Mati, ayudame a adoptar - litcko

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la felicidad que ambos sentían al regresar a casa era grande, estaban que radiaban bastante felicidad, los dos con una bella sonrisa pensando en lo feliz que serian los tres juntos.

solo había algo mauro pensaba que matias se iría luego de que aquella bebé fuera su hija, en si matias no tenia ningún pretexto para quedarse, mauro se había metido solo en eso y el lo haría solo, esta vez no metería a su amigo si este no quería estar cerca.

pensaba todo aquello sin imaginar que su mejor amigo deseaba estar allí con el educando a aquella bebé hermosa la cual había robado el corazón de ambos.

—Estoy bastante feliz — Dijo mauro una vez que subieron al auto. Matias miro a su amigo y sonrió

—has logrado tu propósito, serás padre — dijo matias, mauro le miro y le dio una amplia sonrisa, la cual parecía ser más la de un loco pervertido.
matias puso en marcha el auto

—Muero de hambre — Dijo mauro tocando su panza, matias no le miro solo se dedico a ver el camino — Querido y hermoso mejor amigo — Dijo mauro en un tono meloso

-Ouch- pensó matias mientras imaginaba a mauro con un arco lanzándole una flecha por la espalda, mientras el caía al suelo con una flecha clavada.

—Llévame a comer — Dijo mauro mirando a su amigo quien le dio una mirada rápidamente.

matias negó y mauro le miro de una mala manera

— matii.. — Lloriqueo y le jalo levemente de la manga de su camisa, matias le dio otra rápida mirada, pero esta vez le miro con ironía, mauro le hizo un puchero cuando matias le ignoró. — mati, soy tu esposo y como buen esposo que eres tienes que llevar a comer a tu marido si no quieres que muera de hambre! -— soltó tan de la nada alzando un poco la voz, matias soltó una fuerte y sonora carcajada, estaba comenzando ha amar la manera en la que mauro usaba su matrimonio como extorsión.

—¿Así? ¿y que te hace pensar que yo quiero que seas mi marido? — Pregunto matias.

Esta vez fue mauro quien se imagino con una flecha clavada en la espalda.

—mejor llévame al centro comercial, quiero comprar cosas para maria— Dijo mauro dejando el tema de la comida, matias bufo burlón y puso rumbo al centro comercial.

Las conversaciones en el auto se acabaron, mauro no insistió más y matias no sabia sobre que hablar.

—¿Cuándo comenzarás con tu trabajo? — Hablo mauro dejando el silencio, matias había olvidado su trabajó gracias a ese enamoramiento hacía mauro y todo el asunto de la adopción

—Mañana..— Dijo matias para dar vuelta y entrar al estacionamiento del centro comercial. mauro asintió eso significaba que matias no estaría, si no hasta noche en el departamento y aunque no sabia si regresaría a su departamento.

Al estacionar el auto ambos bajaron y entraron ha aquel centro comercial, una vez adentro miraron a su alrededor.

—¿Qué es lo que se necesita para un bebé? — pregunto mauro aun mirando el lugar en busca de alguna tienda de niños.

Realmente no tenia ni una idea de lo que los bebes usaban o necesitaban y por lo que veía matias tampoco tenia ni una idea, y era verdad ni el mayor sabia.

—Ah.. ¿pañales? — Dijo matias, mauro le miro irónico — ¿Que? es lo principal ¿no? — Dijo matias al ver como su amigo le miraba de una manera muy rara.

mauro comenzó a caminar dejando a un matias parado siguiéndole con la mirada, cuando el mayor reacciono camino detrás de el

Ambos chicos caminaron por el grande centro comercial hasta que por fin encontraron una tienda de bebés.