« Borra el dolor que me dio cuando te separaste de mi »
💮Se hace mención a personajes del manga.💮
•Esta ambientado en la serie y el manga, pero también están modificados los eventos y hay personajes creados por mi, así que vendría siendo una espe...
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Gen estaba caminando sin rumbo alguno, o tal vez sí, pero no sabía a dónde exactamente. Necesitaba ser él mismo; lo había dicho anteriormente.
Se cansó de esperar a que alguien se interesara o preguntara algo sobre él. Es decir, no se necesita ser alguien tan importante como para que las personas tengan la dicha de preguntarte sobre tu pasado o de dónde vienes ¿o sí?
Entonces ¿por qué?. Que al menos su amado Senku se hubiera interesado siquiera, eso le hubiera bastado. Siempre estaba a su lado trabajando junto a él o al menos eso aspiraba cada mañana cuando despertaba. Porque él mismo sabía más del pasado de Senku que él el de Gen.
¿Es que todos los demás solamente lo querían por sus habilidades de persuasión?, le dolía. Le dolía que no lo conocieran en verdad y tampoco les importaba hacerlo.
Que estupidez, ¿Asagiri Gen triste? ¿Y por esa pequeñez?; estaba totalmente seguro que eso pensaría la mayoría, sino es que todos.
Se sentó y se acomodó en un tronco caído. Sabía bien que ya había caminado un largo rato y que Senku no era el tipo de persona que iría detrás de alguien; además de que el resto del equipo no sabía aún de su marcha, mas que Ukyo Saionji.
Procedió a cerrar los ojos y dejar de pensar en todo, un rato. Estaba agotado mentalmente. Se sentía exhausto, aunque físicamente no se veía malgastado, pero su cabeza dolía mientras daba vueltas en un mismo pensamiento una y otra vez.
Logró quedarse dormido.
Abrió los ojos. El sol aún no había bajado. Cerca de allí había un pequeño río de agua dulce. Se preguntaba cómo no lo había visto antes.
Se desvistió, no sin antes fijarse en sus al rededores, comprobó que fuese lo suficientemente profundo, pero no tanto, y se zambulló.
Luego de restregarse todo el cuerpo, y asegurarse de haber quedado limpio, salió de allí, esperando a que, mientras la brisa lograba ayudarlo a secarse, nadie se aproximara.
Una vez ya seco procedió a ponerse sus ropas.
—Gen.—se escuchó por lo bajo.
—Acabo de darme un baño—sonrió de medio lado, mientras se ponía lo que sería un supuesto kimono, que iba por encima de todo—. Por otro lado, sabía que me alcanzarías, Kohaku-Chan. La única capaz de hacerlo.
—Hubiese sido dificil, y quizás hubiera tardado unas horas más, sino fuera porque una vez mencionaste que si querías pasar tiempo a solas contigo mismo, este sería el lugar perfecto—Gen sonrió ante la memoria de la chica—. ¿Por qué te fuiste sin avisarnos?
—Avisé a Senku—respondió únicamente—. Imagino que tu respuesta genuina será que él no lo tomó con la suficiente importancia como para comunicárselos y solo repitió varias veces lo que le dije, en su cabeza.
—Lo conoces bien—Kohaku no esperó una respuesta inmediata—. ¿Podrías decirme?, sabes que puedes confiar en mi.
—Me llevaría algo de tiempo si quisiera contártelo con detalles.
—Sé muy bien que no soy una de ustedes, en cuanto a épocas, y que cada uno vivió una vida distinta antes de conocernos, Gen. Lo sé. Pero al menos... Si intentarás... Explicarme.
—Si lo hago puede que no me comprendas, incluso menos que ahora.
—Tú pensaste que Senku te comprendería, y no lo hizo. ¿Que te evita pensar que quizás tú tengas la idea de que no te comprenderé pero sí lo haga?
—Senku-Chan sí lo hizo, sólo que no es bueno con las respuestas.
—Regresa, Gen.
—¿Cual es el motivo a seguir? ¿Mi motivo de regresar?, si no soy más que un "extra" en este mundo de piedra. Antes... en el siglo XXI... pasé por todo lo que tenía que sentir y experimentar, y de aquí en adelante solamente serán pequeñas percepciones de lo que ya sentí.
—No se que significa propiamente "extra" si no es a cómo algo que sobra.
—Es exactamente a eso a lo que me refiero~
—Yo sí te siento real, Gen. Eres uno de nosotros.—la rubia se acercó a él y extendió sus brazos.
Él entendió y procedió a dar el abrazo; pronunciándo su nombre antes de que éste termine.
—Kohaku-Chan ~
—¿Sí?
—¿Puedo pedirte un favor?
—¡Claro!, dime.
—Te pediré como favor, que no le digas nada a Senku cuando regreses—Ella estuvo apunto de interrumpirlo, sin embargo él siguió hablando—. Sólo finge que nunca me viste, que no estoy aquí, y que tú al igual que él, no sabes de mi paradero.
