Capítulo 1.

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Narra Rauw.

—Que bella...—susurré al ver el teléfono de Cassie.—¿De verdad puso esa canción?.

—¿No le respondiste para confesarle que es tu musa?.—se burló Cassie.

Seguí mirando la pantalla.

@lettoficial
Via InstaStories | Hace 2 horas.

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—¿Ella vendrá?.

—Se llama Scarlett,no la vas a romper por decir su nombre.

—Las paredes tienen oídos y después andan fijándose todos en ella.—se cruzó de brazos.—No me mires así.

—¿Eras así cuando te enamoraste de Gia?,que asco.

—¿Asco?.

—No todo lo de enamorarse,sino que me lo cuentes,¿no tienes a mas nadie que joder?.

—Es tu amiga,tengo que hablar contigo,¿o que,le hablo a Lunay por ejemplo?,no tienen nada que ver.

—Ya entendí.

Conocí a Scarlett por sus vídeos cantando en las redes,casi empezamos al mismo tiempo,ella decidió dedicarse a componer y vender sus canciones y fue ahí que le perdí la pista,no creí que me la encontraría un día que me tocó venir para acá para recoger a Myke cuando su carro se dañó a pocos metros del estudio y quedamos esperando en el estudio hasta que pudieron llevarse el carro para el desguace,y después de todo ello,llevarlo yo a su casa.

Cuando Cassie me dijo lo bien que se llevaban vi una pequeña luz al final del túnel,ahora teníamos al menos una cosa en común y no iba a ser tan difícil el acercamiento.

Al menos no debería serlo.

Dream Girl surgió por ella,no voy a echarles mentiras,yo quedé flechado por esa nena.

—¡Hola!.—se escuchó una voz,tanto Cassie como yo nos giramos buscando a la dueña,cuando nuestras miradas conectaron sentí un cosquilleo en mi interior,carraspeé mi garganta antes de hablar para intentar ocultar mi nerviosismo.

—Hola.

—¿Estás reunida,Cass?,puedo volver después.—la recién nombrada me miró.—En serio,pueden terminar y...—se quedó mirándome.—Vuelvo desp...—sonrió.—Oh,Rauw.

—El mismo.—sonreí como un niño.

—Bueno,los dejo que sigan grabando.

—¡No!.—respondió su amiga tomando su mano.—No estamos grabando,terminamos hace rato y nada más estábamos pasando el rato,¿revisaste la propuesta que te hice?.

—Lo hice.

—¿Y te gustó el beat?.

—Sí.

Ojitos.[RAUW ALEJANDRO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora