Las pruebas,lo no contado

Reconciliación

Lamento no haber actualizado antes pero aquí está el capítulo se que muchas me an pedido am el sexo pero bueno aquí las compensó

Aris. ¿Dónde está...?

"No lo se. ¿No ha llegado antes que yo?"

"No... foder... no me digas que él..."

Entonces Newt entró corriendo dentro. La cojera se le veía muy acentuada, y al llegar se dejó caer a un lado. No había caído en que no corría tan rápido, deberia haberse quedado detrás para ayudarlo. Era el último, todos los demás habían muerto. De 21 que habían salido de aquel sitio... ahora solo había 14.

-Descansen. Nos quedaremos aquí un tiempo. Duerman.... - Thomas les mandó a todos que se tranquilizaran.

Los chicos no discutieron sus ordenes. Se esparcieron por la planta. Después de ayudar a Minho y curarle a duras penas las quemaduras, buscó a Newt por la sala. Todos los chicos dormían... menos él.
Tenía la mirada triste, cansada... como si su alma se hubiera chamuscado fuera.
Observó como el rubio se levantaba, cojeando bastante y salía a la habitación de al lado, en la que Thomas había dicho que no entraran. No pudo evitar salir a por él.

-Newt... ¿estás bien?

-Sí. Bueno, estamos vivos... eso es lo que importa- la amargura se notaba en su voz.- ¿Qué rayos le ha pasado a Minho?

-Un rayo le prendió la ropa... Newt.- se fijó en su espalda- ¿Te caíste?

-No. - se dio la vuelta para quedar de cara a él.

-Espera. Date la vuelta..

-Vete a dormir, he venido aquí para estar tranquilo y tú...

Thomas se acercó y le levantó la camiseta.

-shuck... menudo golpe llevas...

-Estoy bien...- dijo apartándose.

-Siéntate y deja que lo mire. Por favor... se que es de cuando me protegiste.

Newt le acabó haciendo caso. Se sentó y sintió como le quitaba la camiseta. Le trajo demasiados buenos recuerdos aquel gesto. Sintió sus dedos acariciando su espalda. En algunas partes le dolía un poco, pero en sí la caricia era muy agradable. Esta vez era de verdad él.

-vaya realmente tienes varios moretones que bueno que tengas buena espalda - susurró.

-Bue... bueno. Estoy bien...- sintió los dedos de Thomas recorriéndo su espalda, a pesar de que ya le había mirado.- Tho... Thomas... - cerró los ojos.- No me hagas esto...

-Odio que me llames Thomas...

-Tommy...-dijo en un susurro, al mismo tiempo que le caía una lágrima.

Los brazos de Thomas pasaron al rededor del cuerpo de Newt. Apoyó la cabeza sobre su espalda (en la parte sin herida) y cerró los ojos, abrazandolo desde detrás. Newt sintió como si uno de esos rayos hubiera revivido su corazón.

-Newt... no aguanto estar sin ti. No aguanto ver como Aris te toca como yo solía hacer. No aguanto ver como dejas que te bese... no aguanto más esto. No quiero que sigamos así. No quiero volver con Teresa, no quiero quererla. Sólo quiero quererte a ti. Por favor...

El corazón de Newt comenzó a gritar. Su cabeza le decía que no era buena idea, que al final todo acabaría y sería peor. Pero su corazón buscaba a Thomas con locura. Y estaba ganando.

-Tommy...- se giró hacia él, quedando sus rostros muy cerca.- Te quiero... te quiero más de lo que querré a nadie nunca... y aunque sea por poco tiempo... quiero estar contigo hasta que mi recuerdo en tu mente termine.

Thomas se quedó mirándolo a los ojos. Estaban tan cerca... ellos. Sólo ellos. Como antes de que Teresa llegase al Claro. Poco a poco se fueron acercando el uno al otro. Ese magnetismo que sufrían sus labios seguía latente después de este tiempo. Pero Thomas no podía esperar, ya había esperado mucho. Le agarró de la nuca y lo besó. Newt se dejó agarrar, se dejó besar y buscó más atención. Cada vez que Thomas separaba sus labios, el atacaba para robarle otro beso. Los suspiros llegaron a sus labios, y el moreno dejó que Newt se quedara de rodillas sobre su pelvis, apoyados en la pared. Besos, besos, caricias... se habían echado tanto de menos. Las manos de Thomas se fueron posesivamente al trasero de Newt. La idea de que Aris hubiera tocado así a su chico le hacía sentir que necesitaba dejar claro de quién era aquel chico. El glúteo de Newt era duro, pequeño y era perfecto para ser abarcado con sus dos manos. El rubio suspiró al sentir las manos del otro en él. Pero Thomas no le dejó suspirar más, ya que enseguida volvió a robarle otro beso, esta vez metiendo su lengua en la boca, acariciando la de él. Suyo. Era suyo... no iba a dejar que nadie lo tocara.

