Como volver se loca en un mes.

5. Desquiciado

"Tengo que atemorizar la, hacer que se alejen de ese par de capullos, los odio, no deberían haber aparecido. Ahora pagaran las consecuencias de su intromisión. Por culpa de ellos, ella no quiso volver a mis brazos. No entiendo cómo pudo ocurrir esto, ellos deberían haber callado y mirado a otro lado como personas normales, mas sin embargo tuvieron que meterse entre Lea y yo."

Así fue como comenzó, sin saber más allá de lo que mis ojos y mis limitados sentidos podían percibir. Fui a clases, aun que pretendía perderme aquel día, pero al final decidí que no quería levantar sospechas entre mis familiares, ni quería que nadie supiera que ocurría, que nadie más sufriera. Parece tonto pero temía que alguien me dijera; que esto era mi culpa. Mis padres veían con buenos ojos a Karl a mi hermano le gustaba él, incluso le dio su bendición si eso fuera una razón fiable para seguir con una relación. Él se gano a mis amigos, a mi familia y me dejo sola. Siempre parecía estar de lado de ellos y no de él mío, pensé que era una buena señal, que eso solo era una muestra de que me quería y que no siempre íbamos a estar de acuerdo, que discutiríamos por cualquier cosa y luego nos reconciliaríamos. No esperaba un para siempre, yo quería un hasta que nos gastemos el uno al otro.

Las horas del día pasaron sin pena ni gloría con una tranquilidad pasmosa. A penúltima hora cuando volvía de uno de los cambios de clase, me encontré con una carta cerrada. Mi cuerpo comenzó a temblar, no sé cómo pero cualquier cosa que viniera de Karl me ponía realmente nerviosa y fuera de mi.

La carta:

Lea, pequeña.

Me gusto nuestro anterior encuentro fue fantástico, ibas tan guapa.

Quiero volver a tenerte en mis brazos. Solías verte tan pequeña e indefensa en mis brazos. Y sobre todo tan serena, esa mirada tranquila y esos silencios que lo decían todo.

Tienes que perdonarme lo que te hice... fue por tu bien, fue para que te dieras cuenta del dolor que sería que yo no te quisiera.

Ahora vuelve conmigo sabes que me necesitas y yo a ti, más de lo que puedas imaginar, somos dos amantes trágicos, como en tus libros de amor imposible, de amores que se lastiman y luego vuelven juntos, enfermos de amor. ¿Qué más bello que eso?

Te espero a la salida y te aconsejo alejarte de esos dos, no me gustan a tu alrededor.

Con cariño Karl.

Mierda ya estaba llorando de nuevo, esto no es normal. ¿para qué demonios la había leído? Cuando me gire, me encontré con los profundos y fríos ojos de Sora, estaba ahí impasible mirándome mientras se enrollaba un tirabuzón con el dedo índice. Me limpie la cara rápidamente con la manga cuando la vi tirar de la carta que se hallaba en mis manos.

-Sora... no.- Me detuve al ver su fría mirada.

-No pensaras hacer caso a este hijo de puta.- Me dijo en un tono grave y pausado-

-No...- Atine a decir en un suspiro.

Por la puerta se asomaba Clean, se acerco a nosotras como un gato, y se acomodo al lado de su hermana. Yo no sabía qué hacer solo callaba esperando a que ocurriera algo, a que me hablaran necesitaba que ellos me indicaran que hacer.

-No vas a hacer nada, de lo que este tipo te diga.- dice Sora tajantemente.

Mierda se que parece que no tengo personalidad, pero yo misma no pensaba hacerle caso. Además no era momento de llevarle la contraria a mis únicos aliados, el hecho es que yo había perdido la confianza en todo el mundo y no sabía bien como actuar.

-No pensaba hacer nada, no pienso volver con él. ¿Podéis acompañarme a la salida hasta quedarme con mi hermano?- Pregunte intentando ser lo más amable posible.

-Claro Lea no te preocupes.-Respondió Clean por los dos.

Coloco su mano en mi hombro, y no pude evitar quitar su mano. Últimamente no soporto el contacto físico. Trate de sonreír al ver su cara de incomprensión ante mi reacción un poquito desmedida.

-Lo siento. No puedo evitarlo últimamente no soporto el contacto físico.- Trato de justificarme.

-No te preocupes, lo entendemos en tu situación es normal.- Responde Sora, su voz tiene una nota de comprensión en ella.

Llega el profesor un hombre sarcástico, un poco gruñón y con un punto de genialidad y locura que hace la clase en mi opinión más amena. Se me pasa volando y pronto ya estamos recogiendo, para irnos trato de hacerlo rápido pues Karl me ha echado una mirada de complicidad y me ha puesto de los nervios. Me acerco corriendo a Clean y Sora.

-Nos vamos chicos.

-Lea, mi hermana y yo hemos estado pensando en invitarte a nuestra casa, a pasar la tarde como hoy es viernes...-

-Umm... tendría que hablar con mi hermano, pero me encantaría.- Sonrió alegremente.

Salimos a la parada, hasta que nos encontramos a mi hermano.

-Hermanito, no voy a volver contigo, voy a pasar la tarde con ellos.-

-¿Quiénes son no los conozco? ¿Qué paso con tus amigos?- dice extrañado.

-Hay que cambiar de aires hermanito. Solo dile a nuestros padres que estoy, en casa de unos amigos y que llamare a las 4 de la tarde.-Digo con autoridad.

-Está bien. Cuídate si hay algo raro llámame. ¿Tienes el móvil con batería?- Me dice como si fuera mi madre.

-Si mamá, mira.- Le muestro la batería de mi móvil.

-Así me gusta, hijita.- Hace voz de mujer.

-Tonto.- Sonrió y me voy con ellos.

Les sigo y llegamos al estacionamiento, por lo visto tienen coche.

-¿Tenéis coche?- Digo sorprendida.

- Si. Por la mañana conduce Sora y a la vuelta lo hago yo. - Me abren la puerta trasera y subo.

-Ahh que bien.- Subo.

No parece el típico, coche lleno de mierda. La tapicería es de color claro, pero si te fijas en la parte delantera hay lápices de colores y tarros de pintura puestos en los sitios donde se ponen la bebida. Por lo visto Sora va a clases de arte y ha invadido con sus cosas el coche. Clean por su parte apenas tiene cosas. No hablo en todo el trayecto, me pongo a mirar mis redes sociales mientras llegamos a su casa. Aprovecho a bloquear a Karl de mis redes sociales cuando me llama.

-¿Qué coño haces?- Me dice disgustado.

-Lo que me da la gana.- Respondo secamente.

-Te dije que te alejaras de ellos. Ahora escúchame, vas arrepentirte de haberlos elegido a ellos y no a mí.- Me dice en tono amenazante.

-No ahora me vas a escuchar tú. Basta, no me sigas por la noche. NO SE TE VUELVA A OCURRIR VOLVER A AMENAZARME DE NUEVO. Me entendiste, si me vuelves a acosar o a perseguir te pienso denunciar y no pienso dudar en hacerlo. Lo que estás haciendo es ilegal y no pienso aguantarte más gilipolleces, desaparece de mi PUTA VIDA.- Colgué muy airada y luego bloquee su número. De pronto escuche unos aplausos y comencé a reírme.

- Gracias.- Dije sonriendo.

- Así se dice. Eso hay que celebrarlo.- Dijeron los dos a la vez, era armónico y todo, por lo que me entro la risa.

-De que te ríes.- pregunto Clean. Entre risas.

-Habéis sonado armónicos. Es como vosotros os complementarais el uno al otro y me parece gracioso.-Digo aun riéndome.

-Nos lo dicen mucho, hay teorías muy rara sobre mellizos y gemelos. – Dice Sora.

Me doy cuenta que ella es la más curiosa de los dos y le hago más preguntas sobre el tema. El viaje en el coche se pasa entre risas y datos curiosos como, casos en los que los gemelos, se reparten la personalidad, o casos donde gemelos acaban comportándose de la misma manera y les gusta la misma comida. Pero Sora y Clean son mellizos, por lo visto son un caso raro que se da cuando una mujer ovula dos óvulos, que son exactamente iguales y la diferencia la dio el padre que les diferencio el sexo. Los médicos se sorprendieron al darse cuenta que sus huellas dactilares eran iguales, lo mismo pasaba con su sangre. La única diferencia es que él era un chico y ella un chico. Los encontré fascinantes, y me apetecía saber más sobre ellos.