wei Wuxian negó con la cabeza—Entiendo, estamos aquí porque vinimos a ver a Lan WangJi, supe que te dijo un par de cosas hirientes por la mañana...

—Es mi pareja...quiero apoyarlo y estar con él...pero al parecer no quiere estar conmigo—Bajó su cabeza con tristeza.

—Lan Zhan te ama, Wei Ying—Lan Xichen acarició su cabello con una sonrisa.

—Pero no me deja....—Antes de terminar un doctor salió corriendo al patio y gritó.

—¡Familiares de Jiang Yanli!—Wei Wuxian se levantó casi de inmediato al escuchar el nombre de su hermana mayor y fue con él. Sus padres, hermano pequeño y cuñado también habían llegado—Jiang Yanli tiene ciertas complicaciones...tenemos miedo de que algo le pueda suceder.

No Merecemos Un final Feliz. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora