Te odio, pero te amo amor.

37. Las apariencias engañan

Alexandra había llegado a eso de la cinco de la tarde, por una noche, porque regresaría nuevamente a África.

¿Entonces te vas otra vez? __ le recriminaba Mary a su amiga.

Voy a darme de baja__ dijo pensativa__ quiero hacer cosas nuevas.

¿Pero porque?__ tenia curiosidad.

Mary después te cuento eso, es un cuento muy largo__ suspiro __ lo que realmente quiero es que me ayudes a crear una empresa, tu eres muy buena para eso__ la miraba interesada.

¿Una empresa? __ Su curiosidad aumento __ ¿De que la quieres?

No sé,  tu sabes mas de eso, lo que si te puedo decir es que cuento con unas tierras en el campo y algunos ahorritos en el banco y tu serás mi socia ¿Qué te parece? __ decía y miraba a su amiga.

Bueno, porque no__ algo nuevo.

¡Nos vamos!

Decidieron  pasar la noche planificando e  ir a tomar unos tragos en un club muy conocido y de prestigio, este tenía pequeñas salas, en las cuales ubicaban  mesas y sillones, muchos iban a concretar negocios o  tener aventuras, era un lugar de clase, allí podrían sentarse tranquilamente a hablar de negocio.

Llegaron pidieron una mesa y unos tragos, comenzaron  arreglar los asunto de la nueva empresa que ellas organizaría, era  las tierras que su padre le había heredado, las pondría a producir, era en una región ganadera, tal vez la producción de productos lácteos, Mary se encargaría de la investigación.

¿Cuánto tiempo vas a demorar? __ inquirió Mary.

¡No sé! __ miraba los papeles __ lo más pronto, quiero encargarme de esto y de mamá, que ha estado muy sola.

Humm, veamos __ dijo pensativa.

Buenas noches__ saludo una voz masculina __ ¿Puedo sentarme? __ decía con la mano sobre el espaldar de la silla.

Mary y Alex alzaron la cabeza y vieron la sonrisa de Esteban que estaba junto a ellas, Alex lo miro de mala gana. Mary solo sonrió.

¡Claro! __ contesto sonriendo.

Alex se levantó y dijo una excusa de ir al baño se retiró pero iba mascullando insultos y maldiciones a Esteban.

Francisco llegaba en esos momentos y pudo ver a Mary sentada acompañada por un hombre, miro de manera extrañada, porque se supone que su amigo iba a estar allí, para ver la forma de cancelar lo que estaba por hacerle a Mary, en esos momento se acerca Dayana y le saluda.

Llegaron a la mesa de Anderson que ya estaba sentado esperando con un vaso de whisky, ellos se sientan piden las bebidas y comienzan a charlar, Dayana no disimula su interés por Anderson, este al verse asediado se levanta con la excusa de ir al baño y allá a unas cuantas mesas esta Mary acompañada por ese imbécil, sus puños se cierran, Dayana al ver la expresión, como una serpiente se le acerca y también descubre a Esteban y sin pensarlo escupe su veneno.

Y ¿desde cuándo esos dos regresaron? __ dijo con tono de burla y celoso.

¿Quienes? __ pegunto tensándose más su cuerpo.

Mary y Esteban __ dijo __ ello lo abandono y lo arruino __suspiro recordando lo que le hizo a ella__ ¡Eso si es amor! Ella ya lo perdono.

Él regreso y se sentó pensativo y furioso.

Alex regreso a la mesa y trato de hablar con Esteban, este solo sonreía de ver el esfuerzo que ella hacía para hablarle.

Mary se disculpó para ir al baño, y al pasar por la mesa de Anderson vio como la víbora de Dayana se enrollaba en el brazo de Anderson.

Mary sintió como su cara se enrojecía por la rabia, lanzo una mirada de desaprobación, le dolió en el corazón, porque se sentía así, él solo era una persona que no significaba nada para ella__ estúpido, imbécil__ pensaba. Se repetía la misma  sensación cuando vio a la mujer en el apartamento Anderson, volvió la pregunta de Alex ¿Te enamórate? __ sí, me enamoré de la persona equivocada. Dayana nuevamente le estaba haciendo daño.

Regreso a la mesa, y con el rostro sombrío, dijo que debían marcharse. Alex la miro y comprendió rápidamente que algo malo estaba pasando se despidieron y se marcharon.

No dijo nada solo lloraba en silencio, Alex conducía.

Anderson esa noche no llego.