-Te dije... que tú y tu boca eran míos...- volvió a besarle, para morderle el cuello y dejarle una marca.- Me desobedeciste... así que ahora tendrás que pagar por ello.

Thomas acarició el pecho del rubio, que no llevaba la camiseta. Pasó su lengua cerca de su clavícula, y mordió y jugó con sus pezones hasta que notó que el miembro del chico estaba notablemente erecto. El suyo no tardó en unirse al saludo.

Entonces Newt le agarró de la camiseta y lo tumbó en el suelo. Tenía una mirada apasionada y juguetona. Comenzó a mover su pelvis rozando la de Thomas, haciendo sonidos sensuales y provocativos. Con cada roce, el miembro de Thomas se erectaba más. Cómo había echado de menos esto.

-Ah... New...Newt. Por favor... - estaba claro lo que quería.

-Vaya... así que con exigencias... ¿eh? - le lamió la oreja.- Me has tenido destrozado y ahora mira tú por donde...- sonrió al ver la cara de Thomas, quien tenía los ojos cerrados y la boca entreabierta a causa de los roces de sus entrepiernas. Demasiado provocativo.

Le quitó la camiseta y disfrutó de las vistas durante unos segundos. Había olvidado el fibroso cuerpo que tenía su corredor. Pasó sus manos tocándolo mordiéndose el labio conforme bajaba hacia su vientre. Esos pantalones le tenían que estar apretando mucho la entrepierna. Ágilmente se los desabrochó, notando como el moreno arqueaba la espalda hacia atrás al sentir su boca ahí. A los dos les encantaba aquel juego.

Newt se esmeró bastante ahí abajo, quería que Thomas disfrutara. Mucho tiempo sin hacerlo, y a lo mejor más hasta que volvieran a tener otro momento así. Cuando acabó, notó las manos inquietas del otro buscando la cremallera de su pantalón.

-No llevan cremallera.- sonrió Newt al ver como Thomas no entendía el mecanismo de sus pantalones. Llevaba unos que le iban algo grandes, asi que se los había atado con un trozo de cuerda. No tardó en darse cuenta.- Así sí...ahhh....- las manos de Thomas habían llegado a su miembro.

Seguían besándose con locura mientras intercambiaban caricias y gemidos. Hasta que no pudieron aguantar más. Necesitaban más mimos. Newt, que estaba sobre él aún, sintió como el miembro del chico se le introducía poco a poco en la entrada. Él hizo presión para tenerlo entero en su interior, dando un pequeño grito de placer. Comenzó a mover sus caderas sobre Thomas, quien tenía sus manos en ellas y observaba el excitado rostro de Newt sobre él, cabalgando sobre su miembro. Nunca lo habían hecho así....

Pero era muy excitante.

Thomas podía observar como el otro, con los ojos cerrados y la boca abierta emitía pequeños gritos y gemidos al autopenetrarse. Era hermoso, simplemente era eso, precioso verle así. No era sólo por el morbo y lo erótico (que no negaba que no inundara el ambiente) sino porque le amaba más que a nada en el mundo, y el sexo entre ellos solo era un paso más allá de ese amor. Era de verdad.

Thomas se vino en su interior, y al poco rato Newt también lo hizo tras sentir las manos del moreno en su miembro. La agitación era masiva, pero poco a poco su pulso comenzaba a recobrar la normalidad. Thomas le buscó a su lado y lo abrazó a él.

-Mas te vale que esto no se lo hayas hecho a Aris... o estaré muy celoso y enfadado...- se refería a la postura nueva.

-Tra...tranquilo... - aun estaba excitado.- Con él no fue así...con él...- Thomas le calló con un beso profundo.

-Me da igual. No quiero que vuelva a tocarte...