❝ Aguas revueltas ❞ ━ NaLu

O6; proyecto

—Tienen un mes, señores. –El profesor Gildarts recostó su cadera en su escritorio mientras nos veía a todos con una cara seria.

Otra vez la maldita ansiedad me invadía, Gildarts Clive era uno de los mejores y más exigentes profesores de la Universidad, no le podía fallar en este proyecto final que encargó y mucho menos en mi último semestre.

—Pst, Natsu, ¿tienes algunas ideas ya? –Mi mejor amigo, Gray, me susurró a un lado mientras yo repasaba cada concepto del proyecto y lo recreaba en mi mente, mi cabeza comenzaba a doler. —Oye viejo... la nariz te está sangrando.

—¿Ah? –Pude apenas decir saliendo de mi trance llevándome el dedo para comprobar que, efectivamente, me empezaba a sangrar como ayer. —Perdón, sí, ya algunas ideas me están viniendo a la mente, ¿tú? –Comencé a limpiarme con un pañuelo.

—Ni puta idea de qué haré. –Suspiró y se recostó en su silla haciéndola rechinar, de repente saltó haciéndome exaltar. —¡Ya sé! Hagamos juntos este proyecto.

—¿Qué? No lo creo, si lo hacemos juntos será mucho más difícil porque Gildarts se pondrá más estricto al ser en equipo, aparte, si esto sale mal, estás consciente de qué la calificación no sólo va para mí, sino también para ti.

—¡Eso lo sé! Pero piensa así, es nuestro último semestre, Natsu, dentro de casi dos meses saldremos y seremos todos unos profesionales. Es evidente que tú y yo ya casi no mantendremos contacto, aparte debemos de dar lo máximo de nosotros en esto.

—¡Está bien! Está bien. –Resoplé, aún no muy convencido.

Y con esas palabras, descubrí que tú nunca terminarías de sorprenderme Lucy.

Saliendo esa tarde fui a la cafetería de la playa con Gray para ponernos de acuerdo, y de entre todo el revoltijo tenía algo en claro; tú, Lucy, serías la protagonista de aquel proyecto.

El concepto era sencillo, ¿no? Gildarts nos encargó una película casera –pero bien hecha– de mínimamente una hora, y estaba más que seguro que yo quería que tú fueras la protagonista de la película.

Ya con varias ideas, te llamé y te expliqué el contexto. Llegaste quince minutos después, con un notoria emoción en ti.

—Sabes, siento que me has estado pegando el amor por todo eso de las películas y demás. Ahora me la pasó en mi habitación viendo un montón de esas cosas. –Sonreíste y me mostraste tus perfectos y blancos dientes. —¡Estoy entusiasmada por probar esto de la actuación!

—De acuerdo, tórtolos. –Gray se aclaró la garganta, llamando nuestra atención. —Mañana comenzaremos a grabar para después meterlo a edición con nuestro amigo Gajeel, él está estudiando diseño gráfico, la verdad no sé bien de qué va eso pero se lo daremos aún así.

Todos asentimos, cuando terminamos, Gray se fue por su lado y tú y yo íbamos entusiasmados por la acera, viendo las tiendas.

Me agarraste el brazo y me jalaste hacia ti, pero te quedaste extrañada por un momento, no comprendía porqué hasta que vi.

—Natsu, ¿por qué tienes tantos hematomas en el brazo? ¡¿Qué te pasó?!

Ay Lucy, con decirte que en ese momento yo tampoco comprendía qué sucedía.