Con solo una mirada.

Excitado

—Hola Matt ¿Me extrañaste?

—Jin...

—No respondiste a mi pregunta

Matthew quiso ponerse de pie pero los nervios lo traicionaron y casi cae de espaldas si no fuera porque Jin lo agarró de la cintura.

—Ten cuidado niño.

Raynor lo separó sin mucho esfuerzo mientras trataba de recoger sus alimentos y pertenencias.

—¿Sigues enojado conmigo Matthew?

—No sé de que me habla.

—Claro que lo sabes. Estás molesto por verme con Jake esa noche.

—¿A sí que su nombre es Jake? No creo que a su novio o amante le guste que usted esté aquí conmigo, insinuándose.

—Ese tipo no es mi novio

—¿No? ¿Y que es?

—Un "amigo"

—No parecían amigos.

—Aprovechamos la ventaja de la amistad.

—Entonces son amigos con permiso de follarse.

—No siempre es así, por lo regular hablamos de negocios y una que otra vez sobre posturas, velocidad y..

—Ya fue suficiente.

Matthew dio la vuelta dispuesto a marcharse, Jin lo detuvo y lo acorraló por un árbol.

—No te vayas Matthew, sé cuantas ganas tenías por verme.

Jin lo besó con desesperación, Matthew quiso resistirse pero no pudo y en segundos ya estaba correspondiendo al contacto.

¿Por que Jin le hacía esto? Por qué pregunta cuando la respuesta es obvia: Sí, esta molesto por verlo con ese rubio y después por insinuarle si quería hacer algo más que mirar.

—A.lguien podría vernos—dijo Matthew con la voz entrecortada—tendremos problemas si..ahh

Jin le mordió el cuello y después pasó su lengua por el oído.

—Si lo que te preocupa es que nos vean, será mejor que vayamos a otro lado—Jin lo agarró de la mano y se internaron en lo profundo del área verde del campus.

Matthew siguió a Jin sin soltarse de su mano, bien pudo negarse pero estar con ese hombre lo emocionaba y excitaba demasiado.
El castaño fue arrojado al césped y Cheung Woo se posó sobre él.

—En este lugar no hay cámaras así que quita esa cara de preocupación Matthew.

—¿Cómo sabe qué nadie se dará cuenta?

—Yo estudie aquí hace 10 años, conozco los puntos ciegos de la Universidad—Jin comenzó a delinear el torso de Matthew—¿Me dejarías ver tu piel? Claro, solo si tú quieres. No quiero que hagas algo que te resulte incómodo.

—Me gustaría que usted lo hiciera primero

Jin sonrió y no dudó en llevar sus manos para desabrochar su camisa, a los pocos segundos Matthew pudo observar la blancura de su piel, el abdomen marcado y su torso firme con pezones rosados.

—Usted es hermoso—musitó Matthew con admiración—Quiero ver más.

—Con todo gusto.
Un minuto después Matthew miraba unos calzoncillos ceñidos en color negro que no dejaban nada a la imaginación y mostraban un enorme bulto, Jin estaba semi erecto y Raynor suspiró, por donde sea que mirara veía músculos tensos y fuertes, Cheung Woo era un hombre hecho para el sexo.