No Merecemos Un final Feliz.

#06.

Capítulo Seis: Nuevo paciente.

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Quedaban poco menos de 24 horas para que Lan WangJi fuera internado en el hospital.

Temeroso marcó el número de su novio, Wei Wuxian.

El timbre sonó tres veces antes de escuchar la hermosa voz del amor de su vida.

—¿Cielo?—Dijo desde la otra línea.

—Wei Ying...—Lan Zhan tenía miedo ¿cómo le diría a su novio que sería internado en un hospital en algunas horas por una enfermedad hereditaria que lo mataba lentamente?—¿Podemos juntarnos hoy?

—Claro cariño—Wei Wuxian sonaba emocionado—Dime dónde y a que hora, estaré ahí—Lan WangJi tuvo el presentimiento de que su pareja estaba sonriendo enormemente en ese momento.

—En el café de siempre...—Se quedó en silencio unos segundos—A las doce—Murmuró despacio.

Estaba preocupado.

—Ahí estaré...—Se escuchó un fuerte estruendo cerca de Wei Ying—Debo cortar amor, nos vemos—Cortó la llamada.

Lan WangJi sentía demasiada opresión en su pecho.

Ya le había dicho a su familia, solo faltaba su novio.

—Buenos días WangJi—Su hermano mayor entró a la sala de estar—¿Pudiste dormir?

—Solo un poco...—Habia dormido poco menos de cinco horas.

—Entiendo...—Lan Huan no sabía cómo continuar aquella conversación—¿Quieres desayunar?

Lan Zhan asintió y se levantó del sofá.

—Buenos días, niños—El ambiente en aquella casa no era lo mismo desde que Lan WangJi les comentó acerca de su enfermedad.

—Buenos días, tío—Saludó Lan Xichen.

—Buenos días—Cabizbajo saludó Lan Zhan.

—Su desayuno, señores—Una mayormodo les trajo el desayuno, la habían contratado hace menos de una semana y estaba al tanto de la enfermedad del menor de la casa.

—Hoy saldré con Wei Ying—Dijo sonriendo leve al recibir una taza de café con un hermoso conejo dibujado con leche.

—Ya veo—Lan Qiren se sentía preocupado—¿Ya le dijiste...?—Prefirió no mencionar su enfermedad.

—Aún no...

—¿Cúando planeas hacerlo?—Preguntó Lan Xichen.

—Hoy—Respondió con simplicidad.

—Entiendo...ojalá se lo tome de buena manera—Lan Huan tenia miedo por su hermanito.

—Es alguien comprensivo, lo hará—Animó Lan Qiren.

—Sigamos desayunando, sin hablar—El estado de ánimo de Lan WangJi cambiaba en poco tiempo, ahora estaba enojado, no quería hablar de su enfermedad nuevamente, sólo le recordaba que moriría pronto.

[...]

Wei Wuxian estaba en la universidad junto a sus mejores amigos: Nie HuaiSang, Wen Qing, Wen Ning y Jiang Cheng, el último se había cambiado a la misma universidad de su hermano mayor hace menos de una semana; tenía miedo, no quería que su hermano sufriera un nuevo ataque de pánico y no estar con él, quizá fue una idea apresurada, pero le importaba y preocupaba la salud mental de Wei Ying.

Estaban sentados en la mesa de la cafetería.

—¿Qué hora es?—Preguntó nervioso.

—Son las 11:20 relájate—Jiang WanYin iba a darle un golpe a su hermano mayor si no se relajaba, habían pasado solo tres horas desde que su cuñado llamó a Wei Wuxian con nerviosismo en su voz, Jiang Cheng y los demás esperaban que no fuera nada malo.