🌸05. Lo complejo de amar🌸

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Se dice mucho que el primer amor en la adolescencia es el más complejo de entender y de olvidar

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Se dice mucho que el primer amor en la adolescencia es el más complejo de entender y de olvidar.

Fue en primero de secundaria cuando lo conoció. NaYeon había llegado a la mitad del año escolar, por esa razón los alumnos debían volver a presentarse. La dinámica que impuso la profesora era sencilla: Ponerte de pie, decir tu nombre completo y dos cosas que te gustaran hacer. Siguiendo esa dinámica se presentaron uno a uno los alumnos, hasta que le llegó el turno a un Alfa de cabello azabache de la primera fila, quien a lo largo de toda la clase mostró una cara de «No me interesa tu vida». Él no se paró de su pupitre y solo dio a conocer su apellido.

Su voz sonó como la de un Alfa adulto, tan grave y áspera hizo que la joven volteara en su dirección, encontrando esos intensos ojos azul profundo, los cuales no se fijaron en los suyos.

Porque sí, el primer amor de Im NaYeon había sido Min YoonGi.

—¡Oh! —La Omega ingresó de frente al salón, creyendo que sería la primera en llegar debido a lo temprano que era aún; sin embargo se vio sorprendida al hallar allí a Min YoonGi, rodeado de libros, estudiando. —Muy buenos días, YoonGi.

—Buenos días, Ji- ¡NaYeon! —Cuando YoonGi giró su cabeza hacia ella, tirando su cabello hacia atrás, NaYeon pudo notar sus grandes ojeras, ocultas detrás de sus lentes de lectura. —Carajo... —Lo oyó susurrar, frustrado.

«Admítelo, lo extrañas. Yo lo hago».

Park y su bonito trasero no habían venido a molestar su pacífica vida durante una semana. Es decir, ¿qué bueno no? Pues no, su Alfa no paraba de maullar exigiendo que lo fuera a buscar y lo llenara de tiernas caricias. Por ese motivo no había podido pegar el ojo en toda la noche y menos concentrarse en sus estudios.

NaYeon rió bajito.

—Hey, no me cambies el nombre, que el mío es muy lindo. —Hizo una expresión tierna, cruzando los brazos. —¿Me dirás quién es la afortunada? —Se tensó. Temía de su respuesta, no quería escuchar de la boca de Min decir que ya amaba a alguien.

Ella tuvo un buen motivo por el cual jamás le confesó sus sentimientos; por el trabajo de su madre se irían muy pronto del país y perderían conexión. Recuerda bien el último día de clases, aquel triste día se animó a darle un abrazo al Alfa, quien incómodo correspondió. Su pretención era empaparse de su olor, pero YoonGi se negó rotundamente a esparcir su aroma. Él nunca lo hizo, ni para ella ni para nadie, así que su aroma es un misterio por resolver.

Hace unos días cuando regresó a Birnea y a su antiguo colegio «Real institución educativa de cambiaformas», un rumor casi hace añicos su corazón.

«YoonGi tiene pareja».

«Park JiMin es el novio del Alfa de gato siamés».

«Se besaron en la biblioteca».

La gente murmura esas cosas por los pasillos.

Ella terminó siendo la vicepresidenta de su salón, porque posee un repertorio de altas calificaciones, y aceptó aquel cargo porque sabía que Min era el presidente del salón al que ella pertenecía. Entre charlas con otros estudiantes descubrió que ese tal Park JiMin era una cría de hámster y un estudiante de notas admirables, pero no dejaba de ser una cría, era imposible que estuviera saliendo con YoonGi; así que solo lo dejó pasar y se dedicó a cerrar la boca de las personas que seguían difundiendo esos rumores.

—No hay nadie —alcanzó a decir antes de que JungKook se sumara en la conversación sin haber sido invitado.

