Prohibido [Shōta Aizawa × Lectora]

22

Kirishima y yo salimos a patrullar como lo habíamos estado haciendo los últimos días, los viernes Fatgum nos acompañaba, pero ese viernes dijo que tenía cosas que hacer en la agencia. Ya llevábamos horas caminando y no aparecía ningún villano, lo cual era bueno, aunque me aburría. En las casi 3 semanas que tenía patrullando al lado de Kirishima únicamente nos habíamos topado con tres ladrones, un asaltante y dos chicos peleándose en medio de la calle.

—Tengo sed, tomemos un descanso —sugerí.

Kirishima accedió y entramos a una tienda donde compramos agua, luego nos sentamos bajo un árbol. Empezaba a oscurecer y el cielo tenía tonos rosas y naranjas.

—Está siendo un día tranquilo —mencionó Kirishima.

—Sí... estoy aburrida.

—Yo también.

—Kirishima... —hablé dudosa.

—¿Sí?

—¿Tú crees que... me hizo falta un padre? —dije finalmente. Aunque intentaba ignorarlo, esa pregunta no salía de mi mente, necesitaba desahogarme y escuchar la opinión de alguien cercano.

—¿Por qué preguntas eso? —me miró confundido.

—Alguien me dijo que no busco una pareja, sino un sustituto para mi padre...

—¿Quién mierda te dijo eso? —tenía el ceño fruncido.

—Solamente dime qué opinas.

—¿Algo así como "daddy issues"?

—Ehh... sí, supongo.

—Tengo entendido que eso pasa cuando alguien tiene una mala relación con su padre o sufrió abandono por parte de su padre —me miró a los ojos. —Tú no tenías una mala relación con tu papá y tampoco te abandonó.

—Pero se fue cuando yo todavía era muy pequeña.

—No se fue, él está aquí —puso su mano en mi pecho, cerca de mi corazón. —O quizá allá arriba, cuidándote siempre —dijo viendo el cielo.

—No es lo mismo.

—¿Entonces estás convencida de que tienes algún trauma?

—No lo sé, ya no estoy segura de nada. Nunca había pensando en esto hasta que esa persona me lo dijo.

—No tienes nada, esa persona sólo te metió ideas en la cabeza —apretó mi mejilla y me sonrió.

—Eso espero... —suspiré. Hablar con Kirishima de ese tema me había hecho sentir mejor, quizá él tenía razón.

—¿Pero quién te dijo algo tan horrible? Voy a acabar con esa persona en cuanto descubra quién es —lanzaba golpes al aire.

—No importa —le sonreí.

—¿Y por qué te lo dijo? No tienes pareja desde que terminaste con Shinsō.

—No lo sé —dije desviando la mirada.

—¿O estás buscando pareja? —se tocó la barbilla con la mano.

—No. Mejor háblame de la fiesta —intenté cambiar el tema de conversación, no quería segui hablando de mi posible necesidad de una figura paterna.

—Oh, claro. Ya todo está listo para mañana.

La fiesta en casa de Denki que estaba siendo planeada desde hace un mes por fin sería al día siguiente. No me sentía con muchos ánimos para ir, pero esperaba distraerme.