Enfrentamiento Directo:

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-luego de su cumpleaños Kogami tuvo unos días libres, que el joven aprovechó para alejarse un poco de todo, estaba en pleno bosque, en algún lugar recóndito del país del fuego, con los ojos puestos en su ventana de juego, habría subido mucho de nivel, pero no miraba esto, si no que estaba revisando tranquilamente la tienda de puntos de recompensa, estos eran dados como recompensa de misión completada por lo que el joven tenía bastantes, después de todo era un ninja bastante utilizado por la aldea, y llevaba bastante sin comprar nada-

Jikanwotomete -exclamó el joven leyendo- 

Jikanwotomete: habilidad de (Mangekyo Sharingan) detiene el tiempo alrededor del usuario por 5 segundos, aunque con el chakra y dolor suficientes podría alargarse hasta los 10 segundos.

Precio: 50.000 tokens

-Kogami miró su presupuesto de 215.000 tokens y sonrió- Bien -apretó en comprar y sus ojos evolucionaron a su Mangekyo Sharingan Eterno, sus ojos comenzaron a picar, luego a quemar, a arder como si cientos de hormigas los mordieran desde dentro, el ninja cayó arrodillado, gritando de dolor mientras lágrimas caían de sus ojos directamente al suelo-

Mocoso? -habló el bijuu dentro de él intentando descifrar que era el detonante de ese dolor-

-Kogami solo se mantuvo de rodillas, sin decir nada conteniendo sus gritos hasta que el dolor cesó-

-poco a poco se puso en pie dejando salir una sonrisa que extrañó al  felino residente de su cuerpo-

-el joven miró hacia unos pájaros volando- solo mira esto Matatabi -sonrió el joven antes de exclamar- Jikanwotomete -su ojo izquierdo dolió, a pesar de tener un mangekyo eterno sintió dolor por el poder de la técnica, el tiempo se paró y el bijuu quedó boquiabierto ante el espectáculo, el joven contó cinco segundos, una vez pasados todo volvió a la normalidad-

-ambos estaban cerca de celebrar, pero se detuvieron mirando rápidamente al frente-

-justo frente a sus ojos un portal negro se abrió rompiendo el espacio tiempo, de este salió un hombre enmascarado, con su rostro cubierto con una máscara anaranjada, con un único agujero visible, que dejaba ver un mangekyo sharingan en forma de espiral-

Matatabi -pensó el joven-

Si -rugió de forma violenta el felino-

-el cuerpo del joven se cubrió de un manto de chakra azulado, manteniendo una forma humanoide, pero toda su ropa acababa en sus límites con llamas de un azul más claro, como si ardiese por completo- bien -exclamo el shinobi crujiendo sus nudillos con su mangekyo sharingan brillando- que nombre pongo en tu tumba... Madara... Tobi... o Obito...

-la cara bajo la anaranjada máscara se volvió un cuadro, su rostro mostró incredulidad, miedo y incluso enfado, uno muy grande- no sé como... pero no puedo dejarte vivir...

Si... yo tampoco que resucites a Madara... -la cara del enmascarado solo adopto más miedo e ira-

Vamos a ello -exclamaron al tiempo el bijuu y el joven- 1000 tiempos -exclamó el shinobi de la hoja formando un sello de manos, sus ojos comenzaron a ver todo más lento y en un estallido de velocidad absurda apareció frente al enmascarado golpeando su rostro de forma agresiva, el enmascarado salió volando, y el menor volvió a aparecer tras él, pero el golpe le atravesó, al quedar separados el joven desactivó su elemento Swift mirando a los ojos del enmascarado-

Obito... yo puedo matarte... realmente, créeme... pero no soy el destinado... huye... antes de que cambie el destino de mis camaradas... lárgate  -dijo el joven dejando salir su instinto asesino de una vez-

Jikanwotomete -murmuró el menor y caminó hasta estar delante del enmascarado, este al ser desactivada la habilidad, vio al ninja frente a él, y esta vez no solo su cuerpo no habría reaccionado al movimiento del enemigo, si no que su mangekyo no le había podido seguir-

Por esta vez... -murmuró molesto el enmascarado, la realidad se rompió y el enemigo se fue por donde vino-

QUE DEMONIOS HACES, PODRÍAS HABERLE MATADO, IDIOTA, IDIOTA -exclamó el bijuu molesto por lo que esa gente hacia a sus hermanos-

Lo sé Matatabi... lo sé -el menor desactivó su manto de chakra y su Mangekyo- pero quiero que la historia de los chicos siga su curso, ellos son los destinados, y así quizás Sasuke vuelva a la aldea... te prometo que en la guerra vengaremos a tus hermanos -sonrió el joven-

-el Bijuu suspiró molesto, pero entendió los motivos de su Jinchuriki-

gracias -sonrió el menor y se sentó comenzando a ojear de nuevo su ventana de sistema-

hump -se quejó el Bijuu silenciosamente-

--el shinobi sonrió y comenzó a meditar de forma muy tranquila poco a poco hasta entrar en modo sabio del hielo- 

Oye chico -llamó el dos colas mientras el joven entrenaba con su modo sabio- 

Si? -respondió Kogami escuchando a su compañero de cuerpo- 

Ahora que lo pienso, como es que tienes un modo sabio sin tener una invocación propia? -cuestionó la bestia con colas- 

Oh, es que si tengo una invocación -sonrió el joven-

///////////FLASH BACK///////////

-podríamos ver al pequeño Kogami de 15 años, saliendo de la biblioteca con su ropa habitual shinobi y un pergamino en las manos, este llegaría al campo de entrenamiento número uno y se pondría a leer el pergamino poco a poco-

Bien, lo entiendo, ahora tengo dos opciones... firmar un contrato... o probar suerte... -el joven sonrió teniéndolo todo claro antes de incluso haber pensado en alto y se mordió el pulgar realizando sellos de mano- Jutsu de invocación! -en un estallido de humo el joven desapareció del lugar, llegando a una enorme zona helada, con una fuerte ventisca, y viendo una enorme sombra a unas decenas de metros de él, una sombra de unos 40 metros de alto, emitió un rugido que casi lanza al joven por los aires-

//YYYYYYYYYYYYYYYYYYYYY HASTA AQUI, ya saben, si quieren conocer la invocación y el entrenamiento de Kogami den 3 estrellitas y subiré capítulo lo antes posible, los amo, chauuuuuuu <3 <3 <3 <3 <3 <3 <3 <3 <3 <3 <3 <3 <3 <3 <3 

El Demonio Rojo De La HojaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora