TERMINADO [BrightWin] DIRE APPLE

Capitulo 10

BRIGHT

Todo lo que podía ver era la ira en su cara, serpenteando a través de su cuerpo, hasta la punta de su dedo apoyado en el gatillo. Win nunca me perdonaría, por mucho que le rogara. No importaba si me ponía de rodillas y hacía todo lo posible para compensarlo. Pero entonces miré hacia abajo y vi que todavía se ponía algo duro debido a mí. No debía ser una total causa perdida.

Hice lo que pude para ignorar su erección. Esa no era la parte suya que necesitaba de mi lado, pero era un comienzo. Me dio esperanza.

—No vine aquí para matarte —le dije tan sinceramente como pude.

—Seh, claro. Tu arma dice lo contrario.

—Mi pistola estaba enfundada. Si te hubiera querido muerto, te habría apuntado con ella —señalé. Puso los ojos en blanco pero no interrumpió, así que continué—: Te he echado de menos. —Levanté una mano para detener su burla—. Pero eso no fue todo. Empecé a pensar en todo el peligro en el que te podrías meter. P'Yod podría haber hecho que alguien más te matara. O, demonios, podrías haber sido atropellado por un coche al cruzar la calle para tomar un café, y nunca lo sabría. La incógnita me estaba carcomiendo.

Estaba hiperconsciente del ablandamiento en el rabillo de sus ojos, la forma en que la boca del arma bajó sólo una fracción. Quise levantarme de la silla, pero su guardia aún estaba elevada. Levanté mi segunda mano con el lenguaje corporal más sumiso que pude reunir para que viera que no era una amenaza.

—Lo siento —dije.

—¿Por algo específico?

—Bueno, siento que tengas a alguien como P'Yod en tu vida en primer lugar. Lamento siquiera haber considerado hacerte daño. Destruir la vida que estabas construyendo tan cuidadosamente, pero más que todo eso, siento no poder dejarte en paz. Lo intenté, lo hice. No puedo dormir en la noche pensando en ti, pero me convencí a mí mismo de que si podía ver que estabas bien, sería capaz de alejarme.

—Pero... estás aquí —dijo suavemente, su voz teñida de tristeza, pero también de un extraño tipo de afecto.

Asentí con la cabeza.

—No debería haber podido encontrarte, pero lo hice. Y si yo pude, también puede hacerlo P'Yod. Pasé por delante de tus guardias sin dificultad. No son seguros.

—Tengo que admitir que he tenido mis propias dudas sobre su competencia.

—Win miró el arma que tenía en la mano—. Me quedo con esto —dijo con los ojos entrecerrados, pero la bajó para no apuntarme.

—Por supuesto. Cualquier cosa que pueda hacer para ayudarte a estar a salvo.

—No le dije que tenía todo un arsenal en los arbustos. Ese no era el tipo de información que hacía que la gente se sintiera reconfortada.

Mientras se movía a través de la pequeña habitación para poner el arma en la mesilla de noche, mi atención se dirigió de nuevo a su entrepierna.

—¿Parece que tú también me extrañaste un poco? —Traté de contener mi sonrisa, pero cuando los labios de Win se curvaron, sentí que mi sonrisa se ampliaba—. Sabes, nunca tuvimos la oportunidad de terminar lo que empezamos.

—¿No es gracioso cómo el apuntar a alguien con un arma puede enfriar el ambiente?

Me encogí de hombros.

—No lo sé. Acabas de apuntarme con un arma, y estoy más que un poco excitado ahora mismo.

Ahora su mirada bajó de golpe para ver si estaba bromeando. Alerta de spoiler: No lo estaba. Desde mi posición en la silla con las piernas abiertas, el contorno contra la mezclilla era obvio. Mis pantalones estaban luchando una batalla perdida con mi polla. Si no aliviaba la presión pronto, era probable que se me rompiera la cremallera.