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Había pasado una semana desde que fueron atacados por ese sujeto y ya nada era igual que antes.

Los jóvenes se encontraban en la misión de recuperar las cartas hechizos que fueron robadas por otro equipo. Mientras Alluka, Leorio y Kurapika iban a la ciudad para comprar repuestos.

-Te voy a proteger de todos Gon, si algo te pasa yo me muero. --- Besó la frente de su amigo para salir a la pelea.

Esa última semana Gon conoció a profundidad el corazón de Killua y se dió cuenta de que vivía dentro de él. Pero no de la misma forma en la que el albino vivía en su corazón.
Sus abrazos, sus besos, sus caricias, sus palabras, sus acciones, sus mimos y sus regaños, habían despertado otro tipo de sentimientos en el moreno. Sentimientos que no eran correspondidos.

-Que fácil es luchar con ellos ahora, antes me costaba demasiado. ---Killua estaba con sus manos en los bolsillos después de vencer en segundos a sus oponenentes.

-Ahora eres mucho más fuerte. --- Comenzó a mirar los músculos de su amigo que habían madurado con el paso de los años. Killua estaba mucho mejor que Kurapika a sus diecisiete años---

-Gon, ¿Por qué me miras así?

-Creciste mucho estos dos años.

-Tú igual, aunque soy más alto yo.

El moreno hizo un puchero al que el albino no se pudo resistir. Lo abrazó de la cintura pegándolo a su cuerpo y frotando sus mejillas.

-Eres tan tierno Gon.

-No soy tierno.

-Si lo eres. --- Comenzó a besar toda la cara del moreno sin disolver el abrazo---

-Lo que tu digas...

-Qué extraño, tu eres una persona bastante terca. ¿Quién cambió a mi mejor amigo?

Tú me cambiaste idiota, date cuenta de que estoy a tus pies.

-No soy tierno.

-Ese es el Gon que tanto me gusta, terco como mula.

¿El Gon que tanto le gusta? ¿Le gusto?

-Vamos a la ciudad, tu hermana te debe extrañar.

-Me quiero quedar contigo un rato. ¿Y si nos fugamos juntos?--- La cara de súplica de Killua ablandó mucho más a Gon---

-¿Y a dónde iríamos idiota?

-No me importa si estoy contigo.

-Uhmmm, ¿Te gustaría subir al árbol mundial conmigo?

-¿Al que subiste con tu padre?

-Sí.

-Estaba esperando que me invitaras.

Killua volvió a besar la frente del moreno y luego le acarició el cabello como si fuera un perro.

Quiero que me beses la boca, no la frente idiota.

-Killua, ¿Sabes que hay más formas de demostrar cariño?

Si no le hubiera pedido un beso de buenas noches nunca me hubiera besado.

-Claro que se que las hay tonto.

-Si quieres, podemos caminar tomados de las manos.

Los ojos del albino brillaron como estrellas y sus mejillas se acaloraron.

-Cómo se te ocurre que vamos a caminar tomados de las manos Gon, eres idiota.

Hiciste el mismo escándalo con mi beso de buenas noches. Mírate ahora.

Sin censurasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora