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En el comerdor sólo había dos temas de conversacion: Patryck habiendo limpiado la nieve de los techos inexplicablemente más rápido de lo que muchos otros soldados lo hubieran hecho incluso con ayuda o Tom superando a varios de los soldados con más experiencia en el entrenamiento de esa mañana

Y hablando de ambos, estaban descansando cómodamente en sus camas, Patryck se había despertado sólo para encontrarse con una comida caliente traía por Paúl, la disfrutó tranquilamente cómo pocas veces lo hacía junto con un largo sermón que le dio el de cejas pobladas por sobreesforzarse. Tom se había dado una relajante ducha y estiraba sus músculos cansados recostado en la cama de la habitación de Tord, su cuerpo ya se estaba acostumbrando al ejercicio exigente, mientras el pequeño escribía algo en sus pequeñas libretas

TORD-Así que desplazaste de lugar a dos de los soldados con mejor rendimiento de esa sección-comentó sin mucha expresión, tratando de ocultar su asombro, había visto al otro superar los obstáculos y realizar los ejercicios eficazmente, tal vez haber estado metido en varios problemas antes le ayudo a tener la habilidad de evitarlos

TOM-Ahora me pregunto si eres tan estricto cómo decías-dijo con ligera burla, sólo recibiendo una mirada algo hastiada del pequeño-¿Entonces no me dejaras ir a la compañía de armas?-el Noruego puso los ojos en blanco, desde hace unos días ese era un tema que había estado saliendo varias veces

TORD-Ya te dije que si quiero regresarte con vida a Edd, no puedes acercarte a ningún arma, eres capaz de dispararte tú solo a la cabeza

TOM-¡Oh vamos! Ya estoy teniendo el entrenamiento físico, ¿Por qué no tener todos los demás también? Cómo el de pilotaje

TORD-¿Pará qué necesitarías saber pilotar un avión o un tanque? Saliendo de aquí no tendrás ninguno de ellos

TOM-Pero tú los tienes ahora, dame el gusto-el pequeño soltó el lápiz dejándolo caer con un ruido sordo en el papel, el más grande pensó que se había molestado y lo regañaria como siempre, pero la mirada que le dio era una completamente seria, no la típica que hacía cuando sabía que no estaba tan molesto y sólo le seguiría el juego en una discusión entretenida

TORD-Dejarte venir aquí, fue un gusto que te cedí, ¿No te satisfases?-tenía un tono de voz muy extraño que no alcanzaba a entender sus intenciones, pero sabía que está vez no estaba jugando

TOM-Pues aún hay varias cosas que quisiera hacer aquí

TORD-¿Pará qué? Ya tienes varias actividades para entretenerte, no necesitas más

Dio fin a la conversación con esa frase, volviendo a su escritura, el más grande sólo se quedó mirándole, era muy raro que Tord no le siguiera en su discusión de broma, esperaba alguna respuesta como "no quiero que destruyas alguno de mis vehículos" así poder seguir insistiendo sólo por juego

Después de un par de días, el Británico empezó a notar un cambio en la actitud del pequeño, ya no tomaba en broma sus insinuaciones de las intenciones que tenía, hablar de sus capacidades como miembro hipotético de su armada se tornaba en un tema delicado, ya distinguía perfectamente la diferencia de Tord serio y el juguetón, y el segundo ya casi no se veía

En una de las tantas visitas con el Doctor, Tom le pidió con señas al cejudo hablar con él a solas, mientras el pequeño era atendido; la petición fue inesperada, pero el cejudo no vio malas intenciones y lo siguió sin protestas

TOM-Oye... ¿Has notado que Tord ha cambiado?-la pregunta le sorprendió, ciertamente sí había notado el cambio, en su perspectiva parecía que el pequeño ya no estaba tan convencido de dejar al Británico estar paseándose por ahí, pero no parecía querer regresarlo a Inglaterra, aún si tenía toda la capacidad

TINY TORD | TomTordDonde viven las historias. Descúbrelo ahora