}{Goit}{

}{ Nueva mejor amiga. }{

Capitulo II

   Después de mi incidente con ese chico de ojos cafés me acosté un rato a dormir. Estaba exausta, de mi ciudad natal a Goit hay cuatro horas en auto, estube desde las cinco de la mañana despierta en una carretera, no puedo dormir cuando estoy en un viaje; por más que lo intente no descanso.

Desperté, la cama es muy comoda, pero no tanto como la que tenía antes. Miro la hora en el reloj despertador de la mesita de noche:

<14:27PM>

Había dormido bastante, y tenía un poco de hambre.

Bajé las escaleras y fui directo a la cocina a por algo de comer. Entre por primera vez a la inmensa cocina, el piso de marmol pulido sonó ante mis pasos, pero me frene en seco cuando vi a alguien que no es de mi familia parado en medio de la cosina.

--- ¿Qué haces aquí? __ susure no muy segura de si me oyó.

--- Oh, hola __ me saludó amablemente una chica de piel morena y cabello negro por los hombros __ Mi madre trabaja aquí, es la nueva empleada.

Oh, ella era la hija de la empleada de la que habló Rosa. En realidad me esperé a una niña pequeña, no una joven. Pero aun así me alegré de tener a alguien de mi edad __ y mujer __ en la casa.

Sinceramente mi hermano de 15 años no es muy buena compañía, es un pesado.

--- Si, ya sé __ Le dediqué una sonrisa sin separar los labios. __ Me lo dijo Rosa. __ Aclaré.

--- Si, la casera. Es un poco loca e imperactiva; ¿no crees?

Me hizo gracia su comentario, y empesamos a reír las dos.

--- Si, ya la tuve que soportar hoy en la mañana.

--- Así que, eres a hija mayor de los Colerp.

--- Así es.

--- ¿Cuántos años tienes? __ Preguntó, curiosa.

--- 17 ¿y tu?

---18.

--- ¿Vas al instituto local? __ Quería saber si conoceria a alguien en el instituto.

--- ¿Qué joven de este pueblo no asiste a ese feo instituto? __preguntó como respuesta. Asentí, dibertida. __ ¿Querías algo?

--- ¿Qué?

--- Cuando venías para aca, querias algo de comer ¿cierto?

--- Si, tengo un poco de hambre.

--- Tus padre y tu hermano ya almorzaron en la terraza hace un rato.

Sin mi eh?

--- Te preparare algo __ Declaró ella.

--- No __ No dejare que ella trabaje si ni siquiera le pagaran por ello, además me gusta preparar mi propia comida. __ Ya lo hago yo, no dejaré que te comportes como una empleada.

Sonrió.

--- Al menos deja que te ayude.

Asentí y comenzamos a preparar merienda para las dos. Nos sentamos en la barra de la cosina y le conté sobre mi antigua vida en la ciudad.

Ella me contó sobre su familia. Su padre murió cuando ella tenía solo cinco años y su madre hace todo por salir adelante. Se llama Clara y vivirá en la mansión hasta que su madre deje de trabajar en ella. También me dijo que vive en este pueblo desde siempre y nunca a salido de el, por eso tuvo tanta confianza conmigo, es un pueblo pequeño todos se conocen, alguien nuevo es como pan caliente.