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Después de aquella confesión ambos fueron a recostarse, los dos juntos en la misma cama, como desde ahora en adelante sería.

Descansaron felizmente uno abrazado del otro, todo era tranquilo hasta la mañana siguiente.

—¡¡Arriba holgazanes!! — el dulce grito de una chica, seguido de aun golpe de puerta, se escuchó por toda la habitación, los chicos se levantaron asustados por aquello. — Bien ¿Qué fue lo que ocurrió? necesito saber ¡todo! — dijo la chica recalcando el "todo" y haciendo un arcoíris con sus manos frente a su cara.

mauro restregó su ojo derecho y miro a su hermana, quien estaba frente a ellos esperando a que contestará.

— ¿Cómo rayos entraste?— Preguntó Matías quien le miraba de mala manera, la chica levanto una de sus manos mostrando un juego de llaves — ¿Le diste llaves? — esta vez miro a mauro el ojiverde asintió arrepentido de haber hecho eso.

—lo hice — dice de mala manera mientras se levanta — recuérdame quitárselas — Le dijo a Matías, este bufo.

mauro se levantó directo a su armario por algo de ropa para tomar un baño.

— Bien, ¿me dirán que fue lo que paso? — Pregunto de nuevo la chica muy impaciente, mauro solo le ignoró y Matías hizo lo mismo — Oigan, ¡¡estoy aquí!!— dijo mientras movía sus brazos y se apuntaba a si misma

— ya te vimos — Dijo Matías la chica le miro mal, pero el la volvió a ignorar

Matías se acerco a mauro y se dieron una sonrisa de tontos enamorados, para darse su primer beso de "buenos días"

Cuando estuvieron cerca dejaron un tierno besos sobre sus labios, la chica frente a ellos solo rodó los ojos.

—Iré a hacer el desayuno. — Dijo Matías, mauro asintió con una sonrisa.

—Yo a darme un baño.. — el pecoso dijo mientras caminaba al baño.
Cuando ambos salieron del campo de visión de la chica esta solo dio un gritillo frustrada seguido de un "Y yo seré ignorada" para después ir tras Matías quien había comenzado hacer el desayuno.

Matías pensó que tal vez haría el desayuno en paz y tranquilo, pero al ver a la chica que acaba de llegar a la cocina y sentarse en uno de los bancos de la barra descarto la idea de hacer el desayuno tranquilo.

—¿no me dirán? — Preguntó la chica Matías le miro y suspiró.

—Tendremos una niña — fue lo único que dijo Matías, Nadia dio un segundo gritillo pero este fue de alegría.
Matías le miro mal mientras negaba.

La chica quien ahora miraba como Matías hacia el desayuno con su barbilla recargada en la palma de mano. Pensaba en ¿Cómo rayos Matías y mauro fueron a dar juntos? que ella y como todas las personas a su alrededor notaban desde que esos dos estaban en preparatoria que se querían, pero sabia que eran muy tontos como para notarlo, pero vaya sorpresa que no, aunque en realidad si.

La chica no dejo de hablar diciendo que le enseñaría a peinarse y pintarse las uñas, y le hablaría de chicos a lo que Matías le miro mal.

Cuando mauro salió de la ducha fue con aquellos dos quien hablaban, bueno Nadia hablaba y Matías solo la miraba mientras comía de su fruta picada.

—le hablare de los traperos y ella los amara — dijo la chica justo cuando mauro aparecía con cabello remojado.

—No le hablaras de chicos a mi hija, no seas mala influencia — dijo mauro mientras caminaba a tomar un baso de agua, pero antes le quitó el pedazo de manzana Matías antes de que este lo llevará a su boca.
matias le miro mal — mati ¿hoy no empezabas tu trabajo? — Preguntó el pecoso a su esposo, matias coloco los ojos en blanco después miro la hora

Mati, ayudame a adoptar - litcko Donde viven las historias. Descúbrelo ahora