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La casa en la playa

Los primeros rayos del sol entraron por la ventana iluminando cada rincón oscuro, mis ojos se abrieron lentamente encontrándose al chico de cabellera púrpura sin polera.-Buenos días- habló mientras me entregaba una taza, el aroma a café inundó mi nariz; que linda forma de despertar. 

-Buenos días- hablé dándole una pequeña sonrisa, tomamos desayuno, nos vestimos y fuimos a despertar a Luna y Mana.

-Mei-chan, deberías vivir aquí con nosotras- habló Mana somnolienta mientras la vestíamos.

-Si, así podríamos jugar para siempre- dijo Luna de igual manera.

-No puedo vivir con ustedes pero....

-Por qué no puedes??- interrumpió Mitsuya.-Seríamos una familia feliz- dijo divertido mientras me daba una sonrisa.

-Tengo una mejor idea- hablé llamando la atención de las pequeñas.-Las voy a invitar un día a mi casa, les gustaría?? Podemos hacer una pijamada y....

-Siii!!- me interrumpieron con emoción.-Podemos hacer una fiesta de té y un desfiles de moda!!- dijo Luna dando ideas.

-Tambien podemos jugar a las princesas y contar cuentos de hadas!!- dijo Mana, parecía que el sueño que sentían se había esfumado y ahora estaban llenas de energía.

-Si, pueden jugar a lo que quieran- habló el pelipurpura.-Pero para éso, se tienen que comportar bien este finde semana con la niñera.

-Nos comportaremos bien!!- hablaron al unísono con una gran sonrisa mientras corrían a la entrada de la casa.

Mitsuya abrió la puerta y nos fuimos ruta a la casa de la niñera, en el camino sentí como el chico de cabellera púrpura tomaba de mi mano y la entrelazaba con la suya haciendo que Luna y Mana también quisieran ir de la mano conmigo, quitaron al pelipurpura y se colocaron ellas.-Oigan, ella es mía- habló el chico haciéndose el molesto.-No me la roben.

Llegamos a la casa de la niñera en dónde la chica nos esperaba en la entrada de la puerta.-Hola, como están hoy??- les pregunto a las pequeñas princesas.

-Bien!!- respondieron con una gran sonrisa mientras entraban a la casa.

-Gracias por cuidarlas, Jin- habló el pelipurpura a mi lado.

-Sabes que no es ningún problema, Taki- habló la chica mientras me daba una mirada rápida; lo acaba de llamar Taki??.-Tu eres la chica de la otra vez, no?- preguntó junto a una pequeña sonrisa que era completamente falsa para mí.

-Sí, es ella- habló el pelipurpura antes que yo pudiera responder a la pregunta.-Mi novia- dijo, pude ver cómo la "sonrisa" de la chica frente a mí desapareció de inmediato.

-Ah....no sabía que tenías novia- dijo la chica, de un momento a otro la niñera se acercó a mí y sorpresivamente tomó de mis manos.-Espero que nos llevemos muy bien, igual de bien como me llevo con Taki- habló dandome otra de esas sonrisas; algo andaba mal, lo que me estaba diciendo ésta chica no cuadraba para nada con su mirada despectiva.-Bien, nos vemos- se despidió.

Nos devolvimos a la casa del pelipurpura y ordenó sus cosas para el viaje, subimos a su motocicleta y nos fuimos a mi casa; era algo temprano por lo cual la tienda aún no se abría, cuando llegamos logramos ver qué habían tres motocicletas más, nos estacionamos al lado de éstas y entramos a la casa.

-Abuela, ya lleg.....que hacen ustedes aquí?- dije al ver a Mikey y Draken tomando desayuno con mi abuela.-Esas son galletas??- pregunté al ver cómo Baji...quien tiene puesto el delantal de mi abuela, sacaba las galletas del horno junto a Chifuyu.

𝑨𝒗𝒆𝒏𝒕𝒖𝒓𝒂𝒔 𝒆𝒏 𝑻𝒐𝒌𝒚𝒐 || 𝑻𝒂𝒌𝒂𝒔𝒉𝒊 𝑴𝒊𝒕𝒔𝒖𝒚𝒂Donde viven las historias. Descúbrelo ahora