Raíces, Mejoras y Apoyo inmediato

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Al mismo tiempo

Ryu y Kazusa

Pov Ryu

Después de desaparecer de la casa, la abuela y yo quedamos en un desierto.

Yo: ¿Qué buscamos aquí?- Pregunte a mi abuela.

Pero ella solo sonrió y me miro con algo de malicia.

Daruk: ¡Esa mirada significa PELIGRO! ¡PE-LI-GRO!

A pesar de querer regañar mentalmente a mi "acompañante" no pudo evitar estar de acuerdo con él.

Vi a mi abuela mirar al cielo y...

Kazusa: ¡Heimdall abre el Bifrost!

Espera que...

De pronto una intensa luz cubrió la zona en donde estábamos y más rápido de lo que llegue a pensar nuestros cuerpos fueron elevados.

Kazusa: ¡No vayas a vomitar!- Oí la recomendación de mi abuela.- ¡Disfruta el paseo!

¿Paseo?

En un parpadeo todo mi cuerpo se comenzó a mover a vertiginosas velocidades hacia el cielo.

Daruk: ¡WAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA! ¡ESTO ES DE LOCOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSS!

Esto era asombroso todo lo que pude ver fue una enorme cantidad de colores que equiparaban al arcoíris de la tierra.

Por unos instantes mire hacia mi costado y quede asombrado al ver como cientos de constelaciones que conocía pasaban con rapidez.

También pude ver algunos planetas pasar.

Quise tocar parte del túnel de luz, pero algo me indico que sería una mala idea.

Vi a mi abuela quien estaba acostada en la luz.

Yo: (Ojala Yuuki hubiese venido, le habría encantado esto)- Pensé en mi sobrina y en lo alegre que estaría.

Ya le llegara su momento pensé, por ahora debía concentrarme en lo mío.

De pronto, todo el túnel de luz comenzó a disminuir la velocidad.

Solo porque mi abuela me alcanzo a sujetar a tiempo fue que no me estampo de boca contra el duro piso que había bajo mis pies.

Me sujete el puente de la nariz y luche por volver a enfocarme en el presente. Ese viaje sí que había sido muy extraño.

Kazusa: Te iras acostumbrando.- Me dijo.

Como pude le asentí.

Cuando mis ojos miraron hacia arriba pude ver el lugar donde estaba.

Era una especie de cúpula dorada con varios detalles que cubrían el lugar, en el centro de todo había una base de metal tenía incrustada una enorme espada.

Y aquel quien portaba la espada era un enorme hombre de piel oscura, cubierto de pies a cabeza por una dorada armadura y un casco especial.

Aquellos ojos de un brillante naranja fueron intrigantes a mi parecer.

El hombre no deja de observar hacia el frente.

????: Bienvenidos a Asgard.

Okey, esa voz profunda le da puntos en lo que respecta a respeto.

Kazusa: Es bueno verte de nuevo Heimdall, veo que sigues igual de comprometido con tu trabajo.

Mi abuela parece no tenerle miedo, pero aun así noto que su tono con el hombre es respetuoso y amistoso. ¿Sera que habrán luchado alguna vez?

Los Guardianes De La EsperanzaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora