Tapping prostate stimulator

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Daniel se había levantado sonriente al ver que traía puesta una camiseta de Johnny y sus bóxer solamente, recordando la noche anterior.

Dejó un beso en la frente de su novio y salió de la habitación en dirección a la cocina para preparar algo de desayunar. Hoy sería uno de esos días donde no harían nada más que ver películas y comer palomitas.

Terminando los hotcakes y el café que había preparado, sintió las gruesas manos de su novio apretar sus caderas.

– buenos días, mi amor – soltó el mayor con una voz grave que logró despertar algo en el pelinegro

– buenos días, bebé – el menor tomó los platos con hotcakes para llevarlos a la mesa mientras el rubio tomaba la cafetera.

Johnny se sentó tomando las caderas del más pequeño para sentarlo en su regazo.

– andas muy cariñoso hoy – habló Daniel rodeando su cuello y acercando su nariz a la del contrario

– tengo ganas de mimarte más de lo normal – soltó el rubio dándole un beso esquimal.

Su desayuno se basó en besos y caricias mientras se alimentaban el uno al otro. Sin duda había sido uno de sus mejores desayunos juntos.

Pasaron al sillón donde Johnny se recostó y Daniel sobre él mientras miraban una película de acción. Johnny veía desde su lugar el abultado trasero de su novio y no dudó en bajar su mano para acariciarlo.

Daniel no se inmutó así que prosiguió a meter su mano dentro del bóxer y apretar una de sus nalgas. El pelinegro se acomodó en el pecho del rubio y el último acercó peligrosamente su dedo al ano del menor.

Comenzó a acariciar su entrada mientras Daniel soltaba pequeños jadeos. Sacó su mano y llevó su dedo a la boca del menor quien chupó de forma caliente el grueso dedo de su novio. Johnny sacó su dedo de la caliente boca de su pequeño y regresó al interior de sus bóxers para comenzar a meter el dedo en su pequeño agujero.

– J-Johnny... – suspiró sintiendo como su mayor lo abría poco a poco.

Unos segundos más tarde metió un segundo dedo y comenzó a ir más rápido. Daniel cerró sus ojos y mordió sus labios para evitar gemir alto.

– mi amor, ¿me ayudas? – preguntó Johnny y el menor asintió girándose y bajando los bóxers del mayor. Lamió lentamente la punta del enorme glande del rubio y se metió el trozo de carne a la boca.

Johnny tenía a la vista el ano de su pequeño así que prosiguió a lamerlo. Penetró su entrada con su lengua y succionó un poco. Sonrió al escuchar el gemido de su chico mientras se tragaba su pene por completo.

Volvió a penetrar con su lengua mientras metía los dos dedos anteriores y continuaba con su trabajo.

Daniel tenía ya todo el miembro de su novio dentro de su boca y masajeaba sus testículos suavemente. El poco vello que rodeaba la longitud de su amado le tocaba la nariz y le causaba cosquillas, pero sentía demasiado bien tener todo el pene de su chico dentro de su boca.

Johnny buscó detrás de las almohadas del sillón la bolsa que había guardado. Según la utilizaría más tarde, pero se habían adelantado un poco a los hechos.

Abrió el juguete y lo introdujo de una en el interior del menor quien gimió aún con el pene en su boca. Johnny también soltó un gemido pues las vibraciones se sintieron deliciosas en su miembro.

Prendió el aparato y Daniel comenzó a mover las caderas pues este daba golpes seguidos a su próstata.

Sacó el miembro del mayor de su boca.

– J-Johnny...ah...aaah... – comenzó a gemir pues el rubio subió un poco la velocidad de este y los golpecitos se hicieron más rápidos – Dios mío...aaagh...aaagh... – de verdad intentó no abrir la boca, pero era imposible

– cómete mi pene, mi amor. La vista que tengo de ti es espectacular. – sonrió el rubio y Daniel volvió a meterse el miembro de su novio a la boca.

Johnny daba pequeños golpes a las mejillas traseras de su chico mientras este seguía moviéndose por los golpecitos en su punto.

El rubio tomó el aparato, lo sacó y volvió a meterlo de golpe en el interior de su pequeño logrando sacarle un gemido que volvió a resonar en su glande.

Subió la potencia del aparato y volvió a sacarlo y meterlo más seguido.

– Johnny-Johnny...aaah sí...mmmmhh...más...MÁS...AAAAH – gimió alto mientras masturbaba el pene del mencionado.

Siguió chupando la punta y volvió a meterlo hasta el fondo sintiendo vibrar el pedazo de carne.

– mmhh...gghh...MMMHHH... – continuó gimiendo al sentir otra estocada por parte del juguete.

Johnny sentía que no podía más pues los sonidos que Daniel hacía provocaban una sensación en la punta de su pene que lo llevaban al cielo. Al sentir como la garganta de Daniel aplastaba su punta, se corrió fuertemente soltando fuertes chorros de semen.

Una última estocada por parte del juguete y Daniel se corrió gimiendo el nombre de su novio.

– JOHN...AHHH – ambos cayeron exhaustos y Daniel se re acomodó mientras tomaba una toallita de la mesa y limpiaba el abdomen de su novio.

Se taparon con la frazada de siguieron viendo más películas toda la mañana...y uno que otro encuentro más.

Toys; LawRusso [Adaptación]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora