20. Rose

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— ¿Y cuál es tu sabor favorito? — me preguntó con una leve sonrisa mientras caminábamos por un parque que estaba a unas calles de la escuela, tenía la corbata desajustada, su camiseta estaba desfajada y no estaba peinado, parecía un universitario despreocupado, era viernes y habíamos faltado a la escuela, creo que era la primera vez que hacía algo así por alguien

— Pistaches, aunque no estoy muy seguro, me gustan demasiados sabores de helado — le explicaba y él sin dejar de sonreír me observaba, desde hace días salíamos como hoy, caminábamos por un parque o alguna plaza, comíamos juntos y habíamos ido al cine un par de veces, era un poco extraño

— ¿Pasa algo? — pregunto mientras nos sentamos sobre el pasto justo a un lado de un árbol de gran tamaño, desde ahí podíamos ver el puesto de helados, al parecer aun no abria, pensábamos esperar para comprar un par

— Ah no, simplemente pensaba en que era raro que me hayas pedido faltar a clases — le explique un poco tímido, ya que esto era... extraño, al menos nunca habia salido o platicado de esta forma con alguien como él

— Los jóvenes deben romper las reglas de vez en cuando, es como un respiro, si eres responsable y obediente siempre tiendes a explotar, eso provoca que hagas cosas peores, así que esta bien hacer una travesarusa al año —

— ¿Y los adultos no pueden? — pregunté pensativo, él también estaba siendo irresponsable, ¿no?

— Los adultos podemos, pero hay niveles, tal vez nuestros padres no nos regañen o disciplinen, pero las leyes son quienes nos controlan, además de que debemos ser conscientes de las consecuencias que podríamos provocar — explicaba con seriedad mientras observaba hacia delante supongo que veia todo lo que pasaba enfrente, las personas caminando, perros jugando con los niños, yo también observaba todo eso de vez en cuando.

— Profesor-

— Luzuuuuu — dijo un poco molesto y sonrei por su tono de voz malhumorado

— Luzu — corregi algo divertido y trague saliva nervioso por lo que iba a preguntar — ¿es cierto que te estas divorciando? — pregunte algo tímido y evite verlo al rostro, me puse algo tenso al no recibir respuesta por algunos segundos

— Las noticias vuelan ¿verdad? — dijo y su tono de voz me hacía pensar que sonreía, voltie a verlo, efectivamente sonreía, pero...de una forma triste

— Lamento haber preguntado — susurré arrepentido al ver su reacción

— No te preocupes, igual en algun momento hablaria de ello —

— ¿Por qué? — pregunté algo curioso, pero desanimado

— La vida me ha enseñado que callar todo, llega a ser doloroso e incluso el silencio logra asesinar a las personas — susurraba ahora cabizbajo mientras jugaba con el pasto que había a nuestro al rededor

— ¿Así de doloroso es su divorcio? — susurré tímido mientras lo observaba de reojo

— Mi divorcio es la consecuencia de mis acciones y decisiones que he tomado como adulto, pensé que darle a mi esposa todo lo que quería, tratarla como la mujer más hermosa y más perfecta del mundo, y tratarla bien, seria suficiente para que ella fuera feliz a mi lado — sonreía con nostalgia y entonces suspiro como si estuviera aliviado — pero tal parece que nada es suficiente y no la culpo, desde que nos conocimos sabia que tenia muchos problemas y traumas, en algún momento no lo iba a soportar — explicaba con tristeza y yo poco a poco me sentía peor por hacerlo decirme todo esto

— ¿Usted la amaba? — pregunté y por alguna razón mi corazón se acelero, ¿estaba preocupado por su respuesta?

— Le tenia miedo — contesto solo segundos después y en eso momento lo vi ahora completamente confundido — si ella hubiera llegado un día a casa después del trabajo y me hubiera dicho "¿Sabes que? Ya no te soporto, por favor clava este cuchillo en tu pecho", sin pensarlo hubiera hecho lo que pedía si eso la hacia feliz — mi cuerpo se había puesto algo tenso al escuchar aquello, no podía evitar imaginar aquella situación — es lo que pasa cuando dependes emocionalmente de una persona —

Toxic Love (Wigetta)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora