Danmachi: Nacimiento de un Monarca

Problemas, Problemas y Diosa.

Han pasado 2 días desde que la carta había llegado a manos de las parejas de Bell y desde que ellas han partido en dirección a Orario, Zeus les deseo suerte dijo que aproximadamente en un año cuando Bell cumplirá los 17 su exilio de Orario finalizaría y podría ir.

En estos momentos centremos en las 7 personas que van tranquilamente cabalgando caballos de sombra

- Nino: ¿Porque no pudimos venir en un dragón? Eso sería más fácil y rápido. (Frustrada)

- Neir: Ara Ara será ¿que ya quieres ver a nuestro conejo? (Picara)

- Nino: Cállate!. (Avergonzada)

- Ameri: Recuerda el día en que viajamos en dragón hacia Camelot casi ponemos en estado de alerta a todo el Reino porque pensaron que había un ataque de dragones.

- Nino: Ya lo sé, pero ya quiero llegar.

- Setsu y Yasha: Oka-san ¿pronto veremos a Oto-san?

- Miku: Si, no se preocupen ya construyó una casa donde vivir y dónde ustedes puedan jugar y cuando lleguemos su Oto-san les preparara algo rico para comer.

Al oír eso a todas, la baba no se hizo esperar y más Itsuki que tenía lágrimas en sus ojos al recordar que no había comido la comida del conejo en mucho tiempo.

- Itsuki: ¿Creen que haya cocinado allá en Orario?

- Neir: No lo dudó, aunque espero que al menos alguien le haya dicho algo, nosotras simplemente lloramos y nunca le decimos que está deliciosa su comida. (Decepcionada de ella)

- Ameri: Tengo una duda ¿Se podría ya considerar tabú el no llorar con su comida? Bueno ya saben hasta Zeus estuvo de acuerdo con eso.

- Todas: Muy probablemente...

Y así siguieron su marcha rumbo a Orario, en algún punto aparecieron bandidos pero ellos simplemente desaparecieron apenas enseñaron sus armas, nada relevante para la historia.

[Ubicación: Orario]

Nos ubicamos donde un conejo y un hada estaban haciendo las compras.

- Ryuu: Bell-san que tanto piensas te veo muy distraído estos días después de que la casa estuviera lista.

- Bell: Oh eso, bueno ya sabes la casa es enorme y el terreno y las plantas necesitan cuidado, se que puedo darles el cuidado, pero estoy pensando en como voy a limpiarla.

- Ryuu: Si te preocupa la limpieza ¿Porque la hiciste tan grande?

- Bell: Aquí es donde todo da forma Ryuu-chan, aunque me una a alguna familia grande o empiece con una familia pequeña o nueva, la casa solo podrán entrar las personas que son dignas de mi confianza, no quiero gente dentro que en algún momento rompa la confianza que le eh dado por su codicia o sus deseos egoístas, mi casa será para aquellas personas que estén dispuestas a sacrificar todo reputación, dinero, por gente que no conoce y por gente que necesite ayuda sin importar quién sea o que sea. (Tomo en un tono de sabiduría)

Ryuu cada palabra que escuchaba del conejo más y más lo veía digno de confianza y su corazón.

- Bell: En mi casa pueden entrar las chicas de bar al igual que Mia y tú Ryuu-chan también estás incluida. (Dándole un toques suave en la nariz y una sonrisa) ¿Nos vamos? Tenemos que preparar las cosas para el día de hoy. (Dando su mano)

Ryuu al ver el gesto ni siquiera dudo en tomar la mano del conejo y caminar a su lado, puede que esté manchada por la sangre por su venganza que llevo a cabo en algún tiempo, pero la persona persona que tenía frente a ella la aceptaba tal y como era, sin importar que mato por venganza, sin importar que sea una Elfa indigna de ser llamada Elfa por los pecados que cometió, ahora que lo pensaba tenía una pregunta.