1. Encuentro(s)

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Encuentros.

Chifuyu escuchaba a su profesora explicar cosas que le aburrían completamente. Tal vez en un futuro la iba a pasar mal estudiando esos temas que estaban siendo explicados en clase pero ahora mismo lo ignoraba.

Tenía sueño. Ya era la última clase del día y eso solo hacía que sus párpados pesaran más. Se había quedado hasta tarde hablando por teléfono con Takemichi porque el muy idiota había tenido una pesadilla donde Hina moría justo al frente de sus ojos. Bastante raro.

Para animarlo un poco, y poder ir a dormir también, tuvo que proponerle hacer un plan para que su rubio amigo le pidiera una cita a Hina de una vez por todas. Al final quedaron en llevar a cabo el plan hoy por la tarde, pero Chifuyu tenía tanto sueño que estaba apunto de darle a Takemichi una señal con el pulgar arriba, decirle "coraje" e irse a su casa a dormir por un rato. Después de eso tendría que ir a buscar algún que otro trabajo de medio tiempo, pues últimamente necesitaba dinero para sí mismo.

Hizo una mueca mientras jugaba con su lápiz distraído. Si hacía eso, Takemichi no lo perdonaría y estaría más pesado de lo normal. Una sonrisa de diversión se cruzó por su rostro al imaginar a su mejor amigo todo nervioso yendo por su cuenta a pedirle la cita a Hina.

Justo en ese momento sonó el timbre que daba por finalizada la clase y la jornada escolar de ese día.

Salió al pasillo después de recoger sus cosas y paró repentinamente al encontrar a Takemichi justo al frente de su nariz.

-Wow, ¿Corriste apenas que sonó el timbre? No han pasado ni cinco minutos -Se quejó mientras tomaba distancia.

Takemichi lo miraba con el ceño fruncido y ojos llenos de decisión. Inhaló aire y asintió seguro de sí mismo. Chifuyu se dedicó a observarlo mientras terminaba su ritual de «Esta vez no me rendiré»

-Chifuyu -habló, por fin, el rubio-, hoy es el día, no me echaré atrás ni abandonaré sin importar lo que pase.

-Sí, sí, eso está bien -Chifuyu pasó a su lado dándole dos palmadas de ánimo en el hombro. En realidad, no podía evitar sonreír cuando veía a su amigo tan decidido-Primero tenemos que ir a comprar las cosas, luego ya tendrás tu momento de gloria.

Takemichi asintió con fuerza y empezó a caminar siguiendo a Chifuyu, el cual iba bastante relajado, con una de sus manos dentro del bolsillo de su pantalón y otra sosteniendo su mochila. Él por su parte había salido de su aula decidido, pero conforme iba avanzando su estomago comenzaba a revolverse. Estaba nervioso. Aunque él no se daba cuenta, Chifuyu lo había notado desde hace un tiempo, pero no comentaba nada.

El plan que habían acordado era ir a una tienda cerca de la escuela, para comprar algunos bocadillos y alguna que otra flor, y que Takemichi pudiera alagar a Hina con los regalos mientras le pedía la cita. Era bastante sencillo, clásico, pero confiable. Takemichi quería incluir una cartelera con un montón de decoración y letras de colores.

Chifuyu se negó rotundamente. Tampoco quería que su amigo pasara demasiada vergüenza. Además de que seguramente él sería la víctima, al tener que sostener la cartelera. Le daban escalofríos el solo pensar en el escándalo que armarían.

-Creo que voy a vomitar -murmuró Takemichi, mientras se llevaba los brazos a su estómago.

Chifuyu soltó una carcajada- ¿Tan rápido se te fue la decisión? -Se burló, ganándose una mala mirada del más bajo. Pasó un brazo por los hombros del rubio y lo acercó a él, mientras seguían caminando.

-No pasa nada, hombre -dijo, dando ánimos-, ya verás que saldrá bien todo.

Takemichi pareció relajarse y asintió, correspondiendo el medio abrazo de Chifuyu. Ambos siguieron avanzando hasta que lograron distinguir la tienda que buscaban.

Cambios [Tokyo revengers] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora