Capitulo siete: Suya
Dixon Russell
Londres/Inglaterra
12 de Septiembre 2020—Te dije que no debías hacer eso, que debías esperar— le reclamo a Dalton mientras esté firma documentos del otro lado del escritorio.
—Llevas diciéndome eso los últimos días todo el tiempo, ¿Cuál es tu punto?—la serenidad, la calma y la frialdad con la que habla siempre me a molestado.
—¿es una puta broma? Ella no a llamado, te excediste esa noche —ni siquiera levanta la mirada de los papeles lo que solo logra frustrarme más.
—Deja de decir sandeces y solo relájate —dice como si nada.
—¿Relajarme? Le dejaste el trasero como un tomate, la hiciste chillar y suplicar y te importó una mierda!—exclamo exaltado mirándolo con enojo.
¿Porqué? No lo sé pero si se que él está igual de ansioso que yo por Charlotte.
Bufo molesto cuando se levanta y avanza hasta mi.
—Deja de pensar en eso y prepararte para mañana, todo el mundo quiere saber que aremos esa noche y los planes para el resto del año y está vez el discurso te toca a ti —dice palmeando mi hombro.
Me suelta escucho la puerta indicándome que me dejó solo, reviso la conversación de Charlotte otra vez y nada...
Conocí a Charlotte en un bar hace un mes aproximadamente, hermosa, perfecta, esas fueron las palabras que pueden describirla desde ese momento.
Esa noche la conocí en su momento... Ebria, loca... Aún recuerdo y siento sus curvas pegadas a mi bailando como si nada más importará....
[•••]
—deja de ver el estúpido celular y ayúdame con esto que estoy a dos de mandar todo y a todos a la mierda si esto no se soluciona—sigo en mi celular ignorando el enojo de Dalton Russell, siempre tan... Obsesivo del control...
—¿Puedes relajarte? Solo es un retrasó, el material de construcción llegará pasado mañana, y todo volverá a su cause, los obreros no se irán y el arquitecto afinará detalles nuevamente —digo con simpleza mandando otro mensaje mas a la pelirroja despampanante y guardando mi celular para verlo con los puños cerrados.
—Son las 11 de la noche nadie te contestara ya, y nosotros deberíamos estar en casa o en el complejo supervisando que todo quede bien para mañana porque si lo olvidas este año Amber vendrá junto a nuestros padres.—la mención de la chica lo hace girar y endurecer su rostro.
—no me importa en lo más mínimo esa mujer ahora levanta el trasero de mi silla de ayúdame llamar a una jodida agencia que pueda hacer bien su trabajo—asiento tomando mi celular y abriendo páginas en la PC.
Una hora después de intentos fallidos de conseguir una agencia de transporte porque como le dije a Dalton es la maldita media noche, bufo levantándome para salir de la oficina dejando a Dalton gritándole al teléfono.
Salgo y me recargo del barandal mirando hacia abajo el complejo con algunas personas aún moviendo cosas, suspiro y camino a los sanitarios para mojar mi rostro y tratar de despejar de mi mente lo único que a estado desde hace semanas, Charlotte...
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TENTACIONES: EL LLAMADO DEL PECADO
Genç KurguMucha gente ama lo dulce, las experiencias agradables, duraderas y suaves... Así es él... Así es Dixon. Mucha gente también prefiere lo nuevo, lo amargo, las experiencias nuevas llenas de adrenalina he incluso dolor... Así es él... Así es Dalton. Po...