WINTER'S FALL

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[DEMASIADO PERFECTO]

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"¿Te quedarás conmigo hoy?"

Tony seguía en su asiento, piernas cruzadas y manos jugando con el doblez de su camisa. La última película acababa de terminar, los créditos corrían despacio frente a la pantalla, pero él ni siquiera lo notó. Anthony alzó el rostro mirando a Clint, frente a él, esbozando una serena sonrisa mientras sus ojos claros seguían aguardando paciente por una respuesta.

"Eh..." balbuceó Tony.

"No esta noche, hoy se queda conmigo" dijo Bucky, sentado a su par, sonó relajado y la media sonrisa que estiraba sus labios confirmaba su buen humor. Tony tragó duro, mirando de Bucky hacia Clint.

El arquero hizo lo mismo, observó la seguridad en el temple de Bucky y luego al manojo de nervios que era Tony. "¿Estás seguro, Tony?" le preguntó al genio.

"Eh... eso creo..."

Tony se encogió de hombros, tenía que intentarlo, ¿no? Solo que Clint no lucía muy convencido de su escueta respuesta. Entrecerró sus ojos, suspicaz, tratando de buscar las grietas en su mueca de sonrisa. Anthony apartó la mirada apenas sintió los dedos de Bucky buscando su mano. Miró al super soldado a su par, su cabello corto perfecto, un par de mechones cayendo sobre su frente. Ojos azules observándolo con ternura, y una pequeña sonrisa que sirvió para calmar su agitado corazón.

"¿Eso crees? Kotenok, si no estás seguro, puedes irte con Clint. Está bien. Podemos intentarlo otra noche..." murmuró James con su melosa y baja voz haciendo suspirar al débil genio.

"No. Quiero dormir contigo" admitió más seguro.

Bucky apretó sus labios, parecía dudar. "¿Estás seguro?" le preguntó cauteloso.

"Por supuesto está seguro, Barnes. No lo hagas dudar" se quejó Loki, pasando frente a ellos sin detenerse. Tomó la mano de Clint y lo arrastró con él, bajo los reclamos de su consentido halcón.

Ambos observaron al alto dios asgardiano llevarse a un quejumbroso Clint fuera de la habitación. James rio y Tony se le unió un par de segundos después. Giró su rostro hacia el super soldado castaño, justo a tiempo para que este se inclinase y dejase sobre sus labios un suave beso que le supo a calma.

"¿Nos vamos por igual?"

"Sí."

Un par de minutos después, Tony observaba el paisaje de Nueva York en plena noche. La suave lluvia caía sobre la ciudad, las pesadas nubes se iluminaron con cada relámpago que escuchó segundos después. Se mantuvo en pie frente a la pared de cristal, perdido en sus pensamientos. ¿Podría dormir junto a James?

En su cabeza, aún había recuerdos algo borrosos de Bucky haciéndole daño. Tony sabía que eran mentiras, fue parte de una pesadilla, una mala alucinación por las drogas que Rumlow le suministró, por las palabras que el hombre grabó a fuego en su cabeza.

"Tony..."

El genio parpadeó veloz y se volvió para encontrar a James al otro lado de la habitación, saliendo del baño. Ya no usaba su camisa, pero sus pantalones seguían colgando de sus caderas, abiertos, mostrando la cinturilla elástica de sus bóxeres. Tony lo recorrió con una curiosa mirada al tiempo que James se acercaba hasta él.

"¿Qué haces allí solito?" sonrió James juguetonamente, tomó su mano halándolo a su calor. Tony lo abrazó, descansando su frente sobre el tibio pecho desnudo del hombre.

"Nada. Pensaba" admitió bajito.

"¿Algo importante que necesite ser dicho?"

Tony lo meditó un segundo, pero negó con su cabeza. Bucky tomó aire, lo apretujó con suavidad besando su frente.