-Dime... ¿Por qué estás ahí tan triste y solo?- Me preguntaste con una pequeña sonrisa, mientras jugueteabas con tus dedos. Con la apariencia de un niño pequeño, un niño pequeño del cual no sabía nada. Pero apareciste como si fueras todo.
-¿Qué crees? Todos me dicen lo mismo, "estás loco". Y los locos tienen que estar solos.- Respondí a tu pregunta y soltaste un pequeño suspiro que retumbó en la casi vacía habitación.
-¿Estás loco?- Volviste a preguntar, pero esta vez no dejaste que respondiera. -Si tú lo estás yo también. Y si somos dos locos, podemos estar juntos ¿no?- Reíste y a pesar del piso frío no dudaste ni un segundo en sentarte junto a mí.
-¡Yo soy Kirishima Eijiro! pero puedes decirme Kiri o Ei y ¿tú eres?-
-Yo... Simplemente soy un loco.- Frunciste un poco tu ceño y tu mirada se dirigió a contemplar mi cuerpo, como si estuvieras analizándolo. Después de unos segundos pareció que terminaste porque tu mirada brillosa se dirigió a mis ojos y volviste a sonreír. ¿A caso no te cansarías de sonreír? En tan sólo unos minutos ya te había visto sonreír 3 veces.
-Si no quieres decirme tu nombre, te diré ¡Blasty! es lindo ¿no?-
-¿Blasty...?-
-¡Sí! es como explosión, solo que así suena mucho más bonito.-
-Si, pero... de tantos apodos ¿por qué Blasty?-
-Porque tu cabello parece una explosión y tus ojos son como el fuego de aquella explosión.- Bromeaste y tus mejillas se tornaron levemente rojizas.
-Pero si no te gusta... Podría sólo llamarte por usted.- Hiciste ojos de cachorrito perdido tratando de convencerme.
-Dime como quieras.-
-Gracias Blasty.-
-Bakugou.- Lo último lo dije desganado, ¿Cuándo fue la última vez que escuché que me llamarán por mi nombre?, o mejor dicho, ¿Cuándo fue la última vez que alguien gastó su tiempo en hablarme?. Estando sólo nosotros dos en la habitación era imposible que no se escuchase algo.
-¿Entonces te llamas Bakugou?- Sonreíste y oficialmente perdí la cuenta de cuántas veces habías sonreído ya.
-Entonces. ¡Es un gusto conocerte Bakugou!.- Tu voz era como una dulce melodía que sonaba tan alegre y suave tal como el apodo que me pusiste o como mi nombre resonó por toda la habitación.
Y cuando me di cuenta... poco a poco todo a mi alrededor se fue tornando negro, las luces desaparecieron y yo me perdí otra vez. Lo último que pude ver fue tu rostro pero ya no estaba feliz, ya no sonreías, tú ya no estabas.
ESTÁS LEYENDO
You're crazy [Bakushima]
Fanfiction-Dime... ¿Por qué estás ahí tan triste y solo?- Me preguntaste con una pequeña sonrisa, mientras jugueteabas con tus dedos. Con la apariencia de un niño pequeño, un niño pequeño del cual no sabía nada. Pero apareciste como si fueras todo. -¿Qué c...