10. Propuestas

575 44 0
                                    

Zoro se levantó por la mañana y casi por instinto volteó su rostro al lado donde se encontraba ella, y no pudo evitar sonreír ¿Por qué se había privado de ese privilegio antes? Claro, aunque si hubiera aceptado eso desde antes, ella se encontraría enrollada a su cuerpo y posiblemente desnuda, pero él mismo se evitó ese regalo; así que se conformaría con haberla visto de ese modo.

El cabello enredado, sus labios semiabiertos, su mano en el vientre y una pierna la tenía encima de la otra; quizás para muchos no sería una imagen atractiva, pero para él sí lo era. Deseaba mucho el poder abrazarla y darle un beso en esos labios entreabiertos y levantarla de esa manera, pero no, él ya no tenía ese regalo.

- ¡Barco a la vista! ¡Y se acerca muy rápido! - el peliverde se levantó y se dirigió a observar, a unos pocos kilómetros efectivamente había un barco que se acercaba a una velocidad considerable.

- ¡Confirmo! - gritó - ¡Hay que estar preparados! ¡No logro identificar quiénes son! 

- Bege - escuchó un susurro a su lado - Ay, no - dijo la mujer antes de agarrar su chaqueta de cuero y su bufanda.

- ¿Qué pasa? ¿Tenemos que preocuparnos por algo? - preguntó extrañado - ¿Tienes algún asunto con Capone Bege?

- Digamos que - dijo mientras arreglaba su cabello - me quiere matar.

* * *

- Hermano, has que vivan - decía casi en un susurro - y dale lo que sé que ella te ha pedido que le lleves.

- No puedo, Katakuri - dijo llorando - no puedo. La odio, odio a esa mujer - si no fuera por ella, tú no estarías así.

- Estás odiando a la mujer equivocada - escupió - no tengo ya ni fuerzas para obligarte - sonrió - pero piensa bien lo que quieres hacer con esa fruta - agarró su mano - te amo, hermano.

- ¡No seas un maldito sentimental, Katakuri de mierda! - lloró - ¡Anda levántate, imbécil! ¡Levántate y oblígame a darle esta fruta a esa mujer! - cacheteó su rostro - ¡Anda! ¡Actúa como ese hombre que se hacía perfecto y me hacía entrenar duro! ¡Levántate, Katakuri! - pausó - ¡Levántate, hermano! - Cracker no evitó quebrarse aún más al ver como la fruta que tenía en la mano tomaba una forma extraña, eso solo significaría... que su hermano estaba muerto.

* * *

- ¡Es Bege! - gritó Luffy al reconocer la extraña forma de castillo que tenía el barco.

- ¡Lola, Chiffon! - gritó Nami al reconocer a sus amigas que también la saludaban desde donde se encontraban.

- ¡PUDDING-CHAAAAAAAAAAAN!

Todos estaban emocionados y hasta un poco aliviados de que fuera Bege el del barco acelerado, no eran los mejores amigos; pero la estrecha amistad que mantenían con la esposa de este, les salvaba un poco de la avaricia del pirata.

Bege saltó a la cubierta cuando alcanzaron una distancia considerable y vio a todos los mugiwaras que se encontraban detenidamente; fumó fuertemente su puro y exhaló como si tratara de tranquilizarse, y esta suerte de tensión no pasó desapercibida por Luffy, Sanji y Jinbe.

- ¿Dónde está? - preguntó tranquilamente

- ¿Eh? ¿Dónde está quién?

- ¡No traten de ocultarla de mí! - dijo fastidiado

- ¡Oye Bege! ¡No te comportes así!

- ¡No, Chiffon! ¡Esa mujer no puede ocultarse para siempre!

- ¡Eh, tranquilo! - todos voltearon a ver de donde venía esa voz, la pelimagenta había bajado rápidamente y el espadachín estaba a su tras, por si tenía que atacar - ¿Aún no me perdonas, Bege?

Último chance (Zoro Roronoa x Reader)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora