CAPÍTULO 7. LOVE ME LIKE YOU LOVED THE SUN.

121 25 123
                                    

Hola lindas personitas, les dejo este nuevo capitulo creo que es mi favorito de todo el fic, o uno de los que mas me gustaron, espero sea de su agrado. Les agradezco todos los comentarios que dejan y los votos, quizá me tarde un poquito en responderlos pero me alegran muchísimo. Mucho amor para ustedes.

—Abuela, papá me dijo que no creyera en las historias de los amantes eternos que son solo tonterias —Un pequeño niño de piel nivea y cabello platinado miraba con tristeza en sus ojitos verdes a una elegante dama de abundante cabello negro.

—No le hagas caso mi Gee, tu padre es un vampiro demasiado aburrido, mi único deseo para ti es que cuando crezcas seas feliz y no dejes que las palabras de ese ser te corrompan, yo que soy tu abuela veo lo especial que eres y sé que allá afuera hay alguien justo para ti —Las manos de la mujer acariciaron el rostro del pequeño vampiro con ternura y depositó un beso en la frente de la joven criatura.

—Abuelita pero ¿cómo lo sabré? —preguntó el pequeño vampiro.

—Pequeño no te afanes, cuando veas a tu amante destinado sentirás un magnetismo y una atracción inmediata, luego podrás experimentar cómo la vida se hace fácil y ligera con su presencia, tendrán una especie de conexión íntima, pero lo más importante es que serás lo más valioso para él o ella.

—¡Abuela! suena tan maravilloso que ya quiero conocer a mi amante y ojala sea tan feliz de tenerme como yo —La tristeza abandonó los ojos del pequeño vampiro mientras una nueva ilusión crecía en su corazón.

—Así va a ser mi Gee y será el vampiro más afortunado.

† † †

Gerard se despertó feliz, tenía mucho tiempo sin soñar, y mucho menos sin ver a su abuela, el ser que más lo amo y nunca lo rechazó. Al abrir los ojos lo primero que vio fue el rostro de Frank, que descansaba con tranquilidad a su lado, con cariño peinó los cabellos castaños, paso sus dedos delicadamente por sus cejas arqueadas, delineo el dorso y la punta de la pequeña nariz hasta acabar en los labios delgados y rosados que esperaba poder besar algun dia, Frank era un hombre hermoso la barba le daba un aspecto un poco salvaje pero realmente era tierno y atento siempre.

El vampiro con fuerzas renovadas se levantó de la cama con precaución para no alterar el sueño del castaño, aun sentía su cuerpo un poco pesado así que de forma lenta se dirigió hasta la ventana más cercana y la abrió para sentir la brisa fresca de la noche, su cabello platinado se movió con el viento y en el silencio de la noche le agradeció al universo por Frank.

Luego de algunos minutos de observar las estrellas en el cielo, dio un pequeño recorrido a la habitación, no había más que algunos muebles cubiertos con telas, la pequeña cama donde durmió y algunos candelabros que daban una iluminación cálida a la estancia, se notaba que era un espacio en desuso, no existía la más mínima posibilidad que el fuera en huésped de lujo en el castillo Iero.

—¡Gerard! Frank se levantó sobresaltado al no ver al vampiro peliblanco con él, su primer pensamiento fue que los habían descubierto y se lo habían llevado nuevamente.

—Aqui estoy Frank —El vampiro estaba sentado justo al lado de la ventana, al verlo Frank salió de la cama y se dirigió hasta él para abrazarlo, el vampiro se sorprendió por la acción pero rápidamente envolvió los brazos alrededor de los hombros del humano que se había arrodillado frente a él.

—Me asustaste, pensé que te habías ido para siempre ¡Llevabas dos noches inconsciente!.

—¿Enserio?, la verdad no recuerdo mucho de los últimos días, solo tengo algunas imágenes vagas de lo sucedido.

DEMOLITION LOVERSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora