04 | Tragedies.

872 63 0
                                    

CAPÍTULO CUATRO.
TRAGEDIAS.

Otro año paso y ciertamente las cosas no había mejorado para la pareja lo cual les hacía caer en un abismo lleno de caos

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Otro año paso y ciertamente las cosas no había mejorado para la pareja lo cual les hacía caer en un abismo lleno de caos. Finn e Ingrid eran los más felices ya que cuidaban a la pequeña Freydis con ayuda de Esther.

Elijah y Kiara ciertamente pensaban que con el tiempo y con la ayuda de Esther podrían concebir a su primer hijo muy pronto, pero la verdad es que no había magia que les ayudara ya que la naturaleza no quería un hijo descendiente de los Mikaelson, Bluemoon y Blackstar. Por más esfuerzos que hacía Esther en ayudarlos terminaban en fracaso.

Un bebé de esta estirpe se convertiría en uno de los brujos más poderosos jamás vistos. Tan solo bastaba con ver a Ivar cuyo poder rivalizaba con el de Ayana, una bruja Bennett de la aldea con bastantes años de experiencia en la magia y a Ivar un niño Bluemoon y Blackstar de solo diez años cuyo linaje le da un poder sin precedentes.

—Mamá—comento Ivar llamando la atención de Kiara quien se encontraba hundida en sus pensamientos—Mamá, ¿puedo ir con la abuela a recoger frutos al bosque?

—Por supuesto cariño—beso la frente de su hijo para salir de su hogar y dirigirse a la casa de Mikael en donde todos estaban ayudando para celebrar el primer cumpleaños de Freydis quien era tan hermosa como lo era su madre—Hola Esther—comento llegando con su suegra cuando sus fosas nasales fueron inundadas por un exquisito aroma—¿Qué es lo que huele tan bien?

—Es el estofado que ha preparado Rebekah con el ciervo que cazo Finn—Ingrid iba entrando con su pequeña hija en brazos además de una sonrisa de oreja a oreja—Esther, ¿serias tan amable de cuidar a Freydis mientras terminamos de preparar la comida?

La rubia mayor sonrió en respuesta—Por supuesto que cuidare a esta dulce niña—dijo tomando en brazos a su nieta—Pero tenía pensado ir al bosque con Ivar.

Ciertamente a Ingrid no le agradaba la idea de que su hija fuera llevaba al bosque ya que últimamente se había escuchado de varios asaltos alrededor de la zona y no quería que algo le pasara a su hija.

—Creo que yo puedo acompañarlos—Kiara comento haciendo que las tres rubias sonrieran y al final Ingrid terminara por asentir—Bien, Esther te estaré esperando afuera. Iré por Ivar.

Al momento en que Ivar llego con su madre y Esther estaba con la pequeña bebé iniciaron el camino rumbo al bosque en donde cada vez se adentraban más y más adentro haciendo que incluso Kiara quien tenía cierto mal presentimiento sobre el asunto.

—¿Qué tal todo con mi hijo? —pregunto Esther llamando la atención de la pelinegra quien ciertamente estaba perdida en sus pensamientos—Estas muy distraída últimamente, ¿estás bien?

No, no estaba bien, pero Kiara era conocida por ser una mujer fuerte y muy obstinada además de no rendirse cuando se proponía una meta y eso era evidente.

The Beginning of the End | E. Mikaelson¹Donde viven las historias. Descúbrelo ahora