EL QUERIDO DEL JEFE (EN EMISIÓN)

CAPITULO 11 SUEÑO

- E- e - espera WANG YIBO, Mi... mi hermana, está allá abajo - titubeó tímido Xiao Zhan, se encontraba en su habitación, y Wang Yibo estaba muy pegado a su cuerpo.

- Mucho mejor, así te escuchará gemir mi nombre - susurró Wang Yibo, plantando uno que otros besos con mordidas.

- Wa-wang Yi-Yibo - Dijo entre cortado, sus palabras quedaban en el aire, sentía su piel estremecerse ante las caricias del rubio.

Lo que no recordaba es, ¿cómo llegó hasta su habitación con Wang Yibo?... Y es que de la nada se halla en su habitación y su hermana se encontraba en el piso de abajo, de eso estaba seguro, lo único que recordaba es cuando Wang Yibo lo llevó a cuestas al almacén y que empezó a llorar y terminó apresado en los brazos de Wang Yibo.

No, no pudo haber traído a Wang Yibo a su casa sin antes estar seguro de lo que iba a pasar entre ellos, y mucho menos hacerlo en su habitación, cuando su hermana se hallaba abajo, en cualquier momento podría entrar y...

-¿Xiao Zhan? - se escuchó la voz de la hermosa joven que venía subiendo las escaleras.

- ¡Yi-bo!... Por favor - suplicó entre susurro.

- ¿Súplicas para que siga?... o para que pare - sonrió siendo sarcástico.

- ¿Xiao Zhan? - Se escuchó nuevamente la voz, pero esta vez la puerta fue abierta.

El corazón de Xiao Zhan saltó de miedo, pues nunca le había fallado a su hermana, ni le había mentido en algún momento, y no se imaginaria lo decepcionada que estaría.

- ¿Xiao Zhan?... ¿Te sientes bien? - preguntó Wang Yibo, limpiando la frente de Zhan con uno de su pañuelos de seda.

el mayor parpadeo unas cuantas veces, solo para asegurarse de que realmente se hallaba en un coche. - ¿Eh? - no sabía que decir, estaba desconcertado, por qué lo que estaba viendo era a Wang Yibo limpiando su frente con un pañuelo, y no en su habitación como lo había visto momentos antes.

- ¿Qué soñabas? - Preguntó curioso y a la vez con una pequeña sonrisa.

- N-Nada - dijo luego de tomar un cabo de aliento, realmente estaba soñando. Y no solo era un sueño simple, estaba soñando con Wang Yibo a punto de hacerlo en su habitación.

- Ty mechtal obo mne - susurró Wang Yibo,(Estabas soñando conmigo) Zhan apenas y pudo alcanzar a escuchar, y se sintió peor sabiendo que el rubio podia saber lo que el soñaba, desde que tuvo aquel incidente, en las noches tenía varias pesadillas, y terminaba gritando al despertar, entonces tuvo ese mal hábito de hablar mientras soñaba.

- Puedes ir a descansar - señaló Yibo hacía afuera.

Zhan volteó para ver qué se hallaban frente a su casa, ¿desde cuando le había dicho a Wang donde vivía?

- ¿Tú? - estaba a punto de preguntarle a Wang Yibo, pero el rubio bajó del coche ignorando lo, dirigiéndose hacia el otro lado para abrirle la compuerta.

- Ven, ve a casa y sigue durmiendo - Le extendió la mano para ayudarlo a bajar. El rubio lo habia dicho en dos sentidos.

Zhan bajo del coche con la mirada perdida, seguia confundido y no lograba acomodar todo, no solo por el sueño, si no que también por qué no sabía lo que el rubio había susurrado, y no recordar nada luego de haber llorado; Pero eso no es todo.

Luego de bajar del coche Yibo le susurró - Gemias jodidamente bien mi nombre - volvió a cerrar la puerta, sin esperar respuesta por parte de Xiao Zhan, entró en la del copiloto y el coche arrancó, yéndose y dejando a Xiao Zhan con el rostro enrojecido, muerto de vergüenza.