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¿Que fuimos?

"No fuimos malos, ni buenos...
fuimos historia, fuimos verdad, fuimos reales eso es todo"
Remembrance.
SteelSweet

Narrador Omnisciente.

Somos instantes, somos efímeros, somos el recuerdo de la persona que nos ama y a su vez no somos absolutamente nada. En cualquier rincón de este mundo, un ser humano está dando vida a otro, algunos están de fiestas cuando otros están iniciando sus labores. Otros están teniendo sexo desenfrenado, mientras que otros mueren.

Luego está él, el chico que no sentía nada por nadie, que su corazón era un tempano de hielo, las personas le aborrecían y odiaba cada segundo de su miserable existencia.

¿Eres capaz de dejar de existir para salvar a la persona que amas?

Cuando naces te concentras en jugar, divertirte, ser feliz y llorar porque te caíste de la bicicleta. Sabes que estás creciendo porque la herida de la bicicleta ya no duele. Ahora el dolor no es físico, es emocional.

Romeo y Julieta es una historia de amor con un final trágico, pero te recuerdo que Julieta no fue su primer amor y que solo duró ciento treinta y ocho minutos en pantallas y ciento setenta y seis páginas en hojas de papel. ¿De verás quieres un amor así?

Y respondiendo a la pregunta de antes.

Yo te diría que no existe nada tan hermoso y a su vez retorcido como lo que estaba sucediendo en aquel hospital.

El cuerpo de Caleb Burck dejaba este mundo de manera instantánea, mientras que a William Ray le estaban brindando una nueva oportunidad en esta vida.

Pueden pensar que es inmaduro o que la decisión era precipitada, pero en realidad solo existen dos tipos de personas en este mundo, la que se sienta a esperar que ocurra un milagro y la que lucha para lograrlo.

Si eso lo hace inmaduro, tenéis la razón la bestia tomó la decisión de dejar de vivir para salvar a la persona que amaba.

En la pequeña y blanca habitación de aquel hospital, Gregory daba vueltas de un lado a otro esperando que su hijo despertara.

No eran más de las seis cuando el joven, comenzó a mover algunas partes de su débil cuerpo, abrió los ojos lentamente intentó incorporarse pero el leve dolor en su pecho no le permitió.

—Pa...papá —habló en casi un susurro.

—Estoy aquí hijo —tomó su mano— no te muevas.

—¿Qué ha ocurrido? —indagó el rubio.

—Tuviste una crisis más fuerte de lo habitual.

—¿Cuánto tiempo ha pasado?

—Dos días Will — dijo el hombre bajando la voz.

—¿Dónde está? ¿Dónde está él?

—Hijo necesito que seas fuerte.

—¿Que ocurre papá?

— Caleb, asesinó a su padre.

— No puede ser.

— Eso no es todo —se pasó las manos frustrado por el cabello.

—¿Está detenido? Habla papá ¿Que sucede? ¿Dónde está? —las lágrimas comenzaban a correr por sus mejillas.

—Cuando nos enteramos que había asesinado a su padre ya fue demasiado tarde. No está detenido.

— ¿Dónde está entonces? —sus palabras se quedaron flotado cuando su papá lo miró con comprensión.

Entonces sabía lo que ocurría. Caleb ya no estaba entre ellos, porque cumplió su objetivo, le arrebató la vida a su miserable padre, para luego escapar de todo está mierda y refugiarse en su pecho.

Colocó la palma de su mano suavemente en su corazón y aunque sabía que Caleb nunca dijo que lo amaba cuando en realidad sabía que si lo hacía, hoy estaba más seguro que su corazón solo le pertenecía a él.

Quizás debes morir; para pasar a una mejor vida.

—Hijo me pidió que te diera esto— le ofreció un papel, blanco perfectamente doblado—. Mejor te dejo solo.

Para cuándo leas esto, ya no voy a estar junto a ti. Cumplí con mi primer propósito en esta vida, mi padre ya no existe, ni imaginas cuánto lo disfrute y el segundo eras tú, no te iba a perder, aunque me destruyera yo en el camino. Quiero darte las gracias por encontrar en mi un poco de luz, o quizás nunca existió y era tu reflejo, el que me guió. Siento mucho que las cosas fueran así, renuncié a mi, porque mi vida eres tú. Para que respirar o despertar cada dia si no te iba a ver jamás, así de egoísta e imbécil soy, de haberte contado no estarías de acuerdo, pero yo lo quiero así, que vivas por mi, se feliz por mí, ahora estamos conectados. Te lo debo, desde que te conocí aprendí a querer la vida un poquito más. Antes de que esto solo sean palabras sin sentidos, aunque no lo pueda decir y por lo que veo escribir tampoco, recuerda siempre ese algo que siento por ti. No creas que es una despedida, toca tu pecho y ahí voy a estar siempre. Joder te he dado otra oportunidad, ni yo lo creo.

Le cambiaste el significado a mi frase favorita.

...porque él más yo que yo mismo.

Después de esto si en el infierno la escucho algún día, ahora lo primero que pasaría por mi cabeza sería solamente William Ray y su estúpida manía de sacar lo bueno de las personas.

La Bestia ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora