Antes de irnos a casa decidí pasar antes a un parte de atracciones que estaba abierto en las noches, era una hermosa noche para ser sinceros, el cielo estaba despejado solo adornado con estrellas. Al llegar vi que ella estaba un poco desorientada, no sabia por que vinimos
— Que hacemos aquí?
— No te lleve al festival la vez pasada y pensé en mejor traerte aquí como recompensa...
— Enserio? Entonces vamos!
Se veía tan emocionada, mis manos las escondí en mis bolsillo y camine con ella mirando la cantidad absurda de atracciones que había, ella parecía fascinada con todo lo que veía en un momento note como paró mirando un enorme peluche, horrendo para mi gusto pero al parecer a ella le gustaba esa mierda, era un oso enorme y era uno de los premios de esos juegos estupidos o arreglados
Me acerque al pequeño puesto dejando un dolar en el mostrador, no era algo difícil solo era reventar 3 globos con 3 dardos, gané el juego, obviamente no me iba a ser complicado ganar una de estas estupideces...aunque para mi fuera una estupidez a ella la impresione mucho, sus ojos azules estaban brillando más de lo habitual solo por haber reventado 3 globos. Ese momento de admiración fue interrumpido por el hombre del juego
— ¿cual va a ser su premio?
— ah...Petya ven y elige
Observe como ella se acerco con bastante timidez sonriendo
— Pero tu lo ganaste, deberías elegirlo tu
— Si yo jugué fue para ganar el peluche que tu querías, así que escoge rápido
Gire los ojos a un lado y pude escuchar su dulce risa, pido ese horrendo peluche y nos fuimos a ver más cosas
— Mira!
Me llamo la atención enganchando su mirada en una pequeña fuente la cual daba leves chorros de agua cada cierto tiempo
— Te impresiona con casi nada...
Suspire y nos acercamos a la fuente, ahora que lo estaba notando ella cambió mucho también...dejo salir más ese lado sensible y dulce y creo que también hice lo mismo con ella...
— Es lindo apreciar los pequeños momentos...
— Tienes razón...pero eso no justifica que te impresiones con esa mierda
— ¿No?...pero es lindo y relajante, el agua sube y baja cada cierto tiempo con un patrón exacto que nunca se va a equivocar, los chorros que dispara a una distancia perfecta y ninguno de esos chorros se mezclan o rozan al salir...por eso es fascinante
Escucharla hablar sobre una maldita fuente me impresiono, le encontraba cosas hermosas a algo tan insignificante
La noche fue larga, pasábamos de un juego a otro sin descanso alguno, ella como siempre se impresionaba con nada y eso me causaba mucha gracia. Al fin ya el ultimo maldito juego, antes de subir pedí un helado para ella y unas palomitas saladas para mi, subimos a la atracción la cual era la rueda de la fortuna
— Muchas gracias por traerme
— Te la debía no? La próxima vez te llevare al festival, aunque no es la gran cosa tampoco
— Quiero ir la próxima vez...pero eso se hace cada año no?
— Correcto, aunque hay más festivales con diferentes celebraciones, te llevare al próximo sin falta
Ella me sonrió lo cual fue un deleite para mi, las vistas del lugar eran hermosas, los faros de luz que adornaban la oscuridad eran fascinantes, parecían pequeñas luciérnagas en el campo