Volver a ti - Romanogers

IV - Peggy Carter

Centro de los Nuevos Vengadores, Nueva York. Junio 2016

Luego de la discusión entre los Vengadores, Natasha noto que Steve se había recluido completamente en su habitación, y se sintió preocupada por él. A tal punto que no pudo controlar sus impulsos y se encontró tocando a su puerta para conversar.

—Steve, ¿te encuentras bien? —preguntó y se vio tentada a abrir la puerta cuando no tuvo una respuesta.

Meses atrás cuando todavía tenían una relación, o lo que hubiesen sido esos encuentros entre ellos. Natasha tenía acceso libre a su habitación, pero en ese momento no sabía en qué territorio se encontraba, todo era muy confuso entre ellos. Ni siquiera creía posible que pudieran quedar restos de lo que fue su amistad en un principio.

Aun con dudas, Natasha decidió abrir un poco la puerta y observarlo. Al principio pensó que no se daría cuenta ya que era sigilosa como toda buena espía, pero Steve la conocía mejor que eso.

—Te escuché Natasha—dijo de espaldas a ella, mirando por la ventana de su habitación.

—Lo siento—se disculpó ella, ahora con la puerta del todo abierta—. Quería saber cómo te encontrabas.

Steve guardo silencio, todavía de espaldas y ella aprovecho el silencio para entrar a la habitación cerrando la puerta tras ella.

—No dije que podías entrar—aclaró Steve, dándose vuelta para mirarla.

Cuando lo tuvo frente a ella, Natasha se dio cuenta de que había estado llorando. Pero no entendía por qué, los Acuerdos no podían poner así a Steve Rogers.

—¿Qué sucede?—preguntó, mientras se acercaba a él preocupada.

Steve cerró los ojos y bajo la cabeza, mientras Natasha se preguntaba si abrazarlo era o no lo correcto.

—Peggy falleció—dijo él de repente.

Natasha no se sorprendió ante la noticia, sabía que Peggy Carter se encontraba muy mal de salud. Le dio la mano a Steve en señal de apoyo y ambos se sentaron en la cama que había en el medio de la habitación.

—Lo siento mucho de verdad.

Steve se acercó a ella y la abrazó con necesidad. Natasha comprendió que necesitaba a su amiga, esa amiga que ella había sido tiempo atrás, antes de que ambos pasaran el límite de la amistad.

Mientras lo abrazaba se percató de que al lado de la cama de Steve estaba su antigua brújula, esa que aún tenía en su interior una imagen de Peggy.

Natasha había visto una imagen de Peggy Carter por primera vez en el campamento Lehigh, y cuando le había preguntado a Steve de quién se trataba, él no había respondido. Ese día ella comprendió que esa mujer misteriosa era la que le había robado el corazón a Steve Rogers.

—Iré a Londres para su funeral—comentó Steve mientras dejaba de abrazarla, pero Natasha aun lo tenía tomado de la mano.

Natasha asintió ante su afirmación, sin saber realmente qué responder. Steve la miraba expectante y ella sintió que esperaba una determinada respuesta, pero no podía descifrar cuál era.

—Quisiera que me acompañaras Nat—aclaró Steve finalmente, dejando a Natasha sorprendida-. Sería importante para mí que estuvieras allí.

—Steve...—comenzó a decir mientras negaba bajando la cabeza—. No creo que sea apropiado. Por otro lado, Tony me pidió que viaje a Viena para la firma de los Acuerdos.

Natasha levantó la cabeza y observo la tristeza en los ojos del capitán. Ella deseaba estar a su lado más que nunca, pero le había dado una respuesta a Tony y tendría que representar a los Vengadores.

—Sé que tienes obligaciones y no era mi intención presionarte—se disculpó Steve.

Natasha sonrió levemente y acercó su mano al rostro de Steve para hacerle una pequeña caricia.

—¿Estamos bien?—preguntó ella.

—Estamos bien—respondió Steve devolviéndole la sonrisa por un segundo.

Pasados unos minutos, Natasha sintió que él necesitaba estar solo para poder llorar a Peggy, por lo tanto, se levantó de la cama para salir de la habitación, pero Steve la sorprendió tomándola del brazo para evitar que se alejara. Natasha lo miro confundida.

—No quiero estar solo.

Natasha asintió y volvió a sentarse a su lado. Steve se encontraba tan vulnerable que no se sentía capaz de negarle su compañía, aunque quisiera. Claramente Natasha no quería hacerlo.

Él agarró la brújula que ella había estado observando y la abrió para observar en su interior, la belleza de Peggy Carter deslumbro nuevamente a Natasha.

—Era muy hermosa—afirmó ella.

—La última vez que visité a Peggy, ella me dijo que lo mejor que uno puede hacer es iniciar de nuevo. Creo que lo mejor que podría hacer es seguir su consejo.

—Fue muy inteligente en aconsejarte eso.

—Si, el problema es que solo hay una persona con la que quisiera comenzar de nuevo...—confesó y Natasha se incomodó ante su sugerencia, sabía que se refería a ella y él conocía su respuesta, eso era lo que los había llevado a tener desacuerdos para empezar.

—Mi respuesta es la misma que hace meses Steve, lo siento.

—Lo sé—suspiró y sonrió para luego bromear—. Nadie quiere al chico de Brooklyn.

"Yo si te quiero" pensó Natasha y por un momento le pareció haberlo dicho en voz alta, pero no fue así. Aunque quería empezar de nuevo con Steve, alejarse de esa vida y vivir el sueño americano, ella sabía que nunca iba a poder tener eso. Su pasado la condenaba y sus libros estaban manchados de rojo, sentía que no era suficiente para Steve y lo único que tenía para remediar todo el daño de su pasado era ser una Vengadora, debía conformarse con eso.

Cuando la noche llegó a la base de los Vengadores, Steve y Natasha no se separaron ni salieron de la habitación. Él durmió abrazado a ella toda la noche, refugiándose en sus brazos y reconfortándose con el sonido de su corazón latiendo, mientras ella lo observaba y disfrutaba ese pequeño instante en el que podía fantasear con una vida diferente, ese instante en donde todo parecía real.

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Actualización 18/07/21: ¡Hola! Espero que les haya gustado este capítulo (bastante corto, lo sé). Ahora que se termino el cuatrimestre en mi universidad, voy a tratar de actualizar por lo menos dos veces por semana, además ya quiero llegar al clímax de Civil War e introducir pequeños detalles de lo que vimos en Black Widow. El final de este capítulo me parece super paralelo con lo que le dice Natasha a Melina sobre los regalos de navidad. Es tan tierno y triste que Natasha tuviera momentos de fantasear así con la vida, me dan ganas de abrazarla.

Muchísimas gracias por las lecturas y los votos. Como siempre, les deseo un buen domingo y buen comienzo de semana, saludos!!

Atte, Widow21