Capítulo 3 ☆ ¿QUÉ TAN LEJOS QUEDA VENUS?

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Desde que Jungkook me dijo el comentario antes de salir del restaurante, el ambiente se había tornado tan pesado que los dos optamos por quedarnos callados en todo el camino a casa, sumergidos en nuestros propios demonios. Tenía vergüenza de volver a preguntar, de volver a retomarle la palabra, porque él tenía un aura fuerte y sabía que habían líneas en las cuales, no podía cruzar tan fácilmente. Jungkook era intimidante cuando se lo proponía.

Habíamos llegado a casa cansados, a penas entré, yo me había recostado en mi cama de cuero y lo veía de vez en cuando abriendo la ventana para fumarse un cigarrillo tras otro, mirando al mar y no volteando más, al menos no a verme. Sabía la vergüenza que estaba pasando por la situación que se generó con su jefe y lo último que hablamos, no le sentó nada bien, por eso lo respeté con mi silencio.

Yo estaba jugando con mis piernas entre las sábanas, mientras trataba de desenfocar la mente de la situación tan incomoda que estaba presenciando, leyendo una de las revistas de colección que tenía de decoración en su sala, desviando de vez en cuando mi vista a mi profesor, pero me era imposible quedarme callado en esa insólita tensión sin sentido.

— Jungkook ¿Quién te gusta más, John Travolta o Michael Jackson?

Que estúpida pregunta Jimin.

— Oh... — Se quedó pensando unos segundos. — Michael Jackson.

— A mi también, aunque Travolta siempre va a ser mi actor favorito.

— Su única simpatía es que es bonito, Park.

— Mentira. También baila como todo un profesional y es muy buen actor.

— Normal.

— Eres un celoso, profesor.

— No creo celarle nada a la gente bonita y sin gracia.

— Ya... — Quise optar por olvidar su pesado comentario. — ¿Tienes Thriller?

— ¿El álbum?

— Sí, el álbum.

— Tengo Off the Wall.

El profesor y yo nos sumimos en una discusión tan insípida como cualquier otra, la diferencia estaba en que volvimos a tener ese espacio de seguridad entre nosotros, mientras la música sonaba en su radio y jugábamos al ajedrez sobre la alfombra persa tirada en medio de la sala, junto a mi cama. La idea la había dado él y a mi parecer, fue bastante significativo que buscara algo para distraernos en conjunto, porque en Manarola las televisiones sin señal, las lluvias tormentosas y la poca actividad en el pueblo, te daban para encontrar otra actividades orgánicas, esas que no hay en las ciudades.

De vez en cuando hacía comentarios referentes al álbum o a la canción que estábamos escuchando en el momentoz Oof the Wall era su álbum favorito de Michael como solista, me contó que lo conoció en Florencia y siempre que iba compraba discos de música para los días aburridos en Manarola. Me comentaba cosas referentes al juego de ajedrez que estábamos jugando, cosas en italiano, volvíamos a reír y seguíamos el juego hasta que llegó el atardecer.

Los atardeceres en Manarola eran un espectáculo, no duraban más de media hora pero si los presenciabas por un momento corto y desde el balcón alto de Jungkook, podías sentirte dueño del mundo, mirando las lanchas pesqueras en el mar, el horizonte, los techos de las tanta casas de colores bajo nosotros y el cielo bañado en cálidos sobre todos los demás. Manarola tenía un vientecillo que solo ahí podías encontrar.

— ¿Cual es tu planeta favorito, profesor?

— Júpiter.

— ¿Júpiter?

atómicos ☆ kookminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora