10: calidez

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El camino a casa fué bueno, Minho sonreía admirando su mano unida a la de Chris mientras que el alfa acompañaba con suavemente las melodías de la radio con su voz.

—¿Nunca pensaste en dedicarte al canto? —pregunta el omega.

—Es gracioso que lo preguntes, es lo mismo que me preguntó mi madre cuando acabé la escuela —dijo con diversión— Pero no, nunca lo pensé, incluso hasta mis dieciséis quería ser jugador profesional de baseball.

—Eso era bastante ambicioso —dice sonriendo.

Siguieron hablando hasta llegar al edificio donde subieron hasta sus apartamentos y en teoría se tendrían que despedir.
Ambos se pararon frente a sus puertas y guardaron silencio.

—¿No quieres dormir conmigo? —dijo Chris y luego se dió cuenta que su propuesta sonaba bastante mal— Hablo de dormir no de otra cosa, no quería insinuar nada —se corrige y Minho solo pudo reír.

—Tranquilo Chris, no dormiremos de esa manera si no quieres —el omega usa un tono burlón.

—No es que no quiera pero sonaba algo invasivo para la primera cita...

—Tranquilo, te entendí, buscaré unas cosas y vuelvo ¿Si? —el alfa asintió complacido y vio a Minho entrar a su departamento.
El omega volvió solo con unos zapatos más cómodos y su cepillo de dientes. Luego ambos ingresaron a la casa de Christopher.

—Ponte cómodo, ¿Quieres que te preste algo para dormir?

—Si, me gustaría —el omega no podía sentirse mejor, amaba tener el aroma de Chan lo más cerca posible.

—Aunque temo que luego no me lo devuelvas, recuerdo haberle prestado una camiseta a cierto omega y nunca más me la regresó —Minho se sonroja haciendo sonreír a Chris.

—Yo... Sólo lo olvidé...

—Puedes conservarla.

Minho se alegró que Chan le dejara conservar la camiseta.

Sin decir más, ambos fueron al cuarto de Chris, Minho se sentó sobre la cama esperando a recibir las prendas que resultaron en una camiseta holgada.
Cuando el alfa fué a cambiarse Minho decidió hacerlo en la habitación y un pensamiento travieso pasó por su mente.

—¿Vamos a dormir? —luego de un rato Chris entró nuevamente al centro y vió al omega sentado en la cama con su camiseta puesta, lo que le hizo sonreír y sentirse cálido.

—Claro —dijo en un tono que sonó algo extraño para el alfa, entonces cuando el pelinegro examinó la habitación notó que Minho no estaba utilizando el pantalón que el le había ofrecido— Me gusta dormir en ropa interior —dijo con simpleza e inocencia fingida.

Chris sonrió y se acercó al omega. Se subió a la cama y acarició su cabello.

—¿Me darías otro beso? —el omega sonrió encantado, le daría todos los besos que el alfa pidiera.
Chan se recostó contra la cabecera de la cama y Minho se sentó en su regazo.

Besó al alfa y dejó que el menor tomara el control de la situación. Era sin dudas un beso sin dudas mas caluroso que el primero, podía sentir la lengua de Chris explorar sin pudor su boca y se oían chasquidos húmedos en el silencio de la habitación.
Minho enredó sus dedos con el cabello de Christopher para profundizar el contacto, un pequeño jadeo se fugó de los labios del bajito cuando el alfa amasó su culo con sus grandes manos. El omega se sentía tan pequeño bajo ese fogoso tacto que empezó a sentirse algo mareado.

Cuando el mayor rompió el contacto se sintió insatisfecho y se lo hizo saber al alfa soltando un gruñido.

—Creo que es suficiente —dijo un acalorado Chris, logrando una expresión de disgusto en el omega.

—Christopher Bang, no puedes dejarme así —dijo enfadado pero su expresión solo hizo reír al alto— Oye no es gracioso.

—Quería esperar más de una cita para hacer algo más —dice acariciando las hebras castañas del omega haciendole ronronear.

—Chan debes relajarte un poco—dice en un puchero— Puedo darte algo menor a eso por ahora —pide el omega— no pienses demasiado y déjate llevar.

Chris cedió ante el omega y volvió a ser besado, pero no duró demasiado, ya que los labios del omega se dirigieron a su cuello donde le mordió y lamió a su antojo.
La creciente erección del alfa estaba aprisionada bajo el omega y que este se moviera constantemente no ayudaba a su estado.

Las manos juguetonas de Minho se apresuraron a colarse dentro de su camiseta y acariciaron toda la superficie del pecho del menor sintiendo la firmeza de su abdomen. Luego de estar satisfecho con su tacto, Minho se las ingenió para abrir el pantalón del alfa y despegó sus labios del cuello ajeno.
Christopher quién aún permanecía en la incertidumbre, abatido por las atenciones del omega sobre el, entendió lo que el mayor iba a hacer cuando vió la cercanía del rostro de Minho y su bulto.

Un suspiro se escapó de su boca del solo pensar en los labios de Minho alrededor de el. La sonrisa del omega al oírlo era demasiado linda para la situación, no podía terminar de imaginarlo chupándole.
Pero no tuvo que hacer esfuerzo imaginando porque Minho iba al tema, el omega rápidamente se deshizo de los holgados pantalones de dormir y de la ropa interior del alfa.
Usó su mano para acariciar la intimidad de Chris y disfrutó de la expresión de placer en la cara del alfa.

—Eres el mejor —soltó Chris entre jadeos mientras la mano de Minho trabajaba habilidosa. El castaño sonrió y sintió su ego alimentarse del halago.

—Si cariño, seré el mejor para tí y usaré mi boca para que te sientas mejor —el alfa suspiró profundo en respuesta y Minho detuvo el movimiento de su mano.

Una vez estuvo lo suficientemente cerca, lamió y chupó con esmero a Chris. El alfa se deshacía en gemidos al sentir la cálida boca del omega tomando toda su extensión con mucha técnica. Llevó su mano al cabello de Minho y lo acarició, el omega levantó la mirada y se encontró con la de Chris, el estómago del alfa se revolvió sintiendo que no aguantaría demasiado, mucho menos si Minho seguía mirándolo de esa forma.

—Cariño, ya voy a terminar —dijo Chris hablando cómo pudo y creyó que el omega se apartaría cuando quitó el miembro de su boca.

—Haré el trabajo por completo.

Volvió a chupar hasta que sintió el líquido caliente abrirse paso por su garganta y tragó todo lo que pudo pero fué imposible no atragantarse al menos un poco. El omega se limpió los restos de la sustancia en el baño y volvió a los brazos del alfa que ya había recobrado algo de compostura.

—¿Fué bueno? —murmura sobre los labios de Chris. El alfa besa los labios aún hinchados Minho.

—Estuviste increíble, me gustaría darte una recompensa, aún no pudiste acabar —dijo al ver la ropa interior del omega mojada. Minho negó y se abrazó al cuerpo de Chris.

—Hazme cariños hasta dormir, ya veré como me lo cobro luego —bromeó.

Christopher sonrió y se abrazó el pequeño cuerpo del omega. Le dió besitos a Minho hasta que ambos se fueron quedando dormidos.

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wn les quiero traer mas adaptaciones pero no se cuales y pq las historias de mis borradores me da miedo publicarlas en fin si ven algun error en los nombres o algos diganme y pasen a ver mis otras historias

great daddy! ♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora