Sin City - Jenlisa (G!P)

Heart hurts (36)

Lisa's POV:

Sabía que este asunto llegaría a esto. 

Lo sentí.

No importa cuánto lo intente, nunca estaría con ella. Sabía que cuando todo estuviera dicho y hecho, Jennie elegiría a su marido, pero no podía dejar de pelear. De todos modos, no tenía nada más que perder a ella.

"No me hables como una terapeuta. He ido a un terapeuta y esa mierda no funciona para mí. Es mejor simplemente follar el dolor. Necesito que tú folles mi dolor." Le rogué.

"No vamos a solucionar nada teniendo sexo."

"Te equivocas."

Le dije. "Voy a hacerte sentir tan bien y me vas a hacer promesas. Vas a gritar mi nombre. Te haré darte cuenta de que me necesitas más que al aire. Necesito esto de ti. Necesito estar dentro de ti. Sálvame, por favor."

El sexo es mi vida. El sexo me corrompió a una edad temprana y ha seguido corrompiéndome. El sexo era mi adicción. He hecho trampa y manipulado para conseguirlo. Pero ha sido mi amigo desde que tengo memoria. Ha sido mi curita para todas las heridas que había sido demasiado cobarde para reparar.

Nada había aliviado mi dolor más que un orgasmo, hasta que llegó Jennie. No era simplemente porque ella era la mejor follada de mi vida, sino porque tenía que luchar por ella. Desde el principio hasta el final lucharía por ella. Seguiré luchando porque la amaba. Era irónico que el sexo nos uniera, pero ahora el sexo se había convertido en lo más importante que la mantenía alejada de mí.

"No quiero lastimarte más, Lisa, pero no veo cómo podemos hacer que esto funcione."

Ella sollozo luchando por contener las lágrimas.

"Podríamos intentarlo. Quédate conmigo. Iré a terapia. Hablaremos más y tendremos menos sexo. Podemos casarnos y tener bebés. Podemos irnos de vacaciones largas. Venderé mis clubs. Lo que quieras lo haré."

Profesé cerrando mis brazos aún más fuerte alrededor de ella. Decirle que tendríamos menos sexo podría haber sido una exageración, pero estaba dispuesta a decir cualquier cosa para llevarla a casa conmigo.

"Lisa, eso suena increíble pero ..."

"... pero no me amas." La interrumpí. 

"Lisa, yo a-amo a K-Kai."

Ella tartamudeó. Por supuesto que lo hace. Sigue siendo su marido.

Odio cuando dijo que amaba a ese tipo. Cada vez que lo hacía, sentía que la pequeña posibilidad que tenía de estar con ella se desvanecía.

"¿Pero me quieres?" Pregunté reconociendo la pizca de esperanza que me quedaba.

"Sí."

"Entonces ven conmigo."

"No quiero hacerte daño ni a ti ni a él nunca más. Lo siento, pero yo ... lo amo. Él es el amor de mi vida y mi esposo. Tengo que intentar reparar el daño que he causado."

Ella me besó suavemente en los labios. 

"Lo siento. Lo siento. Lo siento mucho." 

Repitió una y otra vez hasta que sus palabras se estrellaron juntas en una conclusión horrible:

La perdí.

Sentí sus lágrimas contra mi mejilla. Mi pecho palpitaba reprimiendo una emoción que por mi vida no podía expresarle.

Maldita sea.

La perdí.

Sentí que el mundo se derrumbaba a mi alrededor y durante mucho tiempo no pude respirar.

.....