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Por primera vez en su vida Jungwon odiaba el fin de semana.
Odiaba no tener registrado a Sunoo en sus contactos y no saber dónde vivía el chico.
Odiaba no haber actuado a tiempo y evitar que Sunoo se fuera.
Y sobre todo se odiaba a sí mismo por ser tan estúpido.
Lo único bueno del interminable fin de semana era que le dio tiempo para ordenar sus pensamientos y sentimientos.
Estaba tan cegado por la fantasía del supuesto amor que sentía por Heeseung, que no se dio cuenta que Sunoo siempre había estado junto a él y para él.
Ahora que tenía todo claro no estaba dispuesto a perder la oportunidad de estar junto a Sunoo.
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Por fin el lunes había llegado, era justamente la hora de la salida, el consejo ya no se reuniría hasta nuevo aviso así que Jungwon tendría que buscar a Sunoo en el salón de éste.
Jungwon sabía que ese mes Sunoo tenía que hacer el aseo del salón, por lo que le daba la posibilidad de hacer lo que tenía planeado.
Llegó al salón de Sunoo, lo vio ahí limpiando el escritorio del profesor, se notaba triste y eso hizo sentir a Jungwon una punzada de culpa. Otros compañeros de su mayor también estaban aseando el aula, con cuidado de no atraer la atención de Sunoo, llamó a los otros chicos, les ofreció dinero con tal de que se fueran y lo dejaran a solas con él.
Jungwon se adentró al aula y cerró la puerta con seguro. Sunoo volteó por el ruido y al ver al pelinegro corrió hacia la salida, siendo detenido por Jungwon, quien lo rodeó con los brazos. Sunoo pataleó y trató de liberarse del agarre de su dongsaeng.
— ¡Suéltame!
— Solo escuche lo que tengo que decir, por favor.
Sunoo asintió no muy convencido, Jungwon lo soltó y empujó con suavidad al peliplata contra la pared, después tomó las manos de este entre la suyas y se arrodilló.
— Hyung, perdóneme, soy un imbécil. No me di cuenta que se sentía de esa forma a causa mía. —Las manos y voz de Jungwon temblaban, su rostro estaba tintado de un rojo pálido y su mirada no se atrevía a subir hacia los ojos del peliplata. — Yo estaba cegado por una fantasía que parecía que podía cumplirse, no quiero que crea que solo hago esto porque no pude lograr nada con Heeseung hyung, y-yo soy un estúpido. Estuve reflexionando mucho sobre mis sentimientos y... debería ser golpeado por hacer que su precioso rostro se llenara de lágrimas. Deberían molerme a golpes por haberle hecho sufrir tanto tiempo, y sé que quizá ya haya echado todo a perder y no merezco a un ser tan puro y bello como usted, pero, aun así, quiero decirle q-que y-yo t-también l-lo...
Jungwon no pudo terminar de hablar porque Sunoo lo jaló, haciéndolo quedar de pie, y lo abrazó con fuerza.
— Te perdono, y no es necesario que digas que me quieres. —Sunoo se alejó del abrazo para mirar a su menor y sonreírle. — Porque yo ya lo sé.
Jungwon correspondió la sonrisa.
— Ah, por cierto, aquí está su libreta. —Jungwon descolgó la mochila de sus hombros, y sacó la libreta para entregársela a su dueño.
— No tenías que devolverla.
— Claro que tenía, es su chismógrafo y no se dio cuenta de que le faltó contestar una pregunta.
Sunoo frunció el ceño con confusión, según lo que recordaba contestó todas las preguntas. Con curiosidad tomó su libreta y buscó la pregunta con su respuesta faltante.
— Está en la última hoja.
Sunoo fue rápido a la hoja que Jungwon le indicó, al leer la pregunta se llevó una mano a la boca por la sorpresa.
«¿Quiere ser mi novio?»Sunoo miró a Jungwon, éste tenía las mejillas rojas, volvió a tomarle las manos.
— ¿Me daría la oportunidad de ofrecerle el amor y atención que merece? Prometo no ser un idiota esta vez.
Sunoo asintió con mucho entusiasmo mientras lágrimas de felicidad comenzaban a inundarle los ojos, Jungwon lo cargó y dio una vuelta sobre sí mismo, con Sunoo en sus brazos. Los dos riendo felices, acercaron sus rostros para sellar su amor con un beso.
El amor no es fácil de encontrar, pero ya sabes, si te ofrecen contestar un chismógrafo, no te niegues, quizá puedas encontrar preguntas extrañas y divertidas o podrías encontrar al amor de tu vida.
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FIN
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#𝐄𝐋 𝐂𝐇𝐈𝐒𝐌𝐎́𝐆𝐑𝐀𝐅𝐎 || SunWon - ENHYPEN
Short StoryPor el aula U-127 circula una libreta con preguntas bobas que todos ahí deben responder. Un día la libreta pasa a manos de Yang Jungwon y éste decide contestarla por diversión. Sin embargo, se dará cuenta que algunas de esas preguntas no son normale...