Desbloqueé mi teléfono, una notificación de un número desconocido. Entré al chat, no tenía foto de perfil.
Desconocido: Hola.
Kia: ¿Quién eres?
Desconocido: Tenya Iida.
Kia: Ah, ¿quién te pasó mi número?
Tenya: Estás en el grupo de clase.
Kia: Oh, es verdad jsjs.
Tenya: Solo quería archivar los contactos, buenas noches.
Kia: Buenas noches.
Vaya, verdaderamente me esperaba que fuese otra persona, aún que tal vez... Entré en el grupo de clase y busqué entre los miembros a Todoroki. Entré a su chat, tampoco tenía foto de perfil ni descripción. ¿Le mandaba un mensaje? No, sería muy raro, pero necesitaba hacerlo, era mi única opción de conocerlo más. Me decidí a enviarle un mensaje, pero ahora... ¿qué le digo?
Hola, ¿qué tal?... No, demasiado aburrido.
Holaa, ¿cómo estás?... No, demasiado desesperada.
Hello... No, parezco tonta.
Me pasé varios minutos decidiendo que mensaje mandarle, venga ya, era solo saludarle, luego sacaría tema de conversación, así que me decidí por un simple "Hola". Apagué mi móvil y lo dejé en la cama, me levanté y me dispuse a jugar un poco Genshin. Sonó mi teléfono, me levanté lo más rápido que pude de la silla. Era el grupo de clase. Denki no paraba de mandar mensajes, pero nadie le respondía. Sin más, volví a a apagar el móvil y volví al juego. Pasó una hora o dos, no me llegaba nada, hasta que estuve en un punto en el que no me podía concentrar en el juego, estaba demasiado nerviosa. Dibujé para ver si así me calmaba, pero nada. Eran las dos de la mañana, era muy poco probable que me respondiese, por lo cual me fui a la cama.
Una luz blanca me despertó, era mi teléfono, seguramente sería alguien mandando a callar a Denki, pero al coger mi móvil y desbloquearlo me di cuenta de que era Todoroki.
Todoroki: Hola Kiana.
Kia: Hola, ¿cómo sabes quién soy?
Todoroki: Por tu foto de perfil.
Kia: Cierto...
Todoroki: ¿Qué necesitabas?
Kia: Simplemente archivar tu chat.
Todoroki: Ok, pues ya me tienes.
Kia: Si.
Todoroki: Que descanses Kiana.
Kia: Igualmente.
La conversación se había acabado muy temprano. Apagué mi teléfono. Me acomodé la almohada y me tumbé encima, cerré los ojos mientras recordaba el día en el que conocí a Bakugo. Recuerdo que había quedado con Lucía y que estábamos jugando en el parque cuando el y Kirishima llegaron. También me acuerdo cuando jugaron al pilla pilla en parejas y le tocó con el, le gustaba dese pequeña, aun que en realidad lo había estado ocultando con una gran amistad. Y finalmente me dormí pensando en esos momentos y mientras que escuchaba la lluvia que cesaba.
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--Lucía--
Cuando me despedí de Izuku me fui a mi habitación, tenía mucho sueño. Lo pasamos genial todos jugando a los juegos de mesa. Me empezaron a llegar notificaciones de Whattsapp. Me decidía entrar en la aplicación me di cuenta de que habían creado un grupo de clase. Denki no paraba de enviar mensajes y stickers. Abrí la puerta de mi cuarto y encendí la luz. Dejé el móvil en el escritorio y me puse el pijama. Me senté en la silla y encendí el ordenador. Fui a YouTube y me puse una playlist de música clásica y en otra pestaña elegí un libro interesante y empecé a leer. ¿Otra notificación? juraba que Denki ya se había cansado de escribir. Pero cuando leí el nombre de la persona que me mandaba el mensaje desbloqueé mi teléfono rápidamente.
Izuku: Hola.
Lu: Hola Izuku.
Izuku: Puedes llamarme Deku si prefieres.
Lu: Oh, ok :)
Deku: ¿Quieres quedar algún día?
Lu: Claro, bueno ahora buenas noches que me estoy quedando dormida.
Deku: Ok, buenas noches.
Lucía apagó su teléfono y se tumbó en la cama, estaba muerta de sueño, hoy había sido un día agotador, además el sonido de la lluvia era muy relajante, me encanta las tormentas.
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--Bakugo--
Llevo en la cama una hora y media y no puedo dormir. Los malditos truenos me impiden cerrar los ojos, no me dan miedo pero me impiden dormir. Además de todo estaba pensando en como estaría mi extra favorita. Silencié el grupo de clase, Denki me tiene harto, pero igual no paraba así que le escribí.
"Denki, acuéstate ya y deja vivir." ¿De dónde sacaba esas pegatinas tan raras? Un día Kiana me explicó que se llamaban "Stokers" algo así.
Pasaba el rato y seguía sin poder dormir, seguía pensando en ella, nunca me iba a declarar, pero me estaba comiendo la cabeza. Y así pensando y pensando me quedé dormido.
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--Kirishima--
No es muy varonil de mi parte decir esto pero... me dan miedo las tormentas. Bakugo posiblemente se haya dormido ya, así que no me queda otra que ir con las chicas. Me levanté de mi cama y fui hacia el pasillo contrario. Llegué hasta la puerta de mi hermana, toqué a la puerta pero no me abrió. Estaría dormida que no me extraña, así que fui a la habitación de Lucía. Toqué a la puerta. Se escuchaba una melodía de dentro de su habitación, abrí la puerta pensando que estaría despierta.
--¿Kirishima?-- preguntó la chica levantándose de la cama.
--Um, vine a darte un abrazo.-- respondió el.
--Ok.-- Lucía se levantó de la cama si saber muy bien lo que pasaba. Kirishima le dio un abrazo y se sentó en la silla.
--¿Qué pasa?-- preguntó la rubia sonrojada por el abrazo.
--Es que...
--Suéltalo Kiri.
--No es muy varonil, pero me dan miedo las tormentas...
--Oh.
--¿Puedo dormir aquí?-- preguntó haciendo una media sonrisa.
--Verás... es que solo hay una cama y sería raro...-- Lucía estaba extrañada, ¿le estaba pidiendo dormir en su cuarto?
--No molesto.-- afirmó Kirishima.
--Em...está bien...¿cabremos?
--No lo sé.
Kirishima se tumbó al lado de la pared y Lucía hacia el otro lado. La cama era muy justa, pero la chica no podía dejar al chico dormir en la alfombra. Cuando pasó un rato Kirishima ya se había dormido, pero Lucía se tumbó en la alfombra, no era igual que la cama, pero era cómoda. Además así podrían dormir mejor los dos. La lluvia no paraba y los truenos seguían tronando. Pero por suerte Kirishima no se había despertado.
