Capítulo 6

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—Humano, tienes 5 horas.

—Me voy a aburrir.

—Trajiste juguetes. Úsalos.

—Ugh.

Lucas hoy a estado un poco más hablador y alegre con Lillianne. Posiblemente sea debido a que por fin verá la luz del día. Técnicamente ha estado bajo tierra unos dos meses, o puede que más.

—Juega conmigo, Lili.

—No, y no me llames Lili.

Los minutos pasaron y así las horas. No pasó mucho para que Lucas terminara acostado en el suelo.

—¡Me aburro!

—Falta una hora. Aguanta.

Exactamente una hora después regresaron a la mansión. Ya era de noche.

—¡Abi! ¡Lili no quiso jugar conmigo!

—¿"Lili"?

—Ya le dije al humano que no me llamara así.

Abigail se empieza a reír. Lucas se va corriendo a la cocina.

—Siento que Lucas ya no es tan callado contigo. ¿Pasó algo?

—Nada de nada.

—Mmm... tengo la teoría de que actúa así cuando conoce a alguien nuevo. Luego de que despertara de su coma, también actuó así conmigo por... ¿unos dos días?

—Lo qué sea. Por cierto, Abigail, de casualidad...

«Esta presencia otra vez.»

—¿Gallian regresó?

—Increible. Acertaste Lillianne. El señor Soleil se encuentra en la cocina.

«Ah... Se encontró con el humano.»

Unos pasos se escuchan por el pasillo y la figura de un hombre les llama la atención. Su cabello era de un hermoso color negro azabache y sus ojos eran grises. Además, tenía sombras negras bajo sus ojos, a pesar de verse bastante joven.

«Además trajo al humano cargado.»

—Cuanto tiempo sin verte Lillianne. Solo pasaron 100 años desde nuestro último encuentro y la única diferencia que veo en ti es que tu cabello a crecido.

—¿Y tu? Te ves igual a pesar de ser un viejo.

—Que grosera. Ese aspecto tuyo no ha cambiado desde el día en el que te recogí.

Gallian Soleil, un vampiro de 8000 años y el anterior duque Soleil.

Desde el punto de vista de la aristocracia, su relación con Lillianne es algo complicada

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Desde el punto de vista de la aristocracia, su relación con Lillianne es algo complicada. Gallian siempre ha tenido como pasatiempo viajar entre los imperios vampíricos, pero una vez decidió llegar hasta el infierno. Fue allí donde encontró a la niña demonio de 103 años autonombrada Lillianne y decidió llevarla consigo para entrenarla y convertirla en la próxima dueña del ducado Soleil. Luego de esto, el obviamente renunció a su título de duque y continuó con sus viajes entre los imperios vampíricos, sin embargo cada 100 años regresa a la mansión Soleil a ver cómo le va a Lillianne. Para ella, Gallian posiblemente sea lo más cercano a un "padre", ya que el verdadero padre de Lillianne es... algo que solo trae desgracias.

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