Parte 18

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Karamatsu se detuvo frente a la puerta de aquel departamento, tocó tímidamente un par de veces pero al no obtener respuestas se aventuró a utilizar la llave que tenía. Entró lentamente y tras cerrar se quedó de pie un momento mirando su alrededor, le hubiese gustado avisarle a su novio que planeaba ir, pero simplemente habría olvidado que ya no tenía celular, por lo que no tuvo más opción que ir directamente, se encaminó hasta el sofá y tomó asiento en el mismo, decidido a aguardar en aquel lugar cuanto fuese necesario.

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Todomatsu revisaba los cajones de ropa, moviendo todo con sumo cuidado para no dejar evidencia de sus acciones.

- ¿Qué haces?

El de rosa saltó ante la repentina voz, girando de inmediato para ver a Jyushimatsu a su costado.

- ¿De dónde rayos saliste? – cuestionó el menor con una mano en el pecho, odiaba los dotes ninja que tenía su hermano.

- ¿Buscas el prono de Osomatsu nii san? – preguntó el otro con rostro inocente.

- ¡Claro que no! – Gritó al instante – quiero el so... - cubrió su boca de inmediato.

- ¿So?

- Bueno, da igual, busco algo que escondió Karamatsu nii san, ese sobre que encontró hoy es igual a otro que llevaba en la noche.

- ¿Estas revisando sus cosas? Eso no es bueno, Karamatsu nii san va a molestarse – opinó pensativo, con una de sus largas mangas sobre el mentón.

- No lo entiendes, hay algo que está ocurriendo y no quiere decirlo, lo presiento, y ese sobre es la respuesta – aseguró al retomar su tarea.

- ¡Pero no debes revisar su ropa! – Alegó con los brazos levantados – mejor revisa la funda de su guitarra – indicó antes de correr al armario para tomar lo mencionado y correr el cierre.

Todomatsu se apresuró a hincarse a un lado del objeto, tras levantar el instrumento halló lo que buscaba - ¿Cómo sabias que estaba aquí?

- Aquí esconde las paletas – respondió mientras tomaba una pequeña bolsa ubicada en la esquina de la funda la cual contenía los caramelos.

Totty enarcó una ceja sin saber cómo responder ante aquello, dejando el tema de lado procedió a abrir el sobre y revisar el contenido - ¿Qué carajo? – murmuró al pasar las fotos.

- ¡Es Karamatsu nii san! – gritó emocionado el de amarillo cuando vio la página de revista.

- ¿Cuándo hizo esto? ¿Qué es esa amenaza? ¿Lo están chantajeando? – comenzó a preguntar el más joven, colocando las fotos y la portada en el suelo, revisándolos una y otra vez como si con ello obtuviera respuestas.

- ¿Amenazan a Karamatsu nii san? – Jyushimatsu pronunció con lentitud, recordando lo ocurrido con el masajista y considerando decirle a Osomatsu cuanto antes.

- ¿Qué están haciendo?

Los menores miraron hacia el marco, el tercer hermano ingresaba con tranquilidad.

- ¡Choromatsu nii san! Nada, no hacemos nada – respondió mientras intentaba en vano juntar y ocultar las fotografías bajó sus manos, después de todo en sus planes no estaba contarles al resto lo descubierto, siendo que Jyushi solo sería un daño colateral.

- ¿Qué escondes? – Ignorando al más joven se hincó a un lado y forcejeo un poco hasta lograr arrebatarle un par de fotos – Todomatsu, ¿Es posible que sientas algo por tu hermano mayor? – preguntó horrorizado de ver las imágenes del segundo sextillizo en las duchas.

InevitableDonde viven las historias. Descúbrelo ahora