Capitulo 5

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Desafortunadamente no contesto, pero al menos tenía su teléfono, lo cual ya era ganancia para mi.
Decidí irme de la casa de Liz; necesitaba un poco de aire fresco. Así que me subí al auto, abrí todas las ventanillas y encendí el radio a máximo volumen para olvidarme de todo.

Yo tenía un lugar secreto, o al menos era un lugar que de cierta manera estaba abandonado, al que siempre iba cuando necesitaba pensar o reflexionar cosas. Normalmente me quedaba ahí hasta noche para ver las luces de la ciudad, cosa que me encantaba. Extrañamente sufro de vértigo, pero amo los lugares altos.

Cuando mama preguntaba que hacia tan tarde fuera de casa, siempre ponía la típica excusa de que había salido con amigos
¿Cómo puede creerme eso si solo tengo a Sam y a Liz?;
Me considero una persona sola
Sam y Liz apenas salían de casa. Así que no, no tenía amigos con quienes salir. Éramos como los Tres Mosqueteros, los tres chiflados, los tres... No recuerdo otro grupo de tres famoso, pero dejó clara la idea, supongo

Regrese a casa, donde si tenía señal en mi teléfono y vi que tenía un mensaje de texto; Era de ella

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