Capítulo 10: Ataque

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Al llegar al palacio, Ohm tuvo un extraño presentimiento, la luz de la habitación de Fluke no estaba encendida, ni tampoco la del comedor, por lo que llama a su séquito a lo que inmediatamente asistieron en su auxilio.

-¿Ha habido algun movimiento?

-Hemos descubierto que los empleados parecen estar dormidos... el guardaespaldas del príncipe también- viendo a Boun- No se preocupe señor... está bien.

-¿Dónde está mi esposo?-tomando un arma que estaba escondida en el estudio.

-No encontramos al príncipe.

-¡¿Qué?!-de inmediato, sube las escaleras sintiendo como el aire se le iba de los pulmones, si su Noo estaba herido o algo más, no se lo iba a perdonar nunca. 



Llegando a su habitación la descubre toda revuelta, a lo lejos veía la figura de alguien en el suelo, por lo que sintió su corazón detenerse.

-¡Fluke!-viendo el cuerpo de un joven con varios golpes en el cuerpo y una herida de bala directo al corazón, al verlo supo que su esposo estaba vivo-¡Resiste Fluke!



Al salir de la habitación, escucha un disparo en las caballerizas, viendo desde la ventana como los caballos corrían ante el sonido del arma y al fuego que empezaba a surgir.

-¡Deprisa!




En las caballerizas, Fluke se tocaba la herida que tenía en el costado de su abdomen, una herida de bala, el hombre frente a él también estaba herido, tanto por un cuchillo como por un arma de fuego.

-¿Qué es lo que desean de mi?-respirando con dificultad por el creciente fuego.

-Mi amo te quiere para él... eres una joya muy especial-tosiendo.

-¡Eso nunca¡-viendo como el sujeto de negro se levanta a pesar de las heridas para ir trás él.

-¡Ni se te ocurra tocarlo!-decía Ohm, dándole un disparo certero a la cabeza.

-¡Ohm!-viendo como iba hacia él, perdiendo el conocimiento en sus brazos.

-¡Noo!-viendo la herida en su abdomen, no entendiendo el porqué, ya que era muy bueno en la pelea -¡Llamen al helicóptero inmediatamente!




Mientras sacaba a Fluke de las caballerizas, ve escondido al pequeño hijo de su caballerango, que lloraba diciendo el nombre de su esposo.

-¡Fue mi culpa, yo lo distraje!

-Vamos Title, hay que salir de aquí-guiando al pequeño a la salida.







-¡Ohm!- gritaba Kao cuando llegó al hospital- ¿Cómo está?

-Estable- notando la preocupación de su amigo- La herida en su abdomen no fue de gravedad, aunque si perdió mucha sangre... afortunadamente Prem es del mismo tipo.

La distancia entre nosotrosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora