TINY TORD | TomTord

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El lugar era algo grande, a la primera vista podía decir que había unas 30 personas en diferentes áreas jugando o relajandose, había un poco de varias cosas: en el centro de toda la sala tenían cuatro mesas, dos de billar, una de ping pong y otra de futbolito, a lo largo de la pared había algunas otras maquinitas, algunas de juegos de disparos, otras de simulación de carreras, un medidor de fuerza, canazta, pinball, y un par más que no recordaba como se llamaban ni había entendido cómo se jugaban; además en el fondo había una pequeña área de estar, con varios sillones amplios donde había un par de soldados durmiendo y otro par del personal platicando

PATRYCK-Ésta área es una de mis favoritas-dijo mientras se estiraba un poco y hacia tronar su espalda-me relaja bastante

TOM-Por algún motivo esperaba ver a más personas

TORD-Bueno, si se le permitiera el acceso a todos, cuantas veces quisieran, cuanto y cuando quisieran, este lugar estaría completamente en caos

PAUL-Te tienes que ganar el acceso, debes tener cierto rango para entrar y aparte de eso sólo se te permite usarlo dos veces a la semana, dos horas máximo, no importa el cuando, pero se tiene registro, si te atrapan quedandote más tiempo o viniendo más días se dará un castigo

PATRYCK-Para mi este es mi segundo día, ¡Así que aprovechemos el tiempo y juguemos algo!

Entraron siguiendo al de mechas caídas a los juegos que quisiera jugar, aquí no habia tanta formalidad como en otros lugares ante el pequeño, todos saludaron amablemente pero no sé molestaron en tomar una posición firme para hacerlo, al sinojos le parecía curioso, era como sí aquí los rangos o posiciones funcionales se olvidarán y sólo se divirtian y relajaban

Al primer juego que llegaron fue a la mesa de ping pong, que estaba desocupada en ese momento

PATRYCK-Espero que sepas jugar a esto, Thomas

TOM-Si la pulga tuviera su tamaño normal podría mostrarte como le pateó el trasero-lo dejó a manos del cejas pobladas y tomó una raqueta posicionándose en el extremo contrario al del Polaco

PATRYCK-Juguemos dos de tres

TOM-¿Qué si gano?

TORD-Ya no hagan apuestas-advirtió sacándole una risa al resto. Patryck fue el primero en sacar y Tom respondió hábilmente, la pelota cruzó unas diez veces la mesa de un lado a otro hasta que el primer punto fue anotado por el de mechas caidas

PATRYCK-Punto a la casa-celebró con un pequeño baile que avivó la competitividad del sinojos, iniciando con una nueva ronda; la pelota duró más tiempo sobre la mesa y cada golpe aumentaba de velocidad, y con un golpe fuerte la pelota quedó lejos del alcance del soldado

TOM-Punto a la visita-imitó el pequeño baile

PAUL-Ni que fuera una competencia nacional

TORD-En teoría sí podría serlo-la emoción en ambos se notaba al estar uno a uno, aunque no hubiera un premio al final, ahora era una juego de orgullo

Patryck comenzó la última ronda, que empezó a llamar la atención de un par de soldados que estaban cerca de ahí por lo serio que se tornaba, ambos trataban de dejar la pelota fuera del alcance del otro en cada golpe

Con un de ellos, un tanto desesperado por no perder la pelota, el de mechas la lanzó directamente a la cara del Británico, pero por suerte y unos increíbles reflejos, regresó la pelota antes de que lo golpeara y en cambio terminó dándole en la mitad de la frente a Patryck

Pará los espectadores primero fue una sorpresa y después se soltaron a reír un poco, Tom se veía aliviado de no llevarse ese golpe y orgulloso de haber vencido