Crispicienta

Epílogo

Después del baile real, en el instituto yo era la comidilla y el tema del día o de los días. Se estuvo hablando de la doble personalidad de Brandon/Levi y la Cenicienta del baile de bienvenida o la enamorada del príncipe, es decir, yo. Esos fueron los días más raros de mi vida. Yo siendo el centro de atención. Siendo sincera, no me agradaba mucho pues prefiero pasar desapercibida y ser invisible a la gente, hecho que se esfumó desde el baile real de invierno.

Un mes después, Levi regresó a nuestro instituto pero no como príncipe sino como el Brandon que conocíamos, aunque claro con su verdadero nombre. Él de nuevo se pegaba a mí como sanguijuela, iba a todos lados donde yo iba. ¿Nuestra relación? Novios, aunque yo era la única que lo llamaba amistad a lo nuestro y Zoey y Elia junto a toda mi familia postiza se encargaban de regañarme y convencerme de decir que era su Novia.

- ¿Entonces, ya sois novios oficialmente o todavía estás en modo friend?- me pregunta Zoey mientras come una patata frita.

- Eso. ¿Cuando vas a decir que eres la novia del príncipe Levi?- me pregunta Elia.- Deberías de aceptarlo de una vez. Bueno aceptado lo tienes, pero no lo dices. El pobre Levi debe estar pasándolo mal. Su novia no dice públicamente que es su novia aún después que todo el mundo haya visto como os besabais en el baile real de invierno.

Pienso las palabras de Elia y es verdad, Levi debe de sentirse mal porque no digo publicamente que soy su novia aún cuando todo el mundo lo sabe.

Chase le da un pequeño codazo a Elia, quien se queja.

- No presiones a Cris. Si no quiere decirlo es por algo.- dice Chase.

- ¿Algo?- dice su novio.- Pero si está más que claro. Cris se comporta muy melosa respecto a Levi. Muy enamorada. No entiendo el problema.

- Yo tampoco.- apoya su hermana.- ¿Acaso ha ocurrido algo? Si es así, le voy a quebrantar cada uno de sus huesos, aunque me vaya a la cárcel.- amenaza al aire.

- No ha ocurrido nada, chicos.- la calmo.- Es solo que...- miro a todos lados menos a ellos unos segundos hasta que hablo.- No me lo ha pedido ni yo a él. Sé que es absurdo, pero... no sé. Me gustaría que me lo pidiera, no digo ramos de flores ni una fiesta, eso no va conmigo. Pero con que me lo preguntara sería suficiente. Y yo, bueno.... no me atrevo. Me resulta raro todo esto, ¿sabéis? Es la primera persona a la que le gusto y correspondo sus sentimientos y... no sé porqué siento una cierta inseguridad cuando quiero preguntarle. Sin razón alguna temo que me rechace si le pregunto y no me atrevo. Cuando estamos a veces solos quiero preguntarle y la inseguridad y el rechazo me invade, no consigo preguntarle. Agh. Esto me abruma.

- ¿Tienes miedo a la respuesta de Levi?- pregunta Chase.

Yo asiento.

- No me gustaría que me rechazase. Aunque eso es su propia elección y no puedo forzarlo a nada. Pero lo que más temo mi propia reacción. No quiero estar como las personas de las películas que al ser rechazadas se hunden en la tristeza.

- Osea. Resumiendo: no te llamas novia del príncipe Levi porque ni tú ni él se habéis preguntado y segundo tú temes el rechazo.- resume Elia. Asiento.- Amiga, eres tonta, pura y poco inocente. Deberías de dejar de pensar respuestas que no tienen sentido. Él está más que coladito por tí desde el primer día que vino. ¿O acaso no es como un mosquito a la luz? Levi no te va a rechazar y si lo hace que se joda.

- Mi hermano lleva razón. Por una vez en la vida.- susurra lo último. Elia le da una colleja.- Deja de hablar en tu mente por Levi y pregúntale. Si no le preguntas, nunca sabrás cuál es su respuesta. Así que amiga, hazlo.

Los días pasaron e invite a Levi a una cita en el parque donde me pidió ser su pareja de baile. Yo estaba nerviosa. Ese día iba a preguntarle de una vez por todas y dejar mi mente tranquila. Me puse unos vaqueros y una camiseta de mangas cortas morada. Me senté en la banca frente al lago y esperé por Levi. Al cabo de unos minutos, Levi apareció vestido con un traje y algunos guardaespaldas.