Al verla lo entendi, aquello que no sabia que buscaba pero que tanto anhelaba estaba frente a mi en una hermosa chica de piel morena y ojos marrones, aquella aura curiosa que me genero tal atraccion desde el momento en que la vi llegar, para ninguno en el salon resulto llamativa, para mi en cambio, era la llama que llevaba tiempo esperando para encender la mecha de un corazon apagado.
El primer contacto con ella fue algo extraño, un roce en el recreo mientras el resto gritaba y disfrutaba el tiempo libre, ella al igual que yo se sumergio en un libro durante los veinte minutos del recreo, veiente minutos que yo pase entre leyendo y memorizando su cara al mirarla de reojo, fijandome en detalles tan burdos como su parpadear, embobado por su belleza y su carisma no dude en comenzar a escribir por ella.
Al pasar los dias pasabamos mas y mas tiempo juntos, el vernos diariamente compartiendo nuestro gusto por la lectura y la escritura, compartiendo nuestros borradores para retroalimentarnos mientras nuestros rostros se acercaban mas y mas con cada dia que pasaba.
Al cabo de un par de meses nuestras criticas constructivas a poca distancia pasaron a ser besos a escondidas en la biblioteca, nuestro tiempo leyendo juntos se volvio tiempo para pasear por el parque mientras comentabamos el como desarrollar nuestra historia conjunta, el como con su habilidad para describir personajes y escenas y mi habilidad para escribir personajes creariamos una obra perfecta.
Los años pasaron y nuestra obra perfecta paso a tener nombre, pero tambien fecha de nacimiento puesto que el tiempo para pasar de ser una feliz pareja se volvio un contrarreloj para pasar a ser unos felices padres de un hermoso hijo.
Al llegar la cuspide de nuestro amor a nuestras vidas nuestras tardes de escritura y largas platicas de literatura se volvieron dias de cuidar a nuestra pequeña obra maestra, nuestro tiempo de jóvenes escritores se volvio tiempo de grandes maestros e inspiracion para nuestro hijo. Hasta que uno no se vuelve padre no ve la rapidez con la que crecen los hijos, parecia ayer cuando solo estabamos preocupados de que llegara sano y hoy ya paso a ser un hombre libre e independiente, al nuestro hijo por fin ser libre nuestras vidas volvieron al hermoso tiempo donde solo debiamos preocuparnos de nosotros y nuestras historias, pero los apos comenzaban a pesar, mientras mayor nos hicimos los achaques mayores fueron en aumento, vi como mi hermosa morena pasaba de su cabello color negro a una brillante esfera morena en su cabeza, al pasar el tiempo tuve que ver por ultima vez los hermosos ojos que me encadilaron al conocerlos y despedirme de la que fue mi primer y unico amor, pero no fue una despedida sino no un hasta pronto, pues al paso de los meses sin ella acabe uniendome a ella en nuestro mundo, donde solo existamos nosotros, nuestras hojas y las miles de historias que no pudimos escribir.
ESTÁS LEYENDO
Historias inconclusas
General FictionHistorias que escribí en su momento y nunca supe cuál podría continuar