—El afortunado dirás, NaYeon —corrigió el recién llegado Alfa de conejo, poniendo sus pertenencias en la misma mesa que la Omega, algo que no le agradó en lo absoluto a la joven y no lo pudo ocultar. —Pero si fuera YoonGi quien se sentara contigo, no pudieras esa fea cara. Ese asiento estaba libre y yo lo tomé, si quieres puedes cambiarte de lugar.

—No sé de qué hablas, Jeon. —Le contestó molesta. NaYeon retiró su mochila de esa mesa y se sentó a un lado de Min, el cual dándole nula importancia a lo que decía ella y su amigo, continuaba concentrado en sus libros. —YoonGi, me voy a sentar contigo por esta clase. Espero no incomodarte.

—Mh. —Lo consintió.

—Por Dios, que obvia eres y lo peor es que te enojas por decir una realidad.

—Y tu realidad es que una cría de hámster te noqueó de un puñetazo.

YoonGi al oír eso rió disimuladamente, prestando esta vez un poco de su atención a lo que decían.

—¿Te dolió? Sóbate. —La Omega de tigre de bengala había llegado hace unos minutos, sin embargo quiso quedarse callada hasta esperar el momento perfecto para fastidiar al Alfa de conejo. —¿Qué pasó sucio conejo? ¿Hirieron tu orgullo?

—¿Por qué no mejor llamas a tu hermano para que me ayude?

—¡Jeon! —soltó un gruñido y sus dientes se transformaron en colmillos.

Si el conejo deseaba regresar completo a su casa, era mejor que guardara silencio. La enemistad entre JungKook y JiHyo nació en tercero de secundaria. La Omega no se cansaba de arruinar sus supuestas relaciones poliamorosas. ¿Por qué lo hacía? Bueno, según los rumores que circulan en el colegio, JungKook no era sincero con sus parejas no les advertía que estaban en una relación abierta y hasta el día de hoy JiHyo lo odia por eso, o quizás también porque “engañó” a su amiga.

Para su mala suerte, este año Jeon descubrió su punto débil, su dulce hermanito; Kim TaeHyung, quien recién se había matriculado en este colegio.

—Cuñadita, me gustaría invitar a salir a tu herma-

Y JiHyo se le fue encima, repartiendo una buena cantidad de golpes en el cuerpo de Jeon, quien se defendía de igual manera.

—¡Déjalo, JiHyo! Es un idiota. —NaYeon trató torpemente de meterse en la pelea para separarlos; acción que JiHyo desaprobó y por consiguiente la empujó con brusquedad hacia atrás, buscando no lastimarla. Pero la Omega de gato persa no fue capaz de soportar su propio peso e iba a caer de espalda al suelo, si no fuera por YoonGi, que reaccionó rápido y la sostuvo de los hombros. —G-gracias...

—No te metas NaYeon, ahora ellos no te escucharán. —Le aconsejó, ayudándola a sentarse en un pupitre cercano. —¿YoonGi? —El Alfa estaba mirando una parte específica del salón; NaYeon pudo notar como en cuestión de segundos sus ojos se tornaron azul eléctrico, contemplando en su rostro tranquilidad y muchas ansías.

Min percibió un sutil aroma a leche materna, seguido de oír suaves pasos que se acercaban cada vez más.

¿Acaso estaba nervioso? La bulla que producían JungKook y JiHyo no lo dejaban pensar con claridad y su Alfa, harto de que su parte humana no saliera en busca de JiMin, tomó prestado el control de la situación por un breve tiempo.

¡Deténganse de inmediato, es una jodida orden!





-Aram.

Perdón por la demora.
Ha sido una semana agotadora para mí.

Espero que les haya gustado el capítulo no olviden votar y comentar.

JungKook es digno de ser un cambiaforma de conejo.

Las actualizaciones serán los domingos. (Así que mañana sale capítulo nuevo)

Gracias por esperar❤️

¡Usted será mi Alfa! (Y.M)➶[Omegaverse] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora