Por las noches te amo.

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T/N tenía al rededor de dos años dando clases en la academia UA, en los cursos generales, era una joven prometedora que amaba su trabajo.

Le encantaba trabajar con los héroes profesionales que también enseñaban ahí y que habían sido sus maestros cuando ella era estudiante, era especialmente afin a Aizawa Shouta quien a demás de ser su colega también se había convertido en un buen amigo en quien confiaba plenamente.

A Aizawa también le agradaba T/N porque desde que llegó a la academia vió lo amable y considerada que era, siempre evitaba despertarlo cuando dormía por los pasillos o en las oficinas porque era conciente de que estaba cansado y si podía, incluso le ayudaba con su trabajo.

Por supuesto que al principio desconfío, pero luego vió la verdadera bondad de la chica y algo dentro de él le decía que ella sería especial.

T/N veía en Aizawa a un hombre que luchaba por la justicia desde las sombras y le provocaba admiración saber que él no quería reconocimiento.

Su cercanía se hizo inminente y para ambos era suficiente aquella amistad.

No sabían lo realmente cerca que estaban el uno del otro.

- Buenos días.- Saludó T/N al llegar a la sala de maestros, donde ya se encontraban sus compañeros favoritos.

- GOOD MORNING!- Exclamó Present Mic.

- Buenos días T/N chan.- Saludó Midnight alegremente.

- Qué molestos.- Se quejó Aizawa removiéndose en su asiento acomodándose dentro de su bolsa mientras intentaba volver a dormir.

- Lamento que te despertaran, Sensei.- Dijo T/N en voz baja y tono dulce.

- Vamos, Shouta, es hora de despertar. WAKE UP!- Dijo Mic, meneando el cuerpo del somnoliento hombre para despertarlo.

Éste ni se inmutó.

- Vamos Mic Sensei, aún falta para que suene la campana, deja que Aizawa Sensei descanse un poco.- Pidió amablemente T/N.

- Lo concientes demasiado, T/N Chan.- Se quejó Mic.

- Está bien.- Dijo Aizawa.- No vale la pena que discutas con él, si no me levanto ahora comenzará a cantar.

El profesor salió de su bolsa con movimientos aflojerados, era apenas capas de mantener los ojos abiertos y se los talló en un gesto que, en opinión de T/N, era adorable.

- Bueno, en ese caso te gustará saber que les traje café.- T/N sonrió tiernamente.- Late con crema batida y chispitas para Midnight Sensei, dos cucharadas de azúcar y una de crema para Mic Sensei y Americano para tí.

Aizawa recibió el vaso agradecido.

- Qué atenta eres, T/N chan.- Agradeció Midnight bebiendo alegremente.

- Sabes.- Dijo Mic.- Ya no somos tus maestros, no hace falta que nos sobornes con atenciones.- bromeó alegremente mientras bebía su café.

- No es un soborno.- Rió T/N.- Sólo me gusta consentir a mis exprofesores favoritos.

- Sé agradecido Mic.- Le regañó Aizawa.

T/N dió un sorbo a su bebida, la cual estaba demasiado caliente.

- Mh!- Exclamó.- Me quemé la lengua.- Dijo haciendo un puchero de forma inconciente.

- Por eso prefiero mi café frío.- Dijo alegremente Midnight.

- Ah, no es café.- Dijo la joven chica.- es chocolate.- Sonrió.

- Ayyyyy aún eres una adolescente.- Dijo Midnight enternecida, mientras le apretaba las mejillas.

- Sensei por favor.- Dijo T/N.- Ya soy adulta.- Se sobó las mejillas para clamar el dolor por el apretón.

- Dejen de jugar.- Dijo Aizawa algo molesto.

No le molestaba que ellos jugaran como niños, le molestaba que incomodaran a T/N y la trataran como a una niña, sobretodo porque ella ya no lo era, al menos eso se repetía a sí mismo para no sentirse culpable de haberse fijado en la inocente y dulce jovencita.

La campana sonó y todos fueron a trabajar.

Entre clases, Aizawa, a veces iba a espiar un poco en las clases de T/N sin dejarse ver. Le gustaba verla enseñar, era buena con los alumnos pero sin dejar de ser estricta y sus alumnos la adoraban, todos en la escuela en realidad. Era una chica joven, hermosa, inteligente, bondadosa y una excelente educadora.

Aizawa tenía sus dudas cuando supo que la escuela contrataría a una alumna recién graduada y al principio era algo incómodo tenerla en la sala de maestros, pero ella rápidamente se ganó a todos con su encanto y sus atenciones, llevaba café o postres constantemente, para compartir y siempre tenía una sonrisa para cualquiera en la escuela, además, cuando trabajaba en su computadora ponía una expresión de concentración que hacía que al profesor se le derritiera el corazón.

No sabía si la chica era conciente de lo tremendamente linda que solía llegar a ser, siempre intentaba mostrarse más ruda, pero sus actitudes y su apariencia seguían traicionándola.

A la hora del almuerzo, todos los profesores volvieron a su sala.

- Ayyyyy T/N chan ¿Cómo haces para que tus obentos queden tan lindos? Parecen sacados de una revista.- Dijo Midnight.- Cuando eras alumna y te veía con tu almuerzo pensaba que quizá los preparaba tu madre.

Ella río nerviosa.

- No lo sé ¿Talento natural?- Respondió incómoda por tantos elogios.

- Serás una gran esposa algún día.- Dijo Midnight orgullosa.

- N-no sé si ser la esposa de alguien sea mi meta en la vida.- Respondió T/N algo disgustada pero sin mostrarlo demasiado.

- Ya déjala Nemuri, harás que le dé una indigestión.- Bromeó Mic.

- A demás no tengo ningún prospecto.- Admitió T/N.

- Pero si en tu clase habían muchos chicos apuestos y brillantes!- Exclamó.

- No me gustan los chicos de mi edad.- Dijo T/N enrojeciendo hasta las orejas, mientras intentaba concentrarse en su comida.

- ¿Qué?- Dijo Midnight.- No me digas que te gustan mayores.- Dijo asombrada Midnight.

- Sensei...- Dijo T/N como suplicandole que dejara el tema.

- YEAH! Shouta está soltero.- Dijo Mic pasando su brazo por los hombros del antes mencionado, quien se sobresaltó.

- Ustedes dos, dejen de ser imprudentes y dejenla comer, ya no pregunten cosas que no les incumbe.- Exclamó molesto.

T/N Suspiró agradecida terminando su comida y la campana sonó.

T/N iría a dar clase al grupo de Aizawa, la famosísima clase 1A.

Le gustaba tener esa clase con ellos, pues eran el grupo asignado de su ex profesor y sentía que tenía algo en común con ellos, aunque no se hubiese graduado del curso de héroes.

Después de clases cada uno volvía a su casa, T/N vivía en un departamento prácticamente en frente de la academia y le gustaba mirar desde ahí como el profesor caminaba hacia quién sabe dónde, era una linda forma de terminar su día.

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El primer capítulo de esta bella historia. Lo corregí antes de publicarlo así que espero no hayan errores, siempre se me va la honda y publico sin corregir, pido perdón.

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